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Descargo de responsabilidad: No soy dueño de Naruto 

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Capítulo 5

Esto... esto era una locura. La gente moría por todas partes. Los guardias armados apostados por toda la instalación estaban siendo abrumados y devorados por los zombis que, de algún modo, habían quedado sueltos. Los gritos. Oh, los gritos. Eran tantos, tantos. La sirena que sonaba de fondo parecía ahogada por los gritos.

En cuanto Naruto y los demás oyeron los gritos y la sirena, Dempsey, Nikolai y Takeo se unieron de inmediato y se apretaron contra la puerta para mantenerla cerrada cuando los zombis empezaron a golpearla para intentar entrar en la habitación. Naruto, por su parte, buscaba bajo el colchón de su cama un arma improvisada que había introducido de contrabando semanas atrás.

Sacó cuatro cuchillos de combate de debajo del colchón; tenía suerte de haberlos conseguido con lo estricta que era la seguridad últimamente. Se los habían robado a soldados que habían tenido la mala suerte de ser mordidos por zombis que se volvieron locos durante los meses en que empezaron a experimentar con ellos. Nadie comentó dónde habían ido a parar los cuchillos. Por alguna extraña razón, nunca prestaban atención a los cadáveres.

Naruto se levantó y se giró a medio camino para mirar a los demás, que intentaban, y no conseguían, mantener la puerta cerrada. Entrecerrando los ojos, Naruto se dio la vuelta por completo y se dirigió hacia los demás.

"Takeo, Nikolai, Dempsey". Les llamó incitándoles a dar media vuelta mientras mantenían su peso contra la puerta. Les tendió primero los cuchillos de combate con la empuñadura: "Coged esto, harán que matar a esos cabrones sea más fácil".

"¿De dónde los has sacado?" preguntó Dempsey completamente asombrado mientras él y los demás cogían los cuchillos de Naruto.

"Los robé. Suelen olvidarse con los muertos que intentan arrancarte la cabeza a mordiscos". respondió Naruto con facilidad. Era bastante fácil robar cuando la persona a la que le quitabas el cuchillo ya estaba muerta.

"Para que nos quede claro: ¿alguien sabe cómo matar algo que ya está muerto?". preguntó Dempsey, pues quería saber si alguien, excluyéndose a sí mismo, sabe cómo matar algo que ya está muerto.

"He visto a alemanes disparar a engendros infernales en la cabeza. Si los apuñalamos ahí morirán para siempre, ¿no?". respondió Nikolai antes de gruñir de esfuerzo cuando la puerta estuvo a punto de ceder ante ellos.

"Eso es algo que yo también he visto de estos, disgracefur peopre". Dijo Takeo con su marcado acento japonés sustituyendo las eles por las erres en su frase. Mostró los dientes con frustración al sentir que sus pies resbalaban contra el suelo. "¡Cuando salga de aquí mandaré a estos demonios de vuelta de donde vinieron!"

"¡Y yo ayudaré!" exclamó Naruto mientras se unía a ellos para intentar mantener la puerta cerrada. "¿Y en cuanto a que yo sepa cómo matarlos? Sí. Sé cómo acabar con ellos. Dispararles o apuñalarles en la cabeza parece funcionar".

Los cuatro se tensaron y contuvieron la respiración cuando oyeron disparos cerca de ellos. Los zombis que estaban al otro lado de la puerta dejaron de golpearla y se dirigieron hacia el sonido. El grupo oyó cómo los zombis se alejaban a trompicones, al tiempo que los disparos se acercaban cada vez más antes de cortarse bruscamente. Los disparos se reanudaron, seguidos poco después por los lamentos mortales de los muertos vivientes.

Naruto - Los viajeros entre dimensiones ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora