Only a Famous Crush?▪︎Matias Recalt

14

Estabamos tan bien, muy agitados por cierto ¡Mierda!

—¿¡Chicos, estan ahi!?— Blas gritó mientras le pegaba a la puerta

—¡Maldita Sea!— Elena brinco y busco su ropa rápidamente

Yo hice lo mismo, nos cambiamos en menos de 15 segundos.

—¿¡Chicos?!— Blas estaba preocupado, seguramente pensaba que la puerta se habia atrancado y todas las cosas se quedarian dentro, pobrecito, si supiera.

Rápidamente Elena cuando terminó de vestirse empezó a hechar su perfume, ni idea para que.

—¿Ahora que hacemos?— Elena susurro preocupada

—Abrir pues.

—¿¡Tu estas loco?! ¡Va a sospechar!

—No me molestaria de todas formas.

Elena me miro con la boca abierta y yo solo reí.

—¡Voy a llamar a Bayona!— Blas gritó

—¡Mierda!— susurre

Rápidamente cuando Blas se fué Elena y yo salimos hacia la nieve dejando la puerta sin seguro.

Seguíamos aún agitados, por lo de antes, Elena estaba avergonzada y no me queria mirar a los ojos.

Al ver ese suceso me acerque a ella y le bese la frente.

—¿Te puedo contar algo?— Elena habló con pena

—¡Claro que sí!

—Fue mi primera vez.

Al escuchar eso me quede sorprendido, y me quede pensando, habia perdido su virginidad, ¡conmigo!

Con razón ella estaba así, no sabia que hacer y me daba mucha vergüenza a mi también ya que para mi no era ni la primera ni la segunda.

Me senti culpable.

Narras tú:

Pude ver que a Matias los ojos se le abrían como platos al escuchar eso.

Tal vez no lo debi decir.

Bueno, al menos lo hiciste con alguien que amas.

En algo tienes razón.

También ya eres mayor de edad.

También tienes razón.

Mmm, lo disfrutaste?

Ya no quiero hablar contigo, chau.

—Te amo, Elena.

Mi vista se devolvió hacia él, y sonreí inconscientemente. Después de todo perderlo con él no era tan malo.

—Sabes que yo más, Matias.

De repente vimos como Blas se acercaba con Bayona hacia la cabaña, Bayona giro la perilla y se abrió, Blas quedo como tonto, me dio pena.

Matias solamente rió al ver la expresión de confundido de Blas, y Bayona se notaba levemente molesto por hacerlo perder su tiempo.

—¡Le juro que estaba cerrado!

—Pero esta abierto muchacho, me voy, adiós.

Blas se tapo los ojos.

Me dio penita haci que me levante para ir hacia él, pero Matias me tomo del brazo no tan fuerte pero dando entender que no vaya.

—Quedate conmigo.

—¿Por qué?

Frunció el ceño, después de lo que dijo Enzo seguramente tendria a Blas bajo guardia.