So hot (Liskook) +18

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Ajusté mí campera mientras caminaba de un lado a otro... Me revolvía mi pelo mientras pensaba una y otra vez que demonios diría al presionar aquel timbre.

Estaba frente a la casa de Rose... ¿Que demonios le diría?

" Oh no Rose... Solo intenté acostarme conmigo por presión social"

Me odiaría más de lo que ya lo hace... Estaba siendo un estúpido con ella, solo tenía que decirle que fue todo un error y que deberíamos seguir siendo amigos...

Cómo antes...

- Yah... Toca el maldito timbre. -Se habla a si mismo-

Caminó para la puerta y levantó el dedo para acercarlo al timbre... Me detengo rápidamente y niego.

- ¿Porque demonios me meto en estos líos? -Se queja el pelinegro-

- ¿jungkook? -Susurra confusa-

Me giré rápidamente... Rose me miraba desde la vereda, en sus manos tenía una bolsa de compras... Tragué en seco mirándola y una pequeña sonrisa nerviosa sale de mis labios.

- Rose... -Susurra el pelinegro- vine a hablar.

Ella mira al rededor y luego vuelve a mirarme...

- Ya casi son las diez de la noche... ¿No podías esperar a mañana? -Pregunta confusa-

Suspiré algo nervioso... La realidad es que estuve todo el día pensando en lo que pasó y solo quería arreglar las malditas cosas.

- Creo... Que es algo importante. -Murmura el pelinegro-

Ella asiente entendiendo mí punto... Y suspira para luego encogerse de hombros.

- ¿Mejor hablamos dentro? -Pregunta la rubia- realmente me estoy congelando aquí afuera.

Suspiré y asenti nervioso... Ella hace una pequeña sonrisa y se acerca a la puerta de su casa para abrirla.

Rápidamente entra y detrás de ella entro yo... Ella cierra la puerta y deja la bolsa de compras en un mueble al lado de la puerta.

- Ponte cómodo... -Murmura la rubia-

Rose habla mientras se quita la campera y camina hacia la cocina... Suspiré mirando al rededor y empecé a quitarme la campera para así estar más cómodo.

- ¿Quieres un café? -Pregunta la rubia- eso te ayudara para el frío.

Rose hablaba desde la cocina que no podía llegar a ver ya que había un pequeño muro que justo lo tapaba.

- de acuerdo... -Murmura el pelinegro-

Unos minutos pasaron y Rose salió de la cocina con dos tazas de café... Me senté en la silla y susurre un "gracias" cuando dejó la taza en frente mía y ella se sentó en la silla delante de mí.

Ella me miró con una pequeña sonrisa mientras yo le daba un sorbo al café...

- Bueno... -murmura la rubia- soy toda oidos.

Suspiré dejando la taza en la mesa...

- Bien... -Susurra nervioso el pelinegro-

Me acomodé en la silla algo nervioso... Jamás pensé que estaría rechazando Park Roseanne... Pero aquí estoy.

- Lo siento... -Murmura el pelinegro- realmente me equivoqué.

Ella frunce el ceño curiosa escuchandome... Di otro suspiro.