Emperatriz de mis sueños

73 8 0
                                    

Ven y enséñame a querer

Que este mundo puede ser

Algo más que un lugar tan vacío

Cariño mío.

 Mi nombre Francisco Guillermo Ochoa Magaña, omega de nacimiento del más puro linaje, forjado en el seno de una familia amorosa y cálida, hijo mayor de un matrimonio poderoso y respetable de aquel pueblito, siempre lleve una vida llena de lujos y comodidades, no puedo quejarme de mi infancia ni adolescencia, nunca tuve carencias de absolutamente nada, en mi familia éramos únicamente mis queridos padres, junto con mi pequeña hermana menor, Ana, alfa de nacimiento.

Podría pensarse que al ser la menor y tener una casta superior hubo distinciones en cuanto a la educación y crianza de ambos, sin embargo mis padres jamás demostraron una preferencia hacia ninguno, fuimos educados de la misma manera, la única diferencia fue el propósito de cada uno, Ana debía aprender ciertas cosas como alfa que le ayudarían en el futuro, por el contrario, yo aprendí ciertas cosas que eran vitales para mi desarrollo como omega a futuro, sin embargo ambos teníamos el mismo propósito en la vida prepararnos para algún día ser dignos de cortejar y ser cortejado por un alfa y omega digno de nosotros, casarnos y formar una bella familia.

Mi formación académica se dio en prestigiosos colegios, con calificaciones perfectas y comportamiento de excelencia, lo mismo que mi hermana, nunca fuimos motivo de queja para nuestros padres, en mis tiempos libres, me gustaba realizar actividades sociales o culturales que me permitieran cultivarme más para tener mayor conocimiento en diferentes temas, quería ser alguien que resaltará en la sociedad. Mi belleza natural únicamente vino a dar el toque final a la combinación perfecta para un omega excepcional, un hermoso omega de esbelta y delicada figura muy bien proporcionada y distribuida, rasgos finos y una personalidad amable, carismática y risueña.

Todo era perfecto en mi vida, tenía una bella y amorosa familia, amigos reales, sinceros y una vida de ensueño para cualquiera, lo único que hacía falta era la llegada del amor, pero no de cualquiera, sino de ese amor, un amor único, especial e irrepetible. Tenía demasiados pretendientes, muchos más de los que me gustaría, sin embargo, sabía que la mayoría solo quería una aventura pasajera conmigo, era bien sabido que yo era virgen y así pensaba mantenerme hasta el momento de mi boda, quería entregarme por completo solamente a un alfa y ese sería mi esposo, no me negaba a salir de vez en cuando a citas, sin embargo, ninguna llegaba a llenar mis expectativas al cien, siempre les faltaba algo, tuve un novio antes de conocer al amor de mi vida, mi relación al principio fue hermosa, estaba a punto de ceder a su insistencia por estar juntos, creía que él sería con quien paulatinamente me casaría, sin embargo no fue así y por fortuna salí de ahí antes de cometer una tontería, pensé que nunca iba a encontrar a mi príncipe azul, hasta esa fiesta, el alfa más hermoso que he visto en mis 20 años, varonil, galante, interesante, el amor de mi vida, mi príncipe valiente de ensueño, mi perdición absoluta.

Toma mi alma entre tus brazos,

Levanta mis pedazos,

Dibuja para siempre tus besos por todo mi cuerpo

Y vuélvete al viento que cumpla tus sueños.

Emperatriz de mis sueños – Monica Naranjo

TequilaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora