Extras y descartados (Mis historias)

Capitulo eliminado (¡¿Ser tu novia?!)

Iban pasando algunos ciclistas, me congelé al ver que uno de ellos iba a caerse.

Se salió del camino y impacto conmigo.

El ardor en mis rodillas y palmas fue lo primero que sentí.

Me queje y me levanté viendo mis palmas que estaban raspadas al igual que mis rodillas y suponía que mi rostro porque comencé a sentir también el ardor en mi mejilla.

— Disculpa — dijo el chico de la bici apenado levantándose.

— No te preocupes — le respondí.

Enserio que la vida me odiaba ¿Porqué no mejor me atropello un auto? O un camión, o una trituradora…

— ¿Estás bien?— Preguntó Silvio viéndome.

— ¿Qué crees?— le pregunté.

El tomó mi barbilla y hizo una mueca de dolor al ver mi rostro.

Al parecer sí, me había lastimado también el rostro.

— ¿Eres un imán para los problemas?— me preguntó Silvio mientras tocaba con su pulgar bajo mi ojo derecho, me queje, no era una cortada era un golpe.

Ni siquiera yo sé como me golpee el rostro.

— ¿Está mal?— Pregunté.

— Ehh se te está formando un moretón y tienes una cortada en la frente, nariz mejilla y creo un rasguño en el labio — me informo.

— Así no podemos llegar con tu madre, va a creer me maltratas— bromeé y el soltó un bufido.

— Estoy yo aquí preocupado por tí y tu bromeando— dijo y se arrodilló frente a mí.

Por instinto baje la falda incómodo.

— mi casa está cerca, vamos a limpiar esas heridas a ver si al menos alguna requiere puntadas — dijo y comenzó a caminar.

No me gustaba saber que estaba poniéndome como prioridad¿Porqué haría eso?

— Oye, puedo regresar a mi casa no es necesario que te molestes — dije y el alzó la ceja.

— No, usted prometió hacerlo hoy gratis así que aunque sea en el hospital va a fingir ser mí novia — La puta que lo parió.

¿Osea que ni aunque me lance a las vías del tren me librare de este man?

Silvio caminó unos pasos y iba a seguirlo pero me queje sosteniendo mi tobillo, la punzada en el había sido muy dolorosa.

— ¿Sucede algo?— Preguntó Silvio arrodillándose junto a mí.

— Creo me torcí el tobillo — murmuré.

El me observo unos segundos.

— Vas a odiar esto pero te voy a cargar — me informo.

Obviamente lo iba a odiar.

— ¿Puedes conmigo? Wey te recuerdo que-

— Muzi, te cargue en el restaurante, pesas menos que mi ex novia — dijo y aparte la mirada.

El me cargó en su espalda y solamente podía ver incómodo su perfil.

— Eres muy ligero — mencionó unos minutos después.

— Gracias — dije sin saber cómo reaccionar.

— No era un cumplido — Me dijo y me quedé en silencio.

Llegamos a su casa, era de un piso, dos habitaciones, un baño y la cocina sala.

Me dejó en el sillón y subió a buscar algo.