Capitulo 34

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febrero, año -3

"No llores", dijo Ben, arrodillándose junto a Gwen y frotando su espalda para consolarla. "Está bien, ¿de acuerdo?"

Gwen estaba sollozando incontrolablemente, acurrucada en un ovillo, presionando su cara contra sus rodillas. "¡No, no lo es! ", se lamentó Gwen. "¡El se fue! "

"Yo te ayudaré", dijo Ben. "Te buscaré un gato nuevo".

"¡No!" Gwen negó con la cabeza. "¡No, no, no! ¡No será lo mismo!"

"¡Entonces le devolveré la vida! ¡O retrocederé en el tiempo y evitaré que muera!" Ben declaró.

"¡Eso no funcionará!" Dijo Gwen entre lágrimas. "Se ha ido. Iba a estar conmigo para siempre, pero ahora ya no estará..."

"Pero tengo que ayudar de alguna manera", insistió Ben. "Es mi trabajo."

Gwen siguió llorando, sacudiendo la cabeza con los ojos cerrados.

Ben se deslizó hasta arrodillarse frente a ella y luego extendió la mano para ponerle las manos sobre los hombros. "Gwen. Déjame ayudarte. No quiero que llores".

Todavía sollozando, Gwen levantó la cabeza y miró a su prima a los ojos.

"Haré todo lo que pueda y me quedaré contigo hasta que te sientas mejor. ¿Está bien?"

Gwen siguió sollozando por un momento. "Tú... tú... ¿lo prometes?"

"Lo prometo", dijo Ben. "Puede que no sea tan bueno como un gato, pero al menos no te arañaré tanto".

Gwen logró reírse un poco ante la broma de Ben, incluso si las lágrimas todavía corrían por su rostro.

"¿Ves? ¡Ya te estoy haciendo sentir mejor!" dijo Ben. "¡Soy increíble en esto!"

Gwen sonrió por un momento, pero se desvaneció cuando cerró los ojos y cayó en los brazos de Ben. Ben la abrazó y ella volvió a llorar en su pecho.

"Shh... Shh... Está bien", le aseguró Ben. Le frotó suavemente la espalda y le susurró, como hacía su madre cuando lloraba. No le importaba en absoluto sentarse allí con ella. Iba a quedarse con ella todo el tiempo que ella lo necesitara.

Diciembre, Año 4 (Parte 1)

Ben estaba muy confundido cuando despertó. Un recuerdo extremadamente vago flotaba en su cabeza, pero no podía ubicarlo.

¿Tenía un gato?

Ben negó con la cabeza. Eso no fue todo. Gwen estaba en el sueño, así que tal vez ella y sus camisetas de gato le hacían pensar en un gato.

¿Pero qué estaba haciendo Gwen allí? ¿No nos odiábamos cuando éramos niños?

No podía decir si su sueño había sido siquiera un recuerdo real. Sin embargo, dejó de pensar en ello después de un minuto, se encogió de hombros y tomó su teléfono para verificar la hora. Era sábado por la mañana. Tenía planes de ir al centro comercial con Lucy hoy. Ella había aceptado, con bastante entusiasmo, ayudarlo a elegir un regalo de cumpleaños para Gwen. Se alegraba de tenerla a bordo porque se le habían quedado completamente las ideas en blanco.

Quiero hacer algo bueno por ella.

Ben consideró pedirle a su madre que lo llevara al centro comercial, pero decidió no hacerlo. No sabía cuánto tiempo iba a tardar, así que no quería que ella tuviera que esperarla. También estaba un poco avergonzado como para preguntar ya que pensaba que querer ir al centro comercial era algo demasiado propio de una "adolescente". Entonces decidió caminar. En el camino, tuvo un pensamiento.

Ben x GwenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora