Cap 36: Vengo a visitar a su esposa

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(Aclaración: Ke Bao es el niño, su nombre es Ji Ke, pero le dice Ke Bao de cariño, como apodo. Significa como "Pequeño tesoro" o algo así entendí, pero no estoy segura)

Ji He había olvidado por completo que aún le quedaba una última clase. Salió corriendo, con la única intención de llevarse a su precioso Ke Bao y esconderlo en un lugar donde Gu Zongyan no pudiera encontrarlos.

No podía permitir que Gu Zongyan supiera de la existencia de Ke Bao, o trataría de llevárselo también. Deciría que es su tesoro, su pequeño, y nadie puede arrebatárselo.

Ji He estaba decidido. Inmediatamente tomó un taxi hacia la guardería.

Ke Bao estaba agachado en el patio, compitiendo en la construcción de bloques de madera con un grupo de pequeños de cabello rubio y ojos verdes. Su torre de bloques estaba chueca, pero era la más alta entre los niños. Quería hacerla aún más alta, cuando escuchó a la maestra llamar su nombre.

El pequeño tenía buena vista. Levantó la cabeza y vio a Ji He parado en la entrada. Sin esperar a que la maestra dijera algo, dejó sus amados bloques y corrió hacia Ji He gritando:

"¡Papi!"

Ji He se agachó para recibir al pequeño misil que se abalanzaba sobre él. Lo sostuvo de las piernas y lo levantó en sus brazos.

Ke Bao le rodeó el cuello con los bracitos, y feliz exclamó:

"¡Papi vino rápido por Ke Bao!"

¿Cómo iba a saber él que Ji He había faltado a clases para recogerlo? Ji He lo apretó fuerte contra su pecho. Su rostro aún reflejaba la conmoción, pero logró esbozar una sonrisa tranquila:

"Papi te extrañaba".

Ke Bao sonrió radiante, como un cachorrito restregando su peluda cabecita contra el cuello de Ji He con cariño.

Tras explicar la situación a la profesora, Ji He bajó a Ke Bao y tomados de la mano regresaron a casa.

La mente de Ji He era un torbellino. La repentina aparición de Gu Zongyan lo había asustado y desconcertado. Solo quería escapar, pero este era el lugar donde habían vivido por tres años. Ke Bao conocía el entorno, y él acababa de postular a un posgrado, su vida finalmente comenzaba a encaminarse, ¿cómo podía abandonarlo todo y huir a otra parte?

Y aunque tuvieran que irse nuevamente, ¿a dónde? ¿Con nuevas identidades y a otro país? Incluso después de tanto tiempo transcurrido, Gu Zongyan les había encontrado. ¿A dónde más podría escapar?

Ji He frunció el ceño, sin comprender a Gu Zongyan. Debería estar casado con Lin Shuran, viviendo felices en una dulce luna de miel. ¿Por qué aún se acordaba de alguien como él? ¿Por qué se empeñaba tanto en encontrarlo y llevarlo de regreso?

¿Para qué quería llevarlo? ¿Para que volviera a ser su pájaro enjaulado, y observarlo en su matrimonio feliz con Lin Shuran?

¿O era para vengarse?

¿Vengarse porque se había aliado con Zhou Shufeng para revelar el paradero de Xiao Yuanshan?

Pero Shufeng le había dicho que Xiao Yuanshan terminó muriendo a manos de Zhou Yang, y los cargamentos de los Xiao finalmente cayeron en manos de Gu Zongyan.

Entonces ¿era solo para vengarse de él por haberlo engañado?

Todas esas posibilidades pasaron por la mente de Ji He mientras caminaba cabizbajo y pensativo. De repente sintió un pequeño tirón en su mano. Reaccionó y miró a Ke Bao.

El pequeño también tenía el ceño fruncido. Jaló a Ji He para que se agachara y le susurró al oído: "Ese señor me está mirando".

Ji He se sobresaltó y siguió su mirada. Era Gu Zongyan.

Después de patear al gong tirano, quedé embarazadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora