Después de patear al gong tirano

Cap 38: Buenos días

Gu Zongyan dijo tantas cosas, pero sólo hizo que Ji He se sorprendiera por los cambios en la trama, sin alterar en absoluto su decisión previa.

Respondió con indiferencia: "Ya veo..."

Evidentemente Gu Zongyan no estaba satisfecho con su respuesta, sus cejas fruncidas no se habían relajado en todo el día.

Dijo: "Bien, vuelve conmigo".

Él había aclarado sus sentimientos, así que asumió que los demás también deberían saberlo, dando por sentado que Ji He accedería y volvería con él a China, pero la realidad no era como él deseaba.

"No, gracias". Ji He negó lentamente con la cabeza, con firmeza.

"Puedes llevarte al niño contigo", Gu Zongyan pensó que estaba preocupado por el niño, y con voz fría le aseguró: "Tu hijo, no le haré nada".

"No tiene nada que ver con el niño", Ji He bajó la cabeza, sus uñas inconscientemente frotaban la tela sobre sus rodillas, su tono era suave pero decidido: "No podemos estar juntos".

La respiración de Gu Zongyan se detuvo claramente por un momento.

"¿Por qué?" Preguntó con voz grave.

La brillante luz iluminaba la corona de la cabeza de Ji He, la sombra de su cabello negro ocultaba sus pestañas, dijo en voz baja: "Te has confundido, tal vez no me gustas, sino que te gusta esta sensación... Pasará rápido".

Hizo una pausa, los nudillos sobre sus rodillas se flexionaron, y dijo: "En el futuro conocerás a alguien que realmente te guste, entonces lo entenderás, yo, yo no te convengo".

El cuerpo de Gu Zongyan se inclinó ligeramente hacia atrás, su mirada fija en el remolino de cabello del chico, guardando silencio de nuevo.

"¿Por qué estás tan seguro?" Su voz era fría.

Porque ese era el final predestinado de la historia, pensó Ji He para sí mismo, pero obviamente no podía decirlo, y Gu Zongyan, como era de esperar, no obtuvo respuesta.

Pero Gu Zongyan tampoco necesitaba una respuesta, no era tonto.

"Ji He", inhaló profundamente, como conteniendo algo, y dijo: "Sé que tienes algunos secretos, probablemente relacionados con predecir el futuro o algo así, por eso no quisiste hacer un trato con Ji Hairuo, y huiste a toda costa. También sé algo sobre mi matrimonio". (NT: Tan pendejo no es)

"Pero te digo, te equivocas".

"Gu Zongyan no puede ni siquiera determinar de quién le gusta", dijo bruscamente interrumpiendo a Ji He, su mirada era como un remolino negro, profunda e insondable. (NT:

Mirando a Ji He, dijo: "Tampoco creas que puedes decidir tú".

¿Cómo es posible que en los últimos tres años, tantos días y noches, nadie lo sepa mejor que él?

Pero Ji He no puede comprender las emociones internas de los demás. Tiene su propio conjunto de opiniones y persistencia, y también sigue el instinto de evitar daños: Gu Zongyan es demasiado peligroso. No quiere que lo quemen de nuevo, sin mencionar que ahora no es el único.

Bajó la cabeza, expresando en silencio y obstinadamente su actitud.

Gu Zongyan lo miró, sus ojos brillaban con impaciencia, por primera vez en su vida, se sentía impotente.

Ji He es demasiado astuto. Por supuesto, puede recuperarlo con fuerza. Como hace tres años, lo trajo de regreso del hotel en la pequeña ciudad y lo encarceló en la villa, ¿pero cuál es el punto? Ji He no quiere.