Jenna Ortega

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Pov Jenna

Es guapísima la nueva maestra de español - escuché murmurar a uno de mis alumnos

Está buenísima - susurro otra alumna

Hey, no es manera de referirse a sus docentes, es la última vez que escucho que hablan de esa manera sobre ella o alguna otra maestra, ¿entendieron? - dije en voz alta, todos asintieron con la cabeza - ahora saquen sus cuadernos, busquen su tarea, mientras anotare algo en el pizarrón

Había escuchado hablar al director sobre esa nueva maestra, hubo una pequeña reunión informal para conocerla, pero no pude llegar a tiempo por un imprevisto, ahora me arrepiento de no haber ido, a lo que recuerdo es que es recién egresada, o sea que le gano por unos cuantos años, es latina, por eso es maestra de español, pero domina a la perfección tres idiomas, aparte de inglés, si no me equivoco la otra lengua es francés.

Miss Ortega, hablan a la puerta - asentí yendo a abrirla

Me quedé parada mirándola, sin pensarlo mucho escanee su cuerpo, era hermosa, con unas curvas fenomenales, iba vestida sencilla, pero su porte demasiado elegante.

Me imagino que usted es la maestra Ortega - mencionó sacándome de mis pensamientos

Sí, disculpa, estoy algo disociada - sonrió amablemente

Su sonrisa es hermosa, parece de comercial de pasta dental.

No tiene de que disculparse Miss Ortega - su acento latino hizo que mi piel se erizara - me presento, soy t/n Santos, vine a molestarla porque olvidé mi celular en el escritorio, quería pedirle si podía dármelo

No es ninguna molestia profesora Santos, permitame iré por el - asintió levemente

Suspiré yendo al escritorio, realmente es demasiado hermosa, y su cuerpo es espectacular, tomé el móvil y me dirigí nuevamente a la puerta.

Muchas gracias, y sólo dime t/n - sonreí sin poder evitarlo

No hay de que agradecer, y muy bien, entonces tu dime Jenna - volvió a sonreír, su sensualidad era algo que me mataba

Dejó que siga su clase, después la buscaré para tomar un café - asentí rápidamente

Sí, claro, hasta luego - se despidió alzando su mano

Quedé encantada por la nueva profesora, jamás me imagine que sería así de guapa, la antigua profesora era una señora mayor, amable, pero con sus ideologías un poco pasadas, cuando entré recién egresada había más profesores mayores, pero ya varios se han jubilado, incluida esa maestra, no quiero sonar grosera, pero fue una bendición que lo haya hecho.

Bien chicos, ¿ya tienen la tarea lista? - varios contestaron que sí - bueno ya saben como reviso la tarea, así que vamos

(...)

Pov t/n Santos

Entonces, ¿qué opinas?, ¿aceptas? - cuestionó Noah parado enfrente de mi

Noah, te diré algo, y no quiero que sea algo por lo cual laboralmente nos llevemos mal, pero a mi no me gustan los chicos - su rostro cambió a un semblante molesto y de asco

¿Qué?, ¿es enserió?, esto lo tiene que saber la directora, que asco trabajar con alguien así - suspiré viendo como salía histérico por la puerta

(...)

¿Me mando llamar directora? - asintió haciendo seña de que pasara a su oficina, como lo supuse estaba Noah ahí

Me comento el profesor sobre sus preferencias sexuales, y sólo quiero dejar algo claro - agache un poco la mirada, me sentía apenada, y avergonzada por la situación - profesor Smith, recibirá una sanción por discriminación hacía su compañera, la señorita Santos

Él intento interrumpir, sin embargo ella lo callo.

Aquí no nos interesan las preferencias sexuales de las y los profesores, nos interesa la calidad de educación que pueden ofrecerle a nuestros alumnos, así que le pido que se retire, pero antes ofrezca una disculpa a la profesora - el me miró con coraje

Perdón profesora, compermiso - salió echo furia de ahí

Una disculpa de verdad, vaya manera de darle la bienvenida - sonreí de lado

No se preocupe directora, y muchas gracias, de verdad - me devolvió la sonrisa negando con la cabeza

No tiene de que agradecer, puede ir a continuar con lo que estaba haciendo - agradecí saliendo de la oficina

¿Todo bien Miss Santos? - volteé encontrando a la profesora Ortega con una sonrisa radiante

Sí, todo bien, gracias, sólo un percance con un profesor - me miró confusa - ¿tiene algo que hacer?

No, de hecho iba hacía la sala de maestros, ¿gustas venir? - asentí yendo con ella

(...)

Estuve hablando con Jenna al rededor de dos horas, las dos teníamos clases libres, almorzamos juntas también, fue demasiado cómodo pues en la sala jamás entra alguien más; la verdad es una chica bastante interesante, es unos años mayor que yo, demasiado inteligente, y tiene buenos temas de conversación, sabe escuchar muy bien.

Famosas y tu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora