La Computadora.

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—Oye hermana, ¿Quieres jugar? –El niño tricolor la observó, simplemente se había asomado por la puerta de la habitación con tranquilidad—.

La tricolor giró lentamente luego de escuchar su voz, lo vió allí con la misma ropa y apariencia como si nada hubiese pasado, su cuerpo se movió solo para acariciarse pero cuando sus manos estuvieron a punto de tocarlo… decidió no hacerlo. Solo lo observó y parpadeó cuando el más bajo se giró y comenzó a caminar a la oficina de su padre en el primer piso de la casa, lo siguió caminando tras él como siempre y lo vió señalar a la computadora.

—Hay juegos interesantes, me gusta uno de bloques de colores que debes acomodar como un muro para ganar –Este solo siguió hablando casualmente como si fuese algo habitual, como si la sugerencia fuese común—.

Como hija sobreprotegida no tenía mucha noción de lo que era el internet, pero decidí sentarme en la silla de mi padre y buscar lo que había dicho él, tratando de no mirar mucho de soslayo a mi hermano para ver si seguía ahí aún. Así pasaron un par de horas explorando cosas, hasta que volvió a hablar.

—Esto se está volviendo aburrido…. Busquemos cosas más interesantes –Y entonces señaló al ícono del navegador, observando a la más alta hacer lo que decía– Busca sobre Omsk.

Era el lugar en el que vivíamos, así que no le vi nada de extraño y lo hice, pasamos el siguiente rato viendo fotografías del pueblo y cada cierto tiempo él me sugería buscar otras cosas.

—Ahora West Deutschland. –Murmuró el niño con los ojos en el monitor de la computadora, con su expresión en simple relajo—.

Escribí lo que me dijo y entré al primer artículo que salió, “Alemania del Oeste, desapareció de su hogar sin dejar rastro el 9 de Noviembre de xxxx en la ciudad rusa de Omsk, lo único que falta es su mochila escolar. Las autoridades internacionales han intentado comunicarse sin éxito con sus padres, Sovietsky Soyuz y Drittes Reich, No fue visto saliendo de casa y no fue visto después de la escuela” la cabeza comenzó a dolerme viendo las fotografías de los carteles de Se Busca, era mi hermano.

—.....¿Mochila escolar?.. –Fue lo único que pudo sobresalir en el caos de su cabeza en ése momento, recordando algo– ¿Como la que encontramos en el jardín?..

Él solo asintió despacio girando su cabeza hacia la ventana en la oficina de mi padre, que daba hacia el jardín.

—Ábrela, por favor –Se limitó a decir el de ojos azules de pie junto a la ventana, a pesar del clima frío su respiración no empañaba la ventana—.

Llamado Atemporal  ||Germany Countryhumans||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora