Capitulo 3

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UNA SEMANA ANTES...

                                    Dorian

Miro por el palco el escenario del concierto al que fui obligado a venir por uno de mis más grandes socios, desde que partí de Italia no eh tenido un respiro, llevo más de una semana en esta ciudad, si me hubieran dicho que era un jodido concierto de música clásica en ningún momento hubiera dicho que si a reunirme en esté lugar.

Me centro en los documentos que me dio Jack, mi abogado de toda la vida, releeo todas y cada una de las cláusulas del nuevo contrato dónde me ceden todo el poder sobre unas cuantas hectáreas que me servirán para unos proyectos, sabe lo que le conviene al maldito bastardo de Robert, sabe que si no me cede este control, lo tomare por la fuerza y eso incluye su cabeza en una bandeja servida para mis perros.

Me exaspera que no haya llegado aún solo me esta quitando mi valioso tiempo, no entiende que no es el único con el que tengo negocios importantes en esta maldita ciudad, el enojo de que me haga esperar aún sabiendo que ya eh esperado así y todo por una maldita firma, desde hace más de dos semanas que estoy a la espera de esa estupida firma, me hace querer sacar mi enojo con un buen polvo y ya se quien será la que me quitara el estres de esta semana.

Una mujer entra en el palco privado y me deja una botella de Brandi, «indiso de que el estupido de Robert esta aquí », se cree el dueño de este lugar y todo España.

Se le esta olvidando que por mi es que esta donde esta y tiene el poder que tiene.

-Saca a esa gente de esas casas entiende que es donde quiero el nuevo complejo,- escucho la voz que eh comenzado a aborrecer, se acerca y uno de sus mozos le quitan el gabán que lleva sobrepuesto encima de su traje barato- si, como sea, te llamo luego estoy en algo importante-cuelga su llamada y se sienta en el lugar que esta junto al mío con la clase que ni en mil vidas tendra- mi brandi y el whisky del buen Dorian, es un...

-Para mi no es un gusto verte, si es lo que pensabas decir, Jack,-hablo a mi abogado chasqueando mis dedos y enseguida le extiende una copia del contrato que debe firmar donde me cede todo lo que acordamos- Ahora no tengo tiempo de esta ridiculez de que me hayas hecho venir a esta porqueria, sabes que odio esto.

-Este no es un evento de beneficencia a los que eres obligado a ir o bueno, a los que te auto obligas a ir, esto si es de clase.- lee el documento se lo pasa a su abogado a que lo lea y me exasaspero más, me tomo el whisky de un solo trago.

Por lo menos es de buena calidad y no como las porquerias que suele tomar, me quedo viendo por el palco al escenario, veo como un par de de personas entran y acomodan algunas cosas, un señor entra detras de ellos y veo como les indica algo. El inutil del abogado incompetente de Robert sigue leyendo, me sirven otro vaso y no dura mucho lleno, me lo termino y la mujer que nos sirve se pone nerviosa cada vez que se acerca a servirme un trago nuevo, me rosa la mano y enseguida  veo el rubor en su rostro, susurra un lo siento bajito y la corro con la mirada.

El abogado por fin termina y le da un asentimiento de que puede proceder con la firma, lo hace sin renegar, justo cuando me lo entrega las luces del lugar se apagan y enseguida llevo mi mano a la parte trasera baja de mi espalda donde guardo mi pequeña arma.

-Tranquilo Dorian- me sujeta Robert del brazo para calmarme pero eso solo me proboca querer darle un tiro entre ceja y ceja- solo es el aviso de que el concierto esta por empezar.

Solo el destino lo sabe (BORRADOR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora