El Hilo Rojo

Último día

📍Camila
la noche anterior había sido muy larga, después de todo lo que había hablado con Borja no había parada de pensar, en que tenía que hacer ahora, yo suponía que tenía que empezar con él a comportarme como de verdad sentía que tenía que hacerlo, pero realmente ¿eso estaba bien?. No había nadie más que no fuera mi abuela que pudiera ayudarme en eso, así que sin pensarlo dos veces la llamé.
-Hola abuela!!- empecé diciendo cuando me respondió
-Hola preciosa mía, ¿Cómo está yendo el viaje?- me pregunto ella
- Genial abuela.
-Me alegro mucho cariño, ¿Paso algo?- me preguntó sabiendo que por algo la había llamado
-Lo cierto es que si- Le expliqué todo lo que había pasado en apenas dos días, y que no sabía muy bien cómo llevar la situación
-Mi niña- empezó diciendo- Todos aquí sabemos que tú y él tenéis una conexión especial desde pequeños, y esa conexión nunca se ha roto, y lo sabéis los dos. Si un consejo es lo que pides, yo te digo que hagas lo que sientas en ese momento, vosotros estáis destinado a estar juntos y así será.  Sabes que la yaya es muy sabia.
-Te voy a hacer caso, al fin y al cabo nunca te equivocas- le dije riendo.
Pasé un rato más hablando con ella, de cómo estaba siendo todo y de cómo me sentía al respecto hasta que poco después salió de nuestra cabaña Borja.
-Buenoos diaaas- llegó a mi lado depositando un beso en mi mejilla
-Pásame con él- me dijo mi abuela al teléfono
-Toma es mi abuela- le dije pasándole el móvil
-Holaa, ¿Cómo está?- lo oí alejándose.
Yo me metí en la cabaña a esperar a que terminara su preciada conversación. Plex ya estaba con la cámara en la mano hablando con más energía que un niño de tres años, en cambio Adrián estaba tirado en la cama súper cansado y reventado.
- Buenos días chicos- dije yo llegando al lado de Dani- espero que anoche hayáis descansado mejor que yo
-Recomendación, nunca deis la vuelta al mundo- gritó Jorge desde el baño.
Me alejé de plex riendo, llegando a donde estaba Jopa
- ¿Por qué has dormido mal?- me preguntó nada más llegue a la puerta del baño
- Pensando en las cosas B- respondí guiñando el ojo
-Ya me contarás Bella durmiente.
Al poco tiempo entró Borja con mi móvil en su mano, y una sonrisa la cual me daba a entender que mi abuela le había dicho algo de mi
-¿Con quien hablabas?- le preguntó Adrian
- Con la abuela de Camila.
Nadie se sorprendió ya que sabían que él en mi familia era uno más, pero yo, yo sabía de que habían hablado y me atemorizaba lo que conllevaría eso.

Ya habíamos terminado de desayunar y poníamos rumbo al segundo y último safari de nuestro viaje a África, en este no teníamos ninguna meta, simplemente ver unos pocos animalitos.
Cuando terminó el Safari, volvimos al recinto a comer, ya que por la tarde visitaríamos unos tribus locales y veríamos cómo es su estilo de vida
-Borja, al final llamamos a Lili para lo Australia- Preguntó Dani.
Al escuchar su nombre sentí una presión en el pecho mientras abría mucho los ojos,
Borja, sentado a mi lado se dio cuenta de mi reacción y posó mi mano sobre mi muslo.
-Ya lo vamos viendo, según como vayan las cosas- dije él lo más sereno posible.
Yo me levanté, retiré mi plato de la mesa, cogí mi móvil y me alejé de allí diciendo en alto que me iba a la cabaña a descansar antes de la excursión que venía después. Me atormentaba la idea de volver a ver a Lili, no por ella, ya que es majísima y su forma de ser congeniaba mucho conmigo si no por Borja, por volver a verlos juntos y junto a ellos la idea de que volviesen y yo quedara con el corazón hecho trozos otra vez.
Una vez llegué a la cabaña me acosté en la cama y lloré, no sé cuánto tiempo, pero sabía que había sido bastante. Después me dormí, necesitaba descansar en serio, pasado un rato noté como alguien se acostaba al lado mío y pasaba un brazo a mi alrededor, sabía que era Borja, pero no tenía las ganas como para abrir los ojos.
-Camila, hablemos porfavor- me dijo obligándome a abrir los ojos y girarme para mirarlo
-¿ Qué quieres Borja? Estoy cansada, quiero dormir antes de la excursión- dicho eso me volví a dar la vuelta esperando que se fuera y me dejara sola, pero no fue eso lo que hizo
-Habíamos hablado de invitar a Lili antes de saber que tú venías, antes de todo lo que hemos hablado- empezó a explicar- no te molestes conmigo por esto porfavor, nada de lo que te he dicho y te he mostrado es mentira, ni estoy jugando contigo, yo de verdad te quiero.
Volví a girarme, sus ojos me transmitían una vulnerabilidad que me asustaba, me hacía preguntarme que hacíamos en ese punto de nuevo, no quería volver a llorar, no quería pasarlo mal de nuevo pero si quería estar a su lado, necesitaba de su calor y de su compañía. Como mi abuela me había aconsejado seguiría lo que sentía, seguiría nuestro hilo rojo.

-Y esta es la primera tribu, aquí solo veremos sus casitas y poco más- llegó diciendo plex a la cámara- ¿Tu que expectativas tienes con esta excursión Cam?
-Tengo muchas ganas, de pequeña siempre veía documentales sobre esto con mi abuela, tengo ganas de ver como es en realidad.

Ver las casas y las familias de la tribu fue muy bonito e interesante, me encanta conocer culturas y costumbres, y la compañía lo había hecho aún mejor, me había pasado toda la excursión recordando con Borja las cosas que salían en los documentales, nos daba tanta nostalgia.

Pusimos rumbo a la segunda tribu, con esta saldríamos a cazar, eso me daba un pco más de miedito, lo veía algo muy violento, pero era parte de la excursión y había que hacerlo. Cuando llegamos nos recibieron con la típica bienvenida de ellos y pasaron a explicarnos cómo lo haríamos, con quién iría cada uno y cosas así, yo y Borja iríamos con Lauk a cazar aves, que según lo que me habían dicho era lo menos traumático pero no fue así para nada, llegamos al descampado donde cazaríamos y sin previo aviso Lauk soltó una flecha que impactó en un pájaro haciéndolo gritar de dolor, yo por auto reflejo sostuve la mano de Borja con toda la fuerza que tenía, él simplemente me agarró por la cintura pegándome a él.
La caza había terminado y nosotros ya nos íbamos directos al recinto, cenaríamos y nos iríamos a dormir ya que mañana cogíamos el vuelo dirección a nuestro próximo destino, una vez llegamos fuimos al comedor a cenar, la verdad es que no charlamos mucho simplemente comimos, estábamos todos tan cansados que solo queríamos llegar a la habitación y dormir,
yo nada más terminé retiré mi plato y dije que me iba a cambiar y acostar, noté que alguien iba tras de mi apenas diez segundos después, al llegar a la cabaña vi que era Borja, no me dio tiempo de apenas preguntar que hacía allí simplemente me beso, no me separé, obviamente no me separé, quería esto desde hace muchísimo tiempo pero ¿Acaso esto esto era muy pronto? mi respuesta sería que no, esto no era el principio de una historia era simplemente la continuación de una que ya habíamos escrito en un pasado.

NOTA DE LA AUTORA
como siempre voy tarde pero espero que la espera os merezca la pena.
¿Qué opináis de que Borja se haya lanzado ya? ¿Esto los unirá o los separará más?