¿Qué sucede cuando te despiertas y te encuentras en Disney World?, sin embargo, las protagonistas femeninas son hombres y la trama es mucho más oscuro de lo que recuerdas.
(Yandere Reverse Harem x Reader)
(Yandere Genderbend Princesas y Villanos x R...
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Bailar con Ellard fue lo más encantador que has sentido en tu vida.
Sentías consuelo y felicidad al estar en sus brazos mientras mirabas sus ojos azules que se escondían bajo sus gruesas pestañas.
Todas las mujeres celosas de ti y los hombres miran con envidia al chico rubio de dieciocho años.
Eso fue hasta que el príncipe azul se acercó y te pidió que bailaras con él.
Arruinó totalmente el maravilloso momento para ambos.
"Parece que no te gusta bailar conmigo, mi lady" dice el príncipe Enrique, dándote vueltas.
"Oh, no es nada, es solo que arruinaste mi momento con Ellard", admites, haciendo que frunza el ceño.
"¿Así que ese es el nombre de tu hermano con el que has estado bailando? Qué interesante", levantas una ceja hacia él.
"¿Mi hermano? Ellard no es mi hermano de ninguna manera ni de ninguna forma", lo corriges.
El príncipe de cabello oscuro frunce el ceño ante la nueva información.
"Entonces, ¿qué es él para ti?"
Las manos del príncipe sobre ti se aprietan haciéndote empezar a ponerte paranoico.
"El es..." te interrumpe.
"No me digas que él es tu amante, y ustedes dos realmente vinieron a este baile"
El principe tiene derecho a estar molesto, después de todo este baile se lleva a cabo para que elija a su futura esposa.
No para que tú y Ellard se diviertan y bailen juntos.
"Dime, ¿te has acostado con algún hombre antes?" pregunta, girándote una vez más.
Honestamente, ¿qué pasa con la gente que te pregunta si eres virgen o no?
Ellard te observa a ti y al príncipe desde el otro lado de la habitación, mientras se agarra los puños con fuerza.
Tiene tantas ganas de golpear al príncipe, pero no puede causar problemas que podrían llevarlo a su encarcelamiento y al tuyo.
Entonces, sigue mirando hasta que se da cuenta de que el gran reloj está a un minuto de dar las doce de la noche.
Y el hada padrino advirtió que, si es pasada la medianoche, todo lo hecho con su magia comenzará a desaparecer.
Y así, Ellard corre hacia ti con una mirada de pánico en su rostro.
"¡Tenemos que irnos ahora!"
Ellard te agarra de la mano y te separa del príncipe.
"¡¿A dónde la llevas?!"
El príncipe azul corre tras ti y Ellard, sin embargo, ustedes dos están muy por delante de él.
De repente, uno de tus zapatos de cristal se te resbala de los pies en los peldaños de las escaleras.
"¡Mi zapato de cristal!" Exclamas, tratando de conseguirlo.
Sin embargo, Cinderello te lanza por encima de su hombro izquierdo.
"No tenemos tiempo para esto, (Y/n)"
Cuando estabas a punto de discutir con él, ustedes dos se suben al carruaje de calabazas, mientras Ellard le ordena al jinete del carruaje que se vaya rápidamente.
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El príncipe azul recoge el zapato perdido y lo mira con una sonrisa.
"¿Está bien, alteza?"
pregunta el gran duque, sintiendo un gran miedo al ver la expresión en el rostro de Enrique.
El príncipe solo usa esa mirada cuando atormenta a alguien.
"Creo que encontré a mi esclava"
El hombre traga saliva ante las palabras del otro.
"Se refiere a su futura esposa, mi príncipe"
"Es lo mismo"
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