Luces en las sombras

Las sorpresas nunca terminan

POV Sigrir:

Ya cuando me empeze a tranquilizar, recorde que aun no abria el regalo de Meya ni el de los demas. Necesitaba distraerme de todo ese momento y los empeze a abrir. Tome el de Meya y lo abrí con curiosidad. Eran unas muñequeras negras con varias navajas incrustadas en ellas. Eran increibles y bastante comodas para combate.

Luego tome uno de color azul oscuro y blanco. Colores de un Truenotambor muy conocido por aqui. Si, era de Eero y lo que tenia adentro... Me dio una sensacion extraña pero agradable. Era una espada brillante, con gravados en su base de Furias Nocturnas y extremadamente ligera. Creo que el metal era lo que la hacia especial porque era de Hierro de Gronckle.

Otro regalo que me trajo mucho la atencion fue de Liska. Su regalo era una daga con escamas de Susurro Mortal incrustadas. Me pregunto que habra dicho Espiral cuando Liska hizo esto...

El obsequio de Kaysa fue más estetico pero creo que eso demuestra que ella aun conserva su lado femenino. Ese collar de colmillos de Terrores Terribles me dio una sensacion de comodidad y cariño al ponermelo en el cuello.

Por ultimo estaba el regalo de Astrid, y me dio una corasonada de a quien le pregunto lo que más hacia por las tardes porque lo que me dio fue un arco decorado con Furias Nocturna a los lados y con las iniciales S.M. de Sigrir Manodura. Era perfecto para practicar cuando vaya al bosque.

Me levante de mi cama y comenze a caminar. Mis piernas se tambaleaban un poco al no haberlas movido durante una semana.

Con la ayuda de Sombra, baje las escaleras y llegue a la puerta para salir. Hipo y Astrid no estaban por ningun lado y supuse que estaban en el Gran Salón atendiendo problemas del pueblo.

Comenze a caminar hacia la Academia para estirar las piernas. A Sombra no le gustaba que caminara y yo lo sabia pero necesitaba hacerlo.

-GWARR!-

-Sé muy bien que no te gusta que caminemos tanto pero recuerda que he estado una semana inconsiente y necesito mover las piernas. Ademas de que necesito distraerme de todo por un momento.-

Ya cuando podiamos ver la Academia a lo lejos, Eero y Boom se acercaban volando a donde estabamos.

-¡Sigrir!- me dijo al bajar de su dragón y darme un abrazo. Y era uno muy fuerte, casi como el de Astrid.

-E... Eero... No tan fuerte...-

-Ups... Perdón. Pero... ¡¿Cuando despertaste?!-

-Hace un para de horas, eso creo. ¿Por qué la pregunta?-

-Porque me alegro verte despierta.

Aww que lindo :3

-Jeje, bueno, creo que es hora de que vaya a la Academia-

-Eh... ¿Por qué no vamos al bosque ahora? Digo... Tienes que practicar paralos Juegos del Deshielo, ¿no?- dijo volteandome a la direccion del bosque.

-Pero, no se de que estan basados estos "Juegos del Dehielo" ni cual es la idea en general.-

-Ah, cierto, eres nueva en nuestras tradiciones. Te lo contare en el camino pero necesitamos una pista de obstaculos.-

-¿De donde piensas que saquemos eso?-

-Hace unos años mis padres encargaron hacer una zona en el bosque para practicar para los Juegos del Dehielo en una parte del bosque pero faltan ovejas y hachas.-

-¡¿Ovejas y hachas?! ¿Que rayos piensas hacer con las ovejas?-

-Tranquila, las ovejas las cargamos y las hachas las lanzamos. Ambas en diferentes competencias. Ven, sigueme- dijo al subirse en su Truenotambor. Yo me subi en Sombra que estaba más confundida que yo pero ambas confiabamos en Eero. El emprendio vuelo y nos dirigimos al bosque.