La técnica desconocida

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Nota: Este capitulo no lo pude escribir con los signos de interrogacion ni de admiración al principio por qué el teclado dela tablet no me lo permite .

PoV Sigrir:

-Sobre Estoico?- pregunte yo con un poco de timides.
-Sí, la verdad es que lo extraño demasiado. No creo que pueda olvidarlo, nunca.-

Esas palabras se repetian en mi mente una y otra vez. De pronto recorde que mi padre mató a su marido y me quede callada. Creo que no debí de haber preguntado. Me siento terrible por saber que despues de muerto, mi padre haya destrozado las vidas de muchas personas que amo.

-En fin... Qué pasá, Sigrir? Por qué me despertaste?- pregunto Valka limpiandose los ojos con sus dedos.
-Oh, cierto! Venia a ver si podriamos ir a volar entre las dos. O tal vez enseñarme algun movimiento para Los Juegos del Deshielo.-
-Pequeña, tú ya sabes demasiado para ganar los juegos. Pero... Si quieres, te enseño algo que... Que la mayoria de los guerreros no conocen.- Me dijo esto último en un susurro, comonsi escondiera el secreto más importante del Universo. O al menos de el Archipiélago.
-Okey... Entonces me llevo mi espada, el arco, el escu...-
-No no no no. No te traigas el escudo. Traete todas las armas que quieras menos el escudo.-
-Pe... Pero por qué no el escudo?-
-No te preocupes por el escudo, no lo necesitaras para lo que te voy a enseñar. Te vere en Punta Cuervo. Antes de que el Sol se ponga en su punto más alto.- Digo poniendose de pie u saliendo del cuarto dejandome sola dentro con la palabra en la boca.
No me esperaba nada de eso para empezar, pero si me van a enseñar, debo de respetar al maestro.

Cerré la puerta detras mío y saque la espada del muro de madera, el arco y flechas debajo de mi cama y salí de la casa buscando a Sombra para que me ayudara a llegar a la herrería. Tenía que hablar con Eero para preguntarte si no conocía esa técnica de combate sin escudo pero creo que solo le preguntare por las armas que necesito llevar.

Caminé con Sombra un buen rato hasta que encontré la herrería. Vi a Bocón trabajando y Eero organizando las espadas y hachas de la armería. Boom y Gruñón se mantenían durmiendo a un lado de cada jinete y apenas se les veía moverse. Sombra sólo cayó dormida junto a los dos dragones.

-Parece que tienen un día ocupado. Espero no estar interrumpiendo nada.- Dije entrando por debajo de unas herramientas que colgaban desde el techo y que al moverse hacian un tintineo que recorría el lugar.
-Vaya que sorpresa! Qué te trae por aquí?- Pregunto Eero olvidando su trabajo por un momento. Se acercaba a mí con los brazos abiertos y yo le respondí el gesto con el abrazo.
-Vengo a preguntar algo sobre una técnica de combate que he escuchado y me gustaría saber como mejorar en el campo de batalla.-
- No será que quieres que Ran y sus amigos no te hagan quedar mal frente a toda la aldea, o no? La idea original de Los Juegos del Deshielo era hacer que la gente del pueblo se una para celebrar el cambio de estación, no para llamar la atención del público en general. Por desgracia, los Jogerson no entendieron el significado de los juegos y solo quisieron vencer a cualquier costo. Esto cambio que los eventos se volvieran una competencia y desde entonces han sido para demostrar quiénes son los mejores.- Proclamó Bocón ese discurso que me mantuvo atenta a cada palabra mientras que Eero solo volvía a recoger las armas que estaba utilizando hace un par de minutos.
-Entonces todo cambio por los Jogerson... Y por qué no quieres que aprenda la técnica?-
-Porque no la necesitas. Si quieres que Ran y sus amigos no se metan contigo sólo hazles frente y se acabó.- Dijo Eero afilando una espada y dandomela en los brazos. -Eres más fuerte que esos tres cabezas huecas y se que vas a ganar los juegos.-
-Eero, no empieces con que solo por haber vencido al enemigo más sanguinario del Archipiélago no significa que gane en todo lo que haga. Una cosa es una flecha en el pie y una espada en el corazón y otra muy diferente es ganar en una competencia donde todo vale. Además yo no vencí a mi padre sola, Hipo, Chimuelo, Valka, Brincanube, Eret, Rompecraneos y otrs 2000 dragones ayudaron a detener la guerra.-

Luces en las sombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora