El Emperador

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Y por fin el momento del banquete llegó, el omega estaba viendose a traves del espejo su corazón latía muy fuerte, no pudo hablar con nadie sobre esa persona que había visto hace unas horas en el jardín, solo sabia que era guapo, pero si empezaba a preguntar lo tacharian de cualquiera y no podía deshonrar a su familia y tribu

Así que suspiro y se resignó y empezó a rezar que para que el emperador no lo escogiera y el pudiera conocer a esa persona que estaba seguro era su destinado

- hermano todo bien ?

El omega miró a través del espejo a su hermano y asintió

Luego vio lo que tenía puesto, un pantalón marrón pálido pegado al cuerpo, una camisa naranja oscuro de mangas algo grandes y un cuello redondo dejando ver su clavícula y un poco de sus hombros, se ajustaba perfectamente a su pecho dejando relucir su pequeña sintura, la parte de atrás y de los lados llegaba hasta el suelo creando la ilusión de un vestido, el cuello de la camisa tenía encaja dorado en forma de flores al igual que en las mangas, la falda era algo gruesa y sobre sus hombros descansaba una capa de color vino que se ajustaba a su cuello como una gargantilla mediante un broche de rubí, unas zapatillas un poco altas de color dorado, un collar que llegaba hasta la mitad de su pecho, era de perlas y rubíes, su cabello peinado de lado y adornado con un broche de tres rubíes que parecía un enredadera de oro, aretes de rubíes y un brazalete que continuaba con la temática de las demás joyerías

- te quedan bien... sé ven geniales y hacen que tu piel resalte - escucho decír a su hermano.

- Denki... y si no voy?

- estas loco?... nos meterías en muchísimos problemas hermano

- lose... tienes razón, no sería justo para la tribu

- ni para ti... no importa quien sea ese que conociste no vale la pena, no importa si es un noble o un caballero... El no es el emperador lo entiendes verdad?

- si hermano

El omega suspiro y dejo liberar sus feromonas para subirse de estas y poder tranquilizar su mente

Miró por la ventana y se dio cuenta que ya estaba por llegar el atardecer osea que el banquete estaba empezando

Golpeó la punta de su zapato en el suelo 3 veces antes de encaminarse a la salida en conpañia de su hermano que caminaba detrás de él con las manos enfrente

El chico suspiro estando enfrente de las puertas del gran banquete, ya habían llegado muchos invitados, suspiro estaba verdaderamente asustado no quería entrar derrepente todos sus ilusiones se desvanecieron

- joven le pasa algo? - pregunto el guardaespaldas.

- y si no paso?... y si no participó en el banquete?

- estoy seguro que su majestad se molestaría mucho por eso

El omega suspiro y asintió, entonces las puertas fueron abiertas

Y los ojos verdes y rojos se reencontraron, con miradas llenas de anhelo y satisfacción...