Yang Soyeon, 16 años, amante de los gatos.
Pero ¿y si desmaquillarmos la ficha de personaje?
Zero Le Fay, 520 años, el As de Godmar.
Un poco diferente quizá, fue criada en más tierras oscuras, su misión? sembrar caos, acabar con todo el que interfi...
Hace 2 días no había dormido, y apenas ayer comí, no me sorprendía, nada nuevo, perdí la cuenta de el año en que estaba, lo único que sabía es que el siglo antepasado había sido castigada por no cumplir de manera adecuada mi entrenamiento, por ende no salí al mundo "Social", como lo hacía llamar, estaba aburrida, Jennie había salido a dar un pasea, maldita gata, me dejo sola y no me aviso que saldría, pudimos haber ido juntas, seguía reflexionando de mi existencia cuando sentí una vibra acercarse.
-Jennie, hasta que te dignas a aparecer- Dije sin voltearla a ver, hasta que sentí una segunda presencia, fue cuando decidí voltear.
-Godmar te está buscando, Zero- Dijo Nomura con su habitual tono agresivo pero a la vez tranquilo.
-Y por como lo dijo se podía notar que era urgente- Respondió Strikler, solo que este hablo de una manera calmada, así el mundo se pusiera caer a pedazos el lo miraría con sus brazos tras su espalda mirando como si no le importase.
-En seguida voy- Rápidamente me levante y tome camino, les di una reverencia a manera de decirles gracias y después mire a Jennie de reojo, la cual me miraba con curiosidad, y yo a ella. Cuando ya estábamos un poco más lejos del lugar me dispuse a hablar, había habido un silencio, ambas íbamos casi corriendo, ya que ambas queríamos saber que pasaba.
-Sabes de que se puede tratar?-Pregunte mientras seguía avanzando, la voltee a ver y espere su respuesta, ella también me volteo a ver solo que un poco más extrañada que yo.
-Creí que tu sabrías que habías hecho, fille - Me respondió mirándome fijamente, mientras que por mi parte, hice una mueca, no estaba segura de mi edad, pero sabía que tenía más de 1 siglo, ya no era una niña.
-Entonces porque venias con ellos Jennie?- Levante una ceja, casi como acusándola, ella por su parte me gruñó y movió las orejas.
-Cuando vi que se acercaron a donde estabas sabía que no era por algo bueno, nunca te mandan a llamar por algo bueno, bête- esta vez no me volteo a ver y solo siguió su camino.
pero tampoco me insultes, pensé entre mi, me había insultado en francés, y ya ni siquiera me sorprendía.
Al llegar a la guarida de Godmar sentí un leve escalofrío, no porque me diera miedo, había enfrentado a su hijo en múltiples ocasiones anteriormente, por fines de entrenamiento, según ellos, pero su presencia siempre me provocaba estar alerta, la cola de Jennie también se había erizado, y se había inclinado ligeramente hacia abajo con las orejas completamente bajas, ambas estábamos muy a la defensiva y lo sabía.
-Sabes en que año estamos 005?- Hablo Godmar, lo odiaba, odiaba su tono de voz, su confianza, a su hijo, menos a su aliada.
-No- Respondí de una manera cortante y muy fría, aunque era muy usual ser de esta manera con cualquiera que no fuera Jennie y mis maestros, siendo estos Nomura, Morgana y Strikler, así que el contrario ni siquiera se inmutó.
-Según información de mis cambiantes es aproximadamente el siglo 21, y has cumplido perfectamente con tus entrenamientos físicos- Una sonrisa se quería formar en mi rostro, amaba salir, había pasado 1 siglos desde la última vez que salí, realmente cambiaban mucho cada que salía, me emocionaba saber esta vez cual había sido el cambio.
-Sabrás que aquí eres completamente inútil, no me sirves de nada ni a mi ni a Morgana estando aquí encerrada, ahora te veras con la obligación de operar fuera de estas tierras, tanto Nomura como Walter te pueden ayudar, vete, en unos momentos mandare a Nomura a guiarte y acompañarte, solo te advierto una cosa maldita rata- dijo de manera denigrante y se acercó- si intentas escapar, o intentar traicionarnos, no morirás, vivirás siendo torturada el resto de tu inservible vida- Después de dichas palabras asentí y salí con Jennie a mis espaldas.
-Jennie, dime que no alucine que me dijeron que ya no estaría más tiempo en este lugar- Dije de una manera casi emocionada, nunca antes había sentido eso, era raro, pero me gustaba, sentía algo en el pecho, algo que era bueno, quería gritar por alguna extraña razón.
-Que seas esquizofrénica no significa que siempre alucines fille, por fin podremos salir de este lugar cariño-Pude notar que Jennie también parecía emocionada, su tono de voz era ligeramente más eufórico que de costumbre, sabía que Jennie había salido antes al mundo social, ambas estuvimos allí cuando nacimos, la diferencia es que Jennie era una cambiaformas de Francia, y estuvo más tiempo más tiempo vagando en las calles de París.
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-Entraras tu primero, te vigilaremos de lejos, esperamos mucho de ti Zero, no nos decepciones- Dijo Nomura a regañadientes, con su semblante amenazante tan característico, dio una última reverencia a ellos dos, primero salió Jennie y yo la seguí, al cruzar la barrera pude notar el aire fresco contra mi cara, mi cabello era muy largo y estaba recogido en una coleta alta muy desordenada, amaba ese sentimiento, el clima era fresco, supuse que era de noche debido al ambiente, la luz brillante que identificaba como luna esa noche estaba tan hermosa como hace 2 siglos atrás, la hermosa brisa, supuse que pronto llovería.
-Nos vamos niña?- Me pregunto Jennie al verme inmóvil
-Claro- Le respondí para comenzar a caminar
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Cabe aclarar que todos los diálogos fueron una mezcla entre francés y coreano ya que son las "lenguas maternas" de Zero, no son en inglés.
La historia original tendrá ligeros cambios por el bien de la trama.
Jennie es una gata muy grande, mide casi un metro de longitud sin contar su larga cola. Su raza es Maine Coon
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