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Clip 1:El puto mejor regalo

AVISO-CLIP UN POQUITO SUBIDO DE TONO

Sábado 18:56

Sábado 18:56

Joder lo he dicho, las palabras han salido de mi boca por si solas y por un momento tengo miedo de su reacción, le miro a los ojos y lejos de ver miedo en ellos veo sorpresa y excitación.

—Joder Nora—Me quedo mirándolo mientras paso mis dedos por su pelo.

—Ha sido un regalo demasiado explosivo—Alejandro me sonríe.

Esa maldita sonrisa promete muchas cosas indecentes.

—Ha sido el puto mejor regalo del mundo, podrías haberte ahorrado todo lo demás.

—Y...No vas a decir nada—Insisto un poco más, necesito saber si he ido demasiado lejos, ahora tengo un poco de miedo.

—Joder sí—Se lanza y vuelve a atrapar mis labios, sus manos bajan a mis nalgas que aprieta, haciendo que me acerque más a él y que rocemos nuestras partes íntimas—Te quiero Nora, te quiero muchísimo, mucho más de lo que tu te crees.

No se si me emociona más que me haya dicho por fin que me quiere o lo que ha hecho rozar entre nosotros.

—¿Y si vuelves a hacer eso? —Me mira con un brillo en sus ojos.

—¿El que Nora? —Posa sus manos en mis caderas y hace que las mueva, rozándonos entre sí—¿Esto?

—Si—Jadeo—Me gusta que hagas eso.

—Y a mi me gustas tú.

Vuelve a besarme, sus manos abandonan mis caderas pero ya no dejan de moverse haciendo que el placer entre nuestros cuerpos rozándose me inunde, sus manos ahora suben por mi cintura y se detienen en mis pechos, los acaricia suavemente por encima de mi ropa haciendo que mis pezones se vuelvan totalmente rígidos.

—¿Esto está bien para ti Nora?

—Si, es absolutamente maravilloso.

Sus labios están tan hinchados como los míos y ahora se dirigen a mi cuello para darle la atención que se merece, sus manos paran mis caderas y se acercan peligrosamente al botón de mi pantalón, levanta su cara de mi cuello para mirarme.

—¿Puedo quitarlos?

—Joder si.
Amo que me este preguntando absolutamente por todo, que me esté haciendo sentir cómoda y deseada y sobre todo amo que con solo unos roces todo el calor en mi se haya centrado en mi centro y me esté proporcionando alivio.

Me levanta un poco para que pueda quitarme los pantalones revelando un tanga blanco bastante básico y poco especial. En mi cabeza nada de esto iba a suceder.

—El tanga no es muy bonito ni especial.

—El tanga no me importa, tu eres la bonita y especial.

Vuelvo a sentarme a horcajadas encima suyo, sus pantalones están tan tensos que parecen que van a explotar y vuelvo a sentirlo contra mi.

Sus manos curiosas van desde mi culo desnudo hasta el borde de mis bragas y si me pregunta si puede meter su mano creo que directamente me voy a volver loca, pero no lo hace esta vez solo me mira mientras introduce su mano en mis bragas tocándome directamente, primero solo va hacia arriba y abajo pero luego sus dedos se centran en mi clitoris haciendo movimientos circulares que me hacen jadear, sus ojos me miran con tanta intensidad que hace que el placer con sus dedos se aumenten por dos.

—¿Te gusta nena?

—Joder si Alex, me encanta no pares.

Mis palabras hace que sus dedos aumenten su rapidez, y con su otra mano toca uno de mis pechos apretándolo y masajeándolo con más fuerza.