Unico

XIII

Pov.

El reloj marcaba las cuatro en punto de la madrugada, era una noche fría y solitaria, un rubio el cual no podía conciliar el sueño se encontraba sentado en el piso de la sala común Abrazando sus piernas con la mirada perdida y su mente sumergida en sus pensamientos, tratando de encontrar soluciones a sus problemas, algo que le gustaría que lo salvará de su futuro, pero eso era algo imposible y el lo sabía... Tal vez lo mejor sería contarles a sus gemelos, al menos no lo odiaran después de que la verdad se revele, oh al menos eso esperaba el no podría vivir sabiendo que esos dos bromistas lo aborrecían, que lo despreciaban por ser lo que era, el esperaba que lo entendieran y lo apoyaran después de todo son Gryffindor y tienen el instinto de dicha casa.

¿Pero de verdad sus planes funcionarían? Tal vez no, después de todo nada sale como uno quiere y con mi mala suerte solo pondría en riesgo a personas inocentes, ellos no tienen por que luchar y ellos no se merecen ese destino, que mi vida sea una mierda no quiere decir a que tenga que hechar a perder la de los demás.

George y Freed se merecen algo mejor, merecen alguien que no tenga tantas marcas, que sea libre de estar con ellos son ninguna presión,el mundo merece algo mejor que lo que el sería en toda su vida.

¿Debería decirle a los gemelos sobre su plan? ¿De verdad lo aceptarán? ¿Y si solo lo dejan?

Esas eran unas de las muchas preguntas que pasan por su mente, su cuerpo empezó a hiperventilar y a tener espasmos, sus manos temblaban y sudaba frío. Era otro ataque. Antes de que sus piernas fallaran logró llegar a su habitación y del cajón de su mesita de noche saco un vial el cual contenía una poción tranquilizante y también funcionaba para que la persona que bebiera cayera inconsciente en ese mismo instante, con sus últimas fuerzas subió a su cama y tomo el vial derramando un poco sobre sus sábanas, sus ojos pesaron de repente y sus temblores bajaron su intensidad, cayó dormido en cuestión de segundos y el frasco cayó de su mano quedando en un sueño profundo.

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-hey, Draco- escuchaba que le hablaban pero se sentía tan lejana esa voz, como un eco en su cabeza que no es capaz de entender con claridad

-hey despierta, llegaremos tarde- se volvió a escuchar esa voz pero ahora sonaba más femenina y con cierto tono de preocupación pero esta vez sonaba más cerca

-queremos despiertes maldita sea o no vas a comer!!- aquel grito si lo sintió cerca, demasiado para su gusto, se sentó en la cama de golpe mareandose en el acto

-q...qué hora es?- mierda solo puede pensar en que sus amigos lo miraban con cierto brillo de preocupación en sus ojos y todos ya listos para asistir a clases, señal de que era muy tarde

-demasiado tarde, nos adelantaremos al gran comedor para comer y tomaremos algo para ti, tu arréglate y en el camino a clase donde nos encontremos meriendas algo pero ya es tarde- dijo pansy para después de terminar su oración salir del cuarto seguido de blaise, se levantó para poder estar listo a tiempo y al ver en su escritorio el vial de ese mismo día por la madrugada, supo de inmediato que ellos lo habían recogido y le esperaba una larga charla con ellos, pero ya pensaría en eso después ahora tenía prisa si no quería un retardo en su clase.

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En el gran comedor ya se encontraban las mayoria de Slytherin terminando de comer para iniciar su día pero no había señales de su rubio por ninguna parte, el casi nunca se saltaba las comidas y eso les empezaba preocupar, sonrieron al ver entrar a zabini y Parkinson, pero cantaron victoria antes de tiempo pues solo estaban ellos dos, hicieron el amago de ponerse de pie e ir a preguntar por su dragón, pero sus intenciones fueron interrumpidas por  su hermano ron y su hermana los cuales los devolvieron a su lugar con un tirón en sus túnicas