Unico

III

Narra Fred

Ya en el gran comedor todos estaban cenando tranquilamente cuando un grito de ron se hace presente seguido de uno de Harry. La poción por fin había hecho efecto.

Ron estaba completamente lleno de pelo de color morado y Harry estaba igual pero con color azul, ambos parecían querer matarnos pero poco nos importaba en ese momento, necesitábamos esa receta si o si y tal vez un poco de ayuda para prepararla ya que no somos muy buenos en pociones y al parecer nuestro pequeño dragón si.

Dirigimos la mirada hacia la mesa de slytherin y ahí estaba Draco riendo, si valió la pena al verlo con su sonrisa que ilumina hasta las noches más obscuras, nos devolvió la mirada y nos regaló una pequeña sonrisa algo coqueta causando que no le pudiéramos sostener la mirada o si no se daría cuenta del enorme sonrojo que habia causado en nosotros con esa simple acción. Dias después el nos entrego la receta en un pergamino con su fina,delicada y elegante habitual letra, también descubrimos que su fruta preferida el la manzana verde y la uvas verdes, amaba el chocolate, su color favorito el verde(aunque era un poco obvio) también nos llevamos bien con sus amigos, blaise y pansy los cuales nos presento un poco indeciso por la provabilidad de que iniciará un conflicto entre nosotros, aunque afortunadamente no ocurrió así,y también nos dimos cuenta que aunque se vieran como un trío que no les importa nadie, fríos, controladores y algo egocéntricos eran otra cosa si los sabías tratar, blaise tenía un buen sentido del humor y pansy aunque fuera un poco mandona también se había vuelto nuestra amiga. Aunque en lo de egocéntricos no solo eran un poco.

Desde entonces nos juntamos cada viernes para crear nuevas bromas y reírnos de alguna u otra estupidez que decimos Gorge y yo, esos momentos para nosotros valían oro pues nos transmitían paz y más estando al lado de nuestro rubio.

Pero había algo que siempre nos preguntamos ¿Cuál era tu casta? Por tu actitud serías alfa pero tú tamaño y confección nos aseguraban que no lo eras, tal vez beta si eso tenía que ser al no saber presentado ningún olor debías de serlo.

Narro yo

El tiempo había pasado y una serpiente y dos leones se habían enamorado, aunque ninguno confesó su amor uno por miedo al rechazo y los otros dos, pues por miedo y no solo al rechazo de el si no de su familia y al de su casa preferían mantener esos sentimientos en secreto, al menos por el momento.

Un nuevo pretendiente sale a la luz y una noticia impactante igual quien conquistará el corazón de aquel dragón de ojos grises.