La Mafia Real [Kookmin].

Capítulo Cincuenta y Seis.

En busca de la verdad.

Busan, Corea del Sur.
Abril del 2031.
03:46 a.m.

Cinco meses habían pasado, cinco meses de que habían enterrado a Reimon, cinco meses de dolor para Jeon y Park. Fingían que estaba todo bien, decían que la vida debía continuar por sus demás hijos, para demostrarles que debían de hacerlo pero estaban destruidos por dentro.

En especial Deimon.

Sentía que faltaba gran parte de él, pasaba algunas noches llorando por lo mucho que extrañaba a su hermano y lo peor de todo es que sentía culpa. "Debí seguir mi instinto de que algo estaba mal" es lo único que se decía así mismo todas las noches al extrañar a su hermano gemelo. Se sentía tan culpable que ni salia de su habitación y si lo hacía era solo para cumplir con su entrenamiento.

Minho también lloraba por las noches, su hermano favorito había muerto, no sabía el porque y eso le dolía bastante porque no pudo haber echo nada por el, ni estar con el en sus últimos momentos. No tenía ganas de absolutamente nada, lloraba en su habitación, recibía insultos de Minhyung pero no le prestaba atención,el solo extrañaba a su hermano mayor.

Xiao se mantenía fuerte por sus padres y hermanos, ella cuidaba de Deimon y perdió la cuenta de las veces que lloro junto a él, las veces que Deimon se quedó dormido en los muslos de su hermana. Las veces que consolaba a Minho cuando lo veía llorar ya que este se ocultaba, las profundas conversaciones que había empezado a tener con Park porque ya para nada, era una niña.

Taeyang estaba tan triste, amaba demasiado a cada uno de sus hermanos y algunas veces discutía con su madre porque las palabras que Ashlynn decía sin pensarlo hacía ver a Taeyang la obsesión que su madre tenía con que el asumiera al trono. Apesar de que fue educado por ella, creció viendo las cosas con otra perspectiva, el solo quería hacer sentir orgulloso a su padre y aún que a veces notaba desprecio por parte de Jeon, aún así lo amaba.

Con el corazón roto y sin muchas ganas de seguir viviendo tenía que seguir investigando, su cabeza no dejaba de pensar ni un instante en Oswald. No se quedó de brazos cruzados, a los días de la muerte de su hijo empezó a investigar por su propia cuenta.

Jeon logró encontrar algún rastro de este ser desconocido y mando a Han y algunos escuadrones a que investigarán.

(...)

Luego de mucho tiempo hubo un festejo en el palacio que trajo mucha alegría, el hijo de Reimon había nacido y era tan parecido a el que Park no podía ni despejarse de su nieto.

—Es tan parecido a el... —Hablo Jade viendo cómo Park lo acariciaba.

—Asi es... Estoy muy orgulloso de que hayas sido tan fuerte por este bebé. —Contesto mientras miraba los rasgos de ese bebé y le hacían recordar tanto cuando por primera vez sostuvo a Reimon.

—Aún lo sigo siendo señor... El que el ya no esté rompe mi corazón en mil pedazos, el se puso muy feliz al saber que iba a ser padre.

—Lo se, me pasa lo mismo y se cuánto el quería este bebé... Veo en tus ojos lo mucho que amaste a mi hijo.

—Así es, lo ame mucho y lo seguiré amando.