XV

556 39 3
                                    

Narra Simón:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Narra Simón:

Había agarrado mi ropa para vestirme fuera y salir a hacer unos recados sin despertar a Ona.
Iba a ir con Pipe a comprar unas cosas para el rodaje de mañana, hoy tampoco grabaríamos porque el sitio donde grabábamos estaba todo mojado.
Era bastante temprano, por lo que hacía frío, agarre una sudadera y bajé ya que mi amigo me estaba esperando.
-Hoy juega River, doy por hecho que vienes.- dijo el ojiazul.
-Ya lo siento Pipe, pero hoy vienen mi madre y mi hermana a comer.
-No te puedo creer con el partido que será hoy y te lo vas a perder.-

Estuvimos un comprando lo necesario y como nos sobró tiempo fuimos a desayunar a una cafetería, mientras hablábamos de todo en general, bueno para ser más exactos hablábamos de Ona, él me decía que me veía demasiado enganchado de ella y no lo podía negar, pero solo esperaba que a ella le pasara los mismo.
Aproveché para enviarla un mensaje antes de que se levantase "Salí con Pipe a por unas cosas, luego te veo linda", mi amigo se reía de mi por como miraba al teléfono mientras la escribía y eso que ella no estaba en línea.

Acompañé a Felipe hasta su apartamento y al volver a casa vi un puesto de flores y me animé a comprarle un ramo a Ona, le compré unos claveles rosas y blancos, como a ella le gustaban.

Al llegar a casa intenté no hacer mucho ruido a pesar de que ya no fuese tan tarde como para seguir durmiendo, pero viniendo de ella me lo esperaba.
-Buenos díaaaas- vino a abrazarme casi corriendo, estaba tan guapa con una de mis camisetas.- ¿y esto?, ¿qué se celebra hoy?.-dijo al verme las flores.
-No se celebra nada hoy Onita, pero las vi y pensé que te gustarían.
-Ay, son preciosas Simi.- después de eso me besó demostrando lo feliz que estaba por mi regalo, parecía que los besos cada vez eran más intensos y me hubiese gustado seguir, pero recordé la llegada de mi familia.
-Onita, van a venir a comer mi madre y mi hermana, creo que me vendría bien tu ayuda.

Así fue, estuvimos gran parte de la mañana cocinando y más tarde se cambió de ropa para cuando llegasen estar lista.
Mientras lo hacía, aproveché para mandarle un mensaje a mi hermana para que se guardase sus comentarios de cuñada ilusionada y aclararle que todavía no éramos nada oficial, lo que pareció entender y me prometió no decir nada.




Narra Ona:

Estaba en el salón mirando la tele, justo Simón había subido a su habitación a por el regalo de cumpleaños de su madre que fue hace dos semanas. De repente sonó el timbre y para mi mala suerte tuve que abrir.
-Ona eres muchísimo más guapa en persona que en las fotos que me ha enseñado Simón.- me dijo mientras me daba un abrazo y escuchaba de fondo a Simón mandar callar a su hermana por el comentario.-Perdón, perdón, perdón, pero es que os shipeo tanto, que te necesito llamar cuñada ya.
-Ona, encantada soy Liz, a mi también me hace mucha ilusión conocerte.
-¿Y a mi no me va a saludar nadie o qué?- dijo Simón levantando los brazos incrédulo

Mientras comíamos Liz me confesó que vio mi película hace tiempo con Simón y que les había encantado, pero que su hijo estuvo muy pesado insistiendo en lo guapa y lo buena actriz que le parecía.
En general hablamos de muchas cosas, también tocamos el tema de la distancia entre nosotros, su madre nos dio consejos los cuales tendríamos claro que estarían presentes en nuestra decisión.

Finalmente, cuando estaba por irse intercambié el número de teléfono con su hermana para seguir hablando más adelante y actualizarla sobre todo un poco.



Narra Simón:
Parecía que se habían llevado bastante bien, yo estaba demasiado nervioso, ya que mi madre no se ha llevado muy bien con las chicas con las que he estado, pero con Ona era distinto y eso que no era nada formal por el momento.

Cuando se fueron Ona y yo nos quedamos cada uno en nuestro ordenador, ella preparando su siguiente papel en otra película y yo perfeccionando el guión del corto.
A pesar de que estábamos trabajando, cada tanto la molestaba. siempre acabábamos chapando, pero siempre se separaba diciendo que la distraía y que no la dejaba trabajar.

Ella acabó y yo seguía arreglando alguna cosa, pero me distrajo al preguntarme que si me apetecía sushi, efectivamente lo pidió y cuando llegó salimos a la terraza ya que hacía mucho calor aunque era tarde.

Cuando terminamos de cenar Ona se tumbó en mi pecho mientras seguíamos hablando, cuando íbamos a la terraza era otro mundo, solo estábamos los dos y nadie lo podía interrumpir.
-Simi, ¿te puedo decir algo?
-Dime, ¿qué pasó?
-Te quiero mucho.- me iba a derretir, la chicas más linda me estaba diciendo te quiero, entré en shock.-No pasa nada si no sientes lo mismo, solo te lo quería decir
-Yo te quiero más Ona.- depués de eso levantó su cabeza de mi torso y me miró con un brillo precioso en sus ojos, y como era de esperar la pasé el pelo por detrás de su oreja y la besé dulcemente.


- depués de eso levantó su cabeza de mi torso y me miró con un brillo precioso en sus ojos, y como era de esperar la pasé el pelo por detrás de su oreja y la besé dulcemente

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Un poco cortito y mierda, pero no se me ocurría nada. jiji
espero que os haya gustado
chauuuuu 🫶🏻🩷

𝐁𝐞𝐡𝐢𝐧𝐝 𝐭𝐡𝐞 𝐜𝐚𝐦𝐞𝐫𝐚/// SIMÓN HEMPEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora