Lejania

Parte 4

Al día siguiente, Jihoon acompañaba a Jun a su cita. El Dr. Hong había tenido la amabilidad de incluirlo en una consulta de emergencia, dadas las circunstancias.

Jihoon, fiel a su palabra, se había detenido en la entrada de Jun cuando le envió un mensaje de texto para decirle que estaba listo para partir.

Por mucho que Jun se preocupara por una repetición de la actuación de la noche anterior, Jihoon estaba interesado en respetar su espacio personal, ofreciendo apoyo silencioso mientras conducían la corta distancia hasta la oficina del Dr. Hong.

Jun todavía estaba avergonzado por todo el debacle. El estrés de la situación, combinado con el hecho de que su… bueno, el tema de sus deseos había estado justo frente a él, había sido demasiado para procesar. El nerviosismo residual le hizo sentirse húmedo por todas partes, pero al menos tenía un mejor control de sus facultades mentales ahora que el polvo había tenido tiempo de asentarse.

Regresó de una de las salas de examen, mientras Jihoon se quedaba atrás jugueteando con su teléfono en el área de recepción.

Se registraron sus signos vitales, se tomaron muestras de sangre y orina, y después de pasar un tiempo interminable sentado en tenso silencio sin nada más que un televisor anticuado que anunciaba el tiempo para hacerle compañía, el Dr. Hong volvió a entrar en la habitación. Su expresión estaba cuidadosamente en blanco, pero Jun pudo ver preocupación en la mirada del médico.

"Jun", comenzó, su tono no revelaba nada. "Antes de entrar en tus resultados, ¿cuánto tiempo dirías que has estado tomando estos... suplementos tuyos?"

Tragó, nervioso. “Aproximadamente…” hizo un rápido ataque de cálculo mental. "¿Cinco años?  ¿Por qué?" preguntó. Su estómago se hundió de miedo. "¿Hay algo mal conmigo?"

"Me gustaría realizar más análisis de sangre para tener una mejor idea de la situación", respondió el Dr. Hong. “Pero a juzgar por los resultados de las lecturas de referencia de hoy y el hecho de que usted ha estado tomando supresores durante tanto tiempo, parece que su desarrollo puede haberse atrofiado. Tu género secundario está presente en la prueba hormonal, pero sólo por poco.

Su visión era un túnel; su corazón latía a un ritmo entrecortado que pulsaba en sus sienes.

"Los resultados para la próxima semana prometen un enorme tormenta procedente del sur", anuncia de fondo el meteorólogo pixelado. "Quiero decir, estamos hablando de daños infraestructurales potencialmente devastadores, y..."

“Uh. ¿Q-qué significa eso? Secundario... ¿género? preguntó débilmente.

El Dr. Hong apenas había abierto la boca para responder cuando la puerta de la sala de examen se abrió de golpe. Jun saltó y se encorvó sobre sí mismo, encogido de miedo ante la intrusión.

“¿ Qué le estás haciendo? "

La voz gruñida sonaba familiar, hasta cierto punto, pero de algún modo extraña. Jun se asomó por debajo de su flequillo y vio a Jihoon acechando a su lado, parándose frente a él en una postura protectora. Jun no entendía (no podía) comprender completamente sus emociones ante esta muestra de apoyo, pero hubo un cierto grado de alivio que lo invadió ante la presencia de Jihoon.

“Jihoon”. La voz del Dr. Hong era tranquila pero firme. “Junhui y yo estábamos revisando los resultados de sus pruebas. Confidencialmente . Ahora, es mucho para asimilar en este momento, como estoy seguro de que podrás imaginar. Si bien sé que puedes sentir una necesidad instintiva de protegerlo en este momento, no existe ningún peligro. Por favor, retírese y déjenos terminar nuestra discusión. En privado."