REBELDES 9(3/4)

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"Ya estoy aquí" Un hombre de 40 años se adelantó e inspeccionó la herida en el brazo de Ge Jing Yun. Su rostro se hundió instantáneamente y rápidamente ordenó: "¡Ayúdalo a entrar en la tienda!"

Ver que Ge Jing Yun fue enviado dentro de la tienda disminuyó las preocupaciones de Gu Yun. Sólo entonces pudo sentir un dolor ardiente en su mano izquierda. Acariciando su brazo, Gu Yun frunció el ceño, originalmente asumió que como mucho estaría magullado, ¡pero no esperaba que sangrara!

Su Ren notó bruscamente que le sangraba el brazo izquierdo: "Cuñada mayor, ¿tú también estás herida?"

Gu Yun asintió levemente, "Mi lesión no pone en peligro mi vida. Entremos antes de hablar".

Al entrar al campamento principal, un médico militar mayor se detuvo al lado de Gu Yun, sosteniendo su caja de medicinas. Usó una tijera para cortarle la manga con cuidado. Cuando el brazo delgado quedó expuesto, tres heridas rojas e hinchadas sangraban sin parar. Esto hizo que algunos de los hombres en la tienda fruncieran el ceño. Sin embargo, como era de mala educación mirar el brazo de una mujer, Su Ren y Lou Mu Hai miraron hacia abajo mientras Yu Shi Jun rápidamente le daba la espalda.

Este tipo de herida, aunque no era grave, seguía siendo muy dolorosa. El viejo médico militar tomó un medicamento y dijo con cuidado: "Señora, ahora aplicaré el medicamento y el vendaje Por favor, soporte el dolor".

Gu Yun sonrió suavemente, asintiendo con la cabeza, "Está bien, sólo trátalo".

Mientras rociaba suavemente la medicina sobre la herida, un dolor agudo irradió de su brazo. Gu Yun ya no pudo soportar el dolor, "En..."

La mano del viejo doctor se detuvo en el aire; no se atrevió a moverse. Aunque la medicina era muy buena, también era... muy dolorosa. Gu Yun respiró hondo un par de veces y le dijo débilmente al médico: "Estoy bien, por favor continúe".

Su frente estaba cubierta de sudor frío, pero no dijo nada más. El viejo médico envolvió la herida con mucho cuidado y habló en voz baja: "Señora, el medicamento debe aplicarse todos los días sobre la herida. Después de medio mes volverá a la normalidad. Intentaré encontrar una manera para que no deje cicatriz".

Gu Yun sonrió, "Gracias, mientras esté curado, está bien".

Realmente no le importaba si la herida dejaría una cicatriz o no. El viejo doctor se sintió secretamente aliviado. Para una joven tan buena, encontraría una manera de evitar que la herida dejara cicatrices.

Aunque Gu Yun no sabía su intención, lentamente sacó su brazo y declaró seriamente: "Han Shu es secuestrado por los rebeldes, quieren que Su Ling entre sola al bosque en tres días. Si dentro de tres días no ven a Su Ling, arrojarán el cadáver de Han Shu al Valle del Cuervo".

Al escuchar sus palabras, Lou Mu Hai dijo con ansiedad: "¡Esto no servirá! El general Su Ling aún no ha llegado, aunque haya llegado, no podemos dejar que corra el riesgo. Conocen muy bien ese bosque en particular, por lo que es beneficioso para ellos. Será un desastre para el general si entra al bosque".

La palma de Su Ren se apretó. Parecía que había estado subestimando a esos bandidos. Antes de que lograra ingresar al territorio de la ciudad, la otra parte ya había tomado una acción. El enemigo en ese momento realmente no era un ladrón común y corriente.

Matrimonio por error; Grado MilitarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora