overlord extranjero [ overlord x Fate ]

capitulo 19

Autor: Russian Reversal

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6.024Capítulo 19
Como lo ha demostrado la práctica, los Servants pudieron destruir treinta mil zombis. Cada Servant podría destruir varios miles de muertos sin el uso de un Fantasma. Sin embargo, los wyverns seguían siendo oponentes de una clase superior.

Para Ainz, los wyverns siempre seguirán siendo una mafia ordinaria de los primeros niveles; sin embargo, en el nuevo mundo donde se encontraba ahora, los wyverns seguían siendo una de las subespecies de dragones. Débil e irracional, pero un verdadero dragón. Cualquier Servant podría derrotar fácilmente a uno o dos, pero contra diez, muchos Servants estarían en una situación un tanto difícil. Si había más de cien por cada Servant, entonces incluso con su fuerza completa, pocos de ellos podrían destruirlos a todos. Quizás si Arthuria hubiera usado con éxito su Excalibur, Medusa hubiera usado su fantasma principal y Cu Chulainn hubiera usado el segundo, entonces cualquiera de ellos podría destruir cien wyverns. Pero ninguno de ellos pudo destruir a mil.

Aparte de Ainz, por supuesto, ya que no podía prestar atención a todos los ataques y simplemente deshacerse de ellos con sus propias manos, pero Ainz, incluso si tuviera la oportunidad de destruir mil lagartos alados, claramente no estaba contento.

"Qué molestia..." - el mago negó con la cabeza - "Necesito hechizos que me permitan cubrir un área de varios kilómetros... Son un rango demasiado alto para que pueda usarlos en el cuerpo actual"

"¿Me estás tomando el pelo?" - maldijo Cu Chulainn mientras se apoyaba en su bastón. Ainz podría haber intentado restaurar la energía de sus Servants si hubiera abierto el acceso a sus reservas de maná, pero aun así no sería suficiente para darles el poder suficiente para destruir mil wyverns. "Acabamos de deshacernos de todos sus problemas - y ¡aquí estamos de nuevo!"

Ainz frunció el ceño - la situación no parecía inequívocamente mala, porque ninguno de los Servants estaba en peligro inmediato de muerte - pero aun así claramente no se veía bien. La larga batalla anterior agotó a los Servants y la nueva batalla claramente no les haría bien.

En este caso, Ainz sólo tenía una decisión que tomar.

"Nos retiramos", concluyó y, con la conciencia tranquila, se puso en marcha.

"¿Eh?" - al escucharlo, Jeanne se volvió hacia Ainz, - "¿Qué?"

"Dije que nos retiraremos", el lich se encogió de hombros con calma, "una batalla con mil wyverns, sin importar cuán débiles sean, no es una necesidad en las condiciones actuales. Así que nos retiraremos".

Jeanne parpadeó varias veces, como si no entendiera completamente lo que se decía, como si la simple idea de que alguien pudiera retirarse de la batalla fuera increíble para ella.

"Pero..." la chica obviamente quería discutir lo dicho, pero no pudo. ¿Qué tenía ella que decir? A ella no le gustaba pelear. Ella no quería pelear. No tenía nada que proteger en esta ciudad que ya había sido destruida por una horda de zombis. ¿Qué podría decirle a un nigromante? ¿Que no podía retirarse porque pensaba que estaba mal? ¿Que pensaba que debería luchar contra una horda de dragones?

"Así que estamos huyendo con el rabo entre las piernas", suspiró Cú Chulainn, apoyándose en su bastón, "no puedo decir que no me esperaba esto o que me alegro por ello, pero no tengo otra opción". "Una segunda batalla no es algo que podamos hacer ahora".

"Una retirada es una táctica militar tan válida como un ataque", Arthuria sacudió la cabeza ante las palabras de Cu Chulainn, "no veo nada de vergonzoso en esto".