¿Y si creciera una selva en la ciudad? ¿tan extraño seria? levantarte un día ver que todo a tu alrededor a cambiado, dar dos pasos y en vez de que en la esquina haya un semáforo, te encuentres con un hermoso rio con animales salvajes, salvajes como tu sentir y tu expresar, esa forma de ser salvaje que te asusta acercarte pero aun así no lo puedes evitar, no te puedes aguantar las ganas de ver, de escuchar, de tocar, por que sabes que puedes correr peligro, pero ese peligro te llena de adrenalina y te hace sentir, te hace sentir lleno de nuevo, como esa esquina, llena de arboles frutales y serpientes venenosas, llena de vegetación para alimentarte, alimentarte a pesar del peligro, del miedo, ese alimento que no tiene que ser comida, si no ese alimento que te llena de una forma diferente, te hace sentir vivo de nuevo, te hace volver a sentir, ese elixir que bebes y te hace adicto, adicto a la aventura, a lo nuevo, al mundo que no puedes evitar, que aun así te llena de ansiedad, te pone inquieto, como el viento sobre las hojas de los arboles, que no paran de moverse, lo hacen sin cesar, sin vergüenza, como te mostraste esa noche, que perdiste el miedo y solo te dejaste llevar, magia.
Así será esa esquina, hermosa y peligrosa, llena de vida y magia, sera esa selva en medio de la cuidad que a pesar de estar llena de caos, a ti te trae calma, porque te dejas llevar, con el viento, los olores y sabores, con los animales, que aunque sean peligrosos no los puedes evitar, porque a pesar de todo nos gusta el peligro, lo disfrutamos, por que nos trae experiencias nuevas, anécdotas y enseñanzas, nos hace volver a querer estar vivos, a volver a sentir, así sera la selva peligrosa y excitante, mágica selva en medio de la cuidad.
