Prólogo

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La lluvia caía lentamente sobre Jerichó, la muerte de algunos normies como el alcalde o la directora de la academia de Nevermore seguían marcado a fuego en los corazones de todas las personas pues a fin de cuentas, la directora siempre dio lo mejor para la convivencia entre normies y excluidos. 

Un chico se hallaba frente a la tumba de la directora, era algo alto, cabello rubio y mirada pérdida en la inscripción de la lapida. Unas lágrimas recorrían su rostro mientras trataba de aguantar el dolor de su corazón. El ramo pendía de su mano, suspiraba triste, de nada servían las palabras o pensamientos de consolación, ahora ella estaba muerta.

Tn se agachó para acto seguido depositar el ramo de flores con todo el dolor de su alma, ahora quebrada por el dolor. Besó su mano antes de llevarla a la fría piedra.

―Descansa en paz mamá―susurraba esté―si yo hubiera estado aquí tal vez ahora estarías viva.

El joven se puso en pie y permaneció un buen rato llorando hasta que las lágrimas se mezclaban con la lluvia la cual había aumentado su fuerza.

―Tn―llamó un hombre―es hora de irse, la lluvia irá a peor.

―Lo sé...nos vemos mamá, te quiero―dijo antes de irse con aquel choffer que le habían puesto los inversores de la academia.

Tn en un futuro se haría cargo de la academia, se estaba preparando para ello. Hasta llegado el momento, estudiaría en el lugar y de paso podría ver de primera mano lo que puede mejorar a largo y corto plazo.

―Lamento mucho la perdida de su madre―decía el hombre―siempre protegió la academia.

―Sí, y eso le costó la vida...lo dio todo por ese lugar...

―No se sienta culpable, usted no podía saber nada de lo que iba a ocurrir

―Me encargaré personalmente de que nadie más muera mientras yo esté en la academia.

Tras el papeleo de varios días, Tn acudió finalmente a la academia. Estaba algo reformada y con mejoras de seguridad. Todos los alumnos acudían con sus padres y al chico le llegó un recuerdo el día que su madre le dejó el primer día de clase. Añoraba siempre ese recuerdo.

Él era un hombre lobo, su padre murió hace unos cuantos años y no sabía la causa. La dirección le consiguió plaza en un lugar muy prestigioso gracias a su madre. Él quería ir a Nevermore pero su madre no le dejaba pues quería mantenerlo a salvo de los normies y otros posibles incidentes. Ahora, tras presionar mucho a los inversores, logró que le trasladasen allí.

Se ajustó la ropa del uniforme y empezó a caminar hacía el interior de la academia con cierto paso firme. Su mirada era seria, examinando a todos los presentes, había de tantos tipos de excluidos que le resultaba interesante cuando cerca de la entrada se topó con dos chicas. 

―Hola―saludó una de ellas con una gran sonrisa―supongo que eres nuevo, no recuerdo haberte visto por aquí.

―Así es―respondió.

Algunos de los alrededores se acercaban debido a que era la entrada y vio que cerca de ambas habían unos más que debían ser sus amigos.

―Soy Enid, Enid Sinclair―al decir ese nombre el chico abrió levemente los ojos.

―¿Eres la chica que estuvo en el incidente del hyde y el regreso de Crackstone no?

―Así es, y ella lo mató―presentó a la chica de al lado.

―Miércoles Addams―dijo―he escuchado de ti. Te metiste en muchos líos y trajiste problemas a la academia. Por no hablar de que la directora tuvo que dar la cara por ti ante los inversionistas y demás gente de alto cargo.

Entre Lunas-Enid x TnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora