𝟎𝟐

549 41 7
                                    

Aquí les traigo el capítulo dos gente 💞//

Desde aquel encuentro, Ío se convirtió en una constante en la vida de Ganimedes. A menudo se reunían en el parque, donde se dedicaban a comentar la indumentaria de los transeúntes con ironía. Compartían asimismo rumores y chismes, como el de la señora María, acusada de mantener relaciones íntimas con seis hombres, uno de ellos su propio hermano. Estas charlas continuaron hasta que una tarde llegó Tritón, acompañado de sus trece hermanos. La apariencia de Tritón era deplorable, con ojeras prominentes que delataban su evidente falta de sueño.

"¡Chicos, por favor, tranquilícense o no habrá helado de camino a casa! Y ya saben lo triste que se pone nuestro planeta Neptuno cuando se portan mal." Dijo Tritón al ver que los pequeños se calmaban de mala gana, Tritón suspiró aliviado. Pudo ver a Ío y Ganimedes a lo lejos y se sonrojó un poco al mirar a Ío.

Ganimedes observó con perspicacia cómo el rostro de Tritón se teñía de un sutil rubor al contemplar a Ío. Al dirigir su mirada hacia el recién nombrado, notó un sonrojo recíproco, lo que le llevó a la inequívoca conclusión de que ambos estaban enamorados. Una pícara sonrisa se dibujó en los labios de Ganimedes mientras se levantaba de su asiento. Al hacerlo, las miradas de Ío y Tritón se cruzaron con la suya. "Me retiraré un momento, disfrute la velada con su pareja, Ío...~" Pronunció Ganimedes, provocando un intenso rubor en el semblante de Ío.

Ganimedes se dirigió al parque, albergando una mezcla de tristeza y emoción. La inminente llegada del futuro novio de su hermano, Ío, lo ilusionaba, pero un encuentro fortuito amenazó con desestabilizar su equilibrio emocional.

Al llegar al parque, sus ojos se posaron sobre una escena que le resultó profundamente incómoda: Europa, la mujer que había herido sus sentimientos, besaba apasionadamente a Calisto. El impulso de huir lo invadió, pero el destino pareció conspirar en su contra, pues ambas mujeres lo descubrieron en ese preciso instante. La atmósfera se tornó tensa y llena de incomodidad.

"Emm... H-Hola chicas, ¿se encuentran bien? Espero que estén disfrutando de su cita agradable. Con su permiso, me retiro por un momento."

Ganimedes, visiblemente nervioso, intentó alejarse apresuradamente con la intención de huir y desahogarse en privado. Sin embargo, sus pasos fueron interrumpidos por Europa, la persona con quien menos deseaba interactuar. El joven tembló, reticente a entablar una conversación.

"Ganimedes..." Comenzó Europa. "He venido a disculparme de corazón. Sé que mis palabras te hicieron daño y una disculpa no cambiará las cosas... pero quiero que al menos sigamos siendo amigos. Lamento mucho el daño que te causé. Debí haber hablado contigo antes de cometer esa enorme equivocación... Antes pensaba que no había hecho nada malo, pero Calisto me ayudó a ver cómo te trataba y te hería... Lo siento mucho de verdad..."

Europa sentía un profundo remordimiento, anhelando las conversaciones y las risas compartidas con Ganimedes. Este, recién nombrado, vacilaba, inseguro de si perdonar la infidelidad de Europa o no. Sin embargo, también extrañaba profundamente su presencia. Suspirando, la abrazó con fuerza, aceptando su perdón. Las lágrimas brotaron de los ojos de Europa mientras se abrazaban estrechamente, llorando juntos.

Transcurrieron varias horas entre risas y murmuraciones, hasta que Ganimedes recordó que había dejado a Ío y se despidió apresuradamente de las doncellas. Acudió a donde había dejado a Ío con Tritón y, al ver que ambos permanecían allí, exhaló un suspiro de alivio. Sin embargo, fue sorprendido por los hermanos de Tritón, quienes gritaban pidiendo ayuda.

"¡Ganímedes!, nuestra hermana Larisa se ha quedado atrapada en un árbol alto. ¿Podrías ayudarnos? No queremos que nuestro hermano mayor, Tritón, nos...regañe...?"

Proteo se quedó en silencio al ver que Ío y su hermano se estaban besando. Ganímedes se dio cuenta y le tapó los ojos a Proteo rápidamente.

Ganímedes convenció a Proteo para que no dijera nada. Luego, fue a ayudar a bajar a Larisa del árbol. Al llegar, Tritón y Ío los estaban esperando. Ganímedes se despidió de ellos y regresó a casa con su hermano. Cuando llegaron, encontraron a Júpiter dormido en el sofá, cansado de estudiar.

// Buenos chicos, aquí les dejó el capítulo dos, si se preguntan porque no aparece aún Titan, porque quiero hacer que la relación sea de a poco, les voy avisando que Titan aparecerá en el tercer capítulo ^^

 𝑴𝒚 𝑳𝒊𝒕𝒕𝒍𝒆 𝑻𝒐𝒚 (𝙏𝙞𝙩𝙖𝙣 𝙭 𝙂𝙖𝙣𝙞𝙢𝙚𝙙𝙚𝙨) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora