three of kind | winrina

Capítulo 3

Karina negó con la cabeza hacia la niña que todavía estaba concentrada con sus plastilinas. Junto a ella estaba sentada Minjeong, sosteniendo una galleta de plastilina en la mano.

"¿Así que así es como va a ser? ¿Ya ni siquiera voy a tener la primera galleta? ¿Es Mimin primero, mamá después?" Se burló de la niña que no escuchaba y mucho menos respondía.

Minjeong se rió e intentó darle a Karina su galleta, pero la niña la vió y rápidamente protestó, lo que hizo que la rubia se detuviese en seco después de disculparse con la pequeña chef.

Karina se rió de lo azotada que estaba Minjeong y se lo dijo. "Te azota una niña de cuatro años", susurró.

"Con mucho gusto aceptaré y admitiré ese hecho", respondió la rubia.

"¡Mami!" gritó la niña, mostrándole a Karina una galleta de plastilina que era el doble del tamaño de Minjeong, lo que hizo reír a las adultas.

"Oh, es tan bonito y grande. Gracias", le dijo a la niña, besando su sien.

"¿Ves? El tuyo es más grande", dijo Minjeong.

"No se trata del tamaño, sino del orden. Tú eres su primera prioridad en este momento", respondió Karina, sacudiendo la cabeza en tono de broma. "Mami está triste, Erica", le dijo a la niña.

Al igual que antes, Erica no escuchó las burlas de su madre. En cambio, tomó la galleta de Minjeong y la galleta de Karina y las intercambió, dándole la más pequeña a Karina y la más grande a Minjeong. "Compartan", les ordenó como lo hacia Karina cada vez que su hija jugaba con otros niños.

"¿Compartir? ¿Quieres que compartamos nuestras galletas?"

"Sí."

"Está bien. Nom nom nom", Karina fingió masticar su galleta. "Vaya, tu galleta sabe muy bien, Minjeong-ah".

"La tuya también, Rina-ah." Minjeong siguió el juego, imitando la masticación y los gestos que hacía Karina, luego ambas se echaron a reír de las tonterías de la otra.

"¡Vamos de compras!" exclamó la niña minutos después tras abandonar su plastilina.

"¿De compras? ¿Dónde?" preguntó Minjeong.

"Centro comercial." Erica se subió al regazo de Minjeong y se recostó sobre ella.

"Wow. Ahora mamá está realmente olvidada", comentó Karina, divertida por lo pegajosa que era su hija cuando se trataba de Minjeong.

"¿Qué tal si vamos al supermercado?" sugirió Minjeong. "Necesito hacer algunas compras".

"Bueno." La niña se levantó del sofá y llevó a ambas mujeres a su habitación. "¡Vestido!" ella les dijo.

"¿Quiere ponerse un vestido?" Minjeong le preguntó a Karina quien asintió.

Pronto estaban listas para irse y la niña caminó felizmente entre las dos, sosteniendo las manos de ambas mujeres, gritando de alegría cada vez que la levantaban y balanceaban.

La niña pidió chocolate, y Karina dijo que estaba bien pero sólo si elegía una verdura para cenar esta noche.

"Puedes conseguir zanahorias, tomates o calabazas... lo que quieras", dijo Karina.

"Okey." Erica tomó la mano de Karina, luego la de Minjeong y sorprendentemente las juntó. "Mami, Mimin, esperen aquí", les dijo a las sorprendidas mujeres antes de empujar su pequeño carrito de compras hacia el área de verduras, dejándolas tomadas de las manos en el pasillo de dulces y bocadillos.

"Um..." Minjeong se aclaró la garganta con torpeza, sin estar segura de si debería soltar la mano de Karina o sujetarla. Sus mejillas se estaban poniendo rojas y miró a todos lados menos a la mujer que estaba a su lado.