Prologo: Al salir del trabajo

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Un sábado en la noche se podía ver saliendo de un edificio a varios oficinistas, entre ellos a una chica de baja estatura y ojos purpuras, se notaba bastante alegre y sin duda era de estarlo, llevaba poco mas de un mes en su nuevo trabajo y le estaba yendo excelente.

La paga era buena, no había explotación laboral, sus compañeros y jefes eran buena personas; sin duda, todo lo contario al lugar en el que trabajo antes.

Que bueno es haber dejado ese infierno... y todo gracias a ese idiota indiferente. 

Recuerdos se hicieron presentes en su mente y...

Hmmm hace dos semanas que no voy...

Después de meditarlo por unos momentos la chica decidió ir a aquel lugar, mañana era su día libre y estaba de humor para algunos tragos.

*

*

*

Tan movido como siempre...

La chica había se encontraba fuera de un bar, curiosamente este solo habría los sábados de 4 de la tarde a 3 de la mañana, pero en ese día la cantidad de clientes que tenían no era un broma.

Sin duda el ambiente de aquel lugar atraía a las personas.

Ella lo había empezado a frecuentar hace aproximadamente medio año, como era un lugar tranquilo y agradable le venia como anillo al dedo para esas veces que sentía como si el mundo se derrumbara sobre ella. 

La chica ingreso y lo primero que vio fue un joven de ojos azules, rostro inexpresivo y larga cabellera, este preparaba varias bebidas en un instante para seguido una chica las llevara a las respectivas mesas.

Mientras se aproximaba a la barra vio que por un instante aquellos ojos azules se enfocaron en ella; seguido vio al chico empezar a preparar una bebida, justo cuando ella se sentó el chico ya tenia lista su bebida favorita.

- Tan eficiente como siempre.

- ...

- Así como hablador. 

La chica se rio y empezó a tomar su bebida, por su lado al chico le llegaron mas pedidos así que siguió en lo suyo.

Cualquiera pensaría que este idiota es mudo si no fuera por sus variados y extensos diálogos: "Entendido" "Estará listo en un momento"  y "Ya vamos a cerrar"

La chica empezó a recordar cuando hablo con otros clientes y estos le dijeron que en lo que llevaban frecuentando el bar solo lo habían escuchado decir esas tres frases.

Idiota, te falta socializar mas.

La chica termino su bebida pero antes de pedir el chico ya tenia otra lista y se la paso. 

Mientras bebía, la chica empezó a hablarle sobre como le estaba yendo en su trabajo, para los ojos de todos en el lugar el chico no hacia mas que ignorarla, no la miraba y ni siquiera le dirigía una sola palabra. 

Sin embargo, aunque pareciera extraño esta fue una de las razones por la que ella empezó a frecuentar este lugar, no necesitaba que le tuvieran lastima o que alguien se pusiera a consolarla, solo necesitaba beber un trago y desahogarse de toda la mierda que soportaba en su trabajo, solo eso.

Pero nunca pensó que ese sujeto indiferente siempre la escucho y sin necesidad de ponerse a consolarla, con solo un par de palabras y una oportunidad le dio la mejor ayuda. 

Esto despertó en ella un gran interés por aquel chico de ojos azules y como había que empezar por algo entonces decidió que le hablaría tanto como fuera necesario hasta que el empezara a hablarle. 

Oportunidades - Tomioka x Shinobu - Kimetsu No YaibaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora