Sola nunca más [Young Miko]

capitulo 10

"Tienes que dejar de asustarme" digo sosteniendo mi pecho del susto. La veo reír. Tenía el pelo envuelto en una toalla. Usaba un sports bra rosados y unos pantalones es de algodón grises. Se veía mucho mejor, más relajada. Me gustaba verla así.

"Tu tienes que dejar de asustarte tanto. Todavía no llega la comida?"

"No, nada aún. Me puedo bañar?"

"Claro, déjame te enseño donde está todo" camina al frente mío. Su apartamento es muy ella no se como explicarlo, la decoración es moderna pero a la vez acogedora. Con toques negros y blancos que contrastan bien con la luces LED que adornan las paredes y techos. El lugar consiste en una sala y cocina pequeña, un baño muy grande que conecta con su cuarto y armario. Y también el cuarto de visitas donde coloco mis tacones que use temprano.

Me da un poco de risa ver en una esquina de su cuarto una gran cantidad de peluches de hello kitty, kuromi, my melody y varios Dr Simis. Juro que tiene el alma de una niña.

Estando ya en su armario la veo abrir unos cajones como buscando algo. Parece tienda aquí, cada espacio de su armario está repleto. Tiene demasiadas cosas, rápidamente noto prendas que me gustan. Y su colección de zapatos es inmensa, debería ponerme a buscar los zapatos que me robó aquella vez. Estoy segura que si me los llevo no se daría ni cuenta.

"Prefieres shorts o pantalones?"

"Pantalones porfavor" asiente mientras que me entrega unos sweats de algodón como los de ella en negro, un sports bra del mismo color y una camisa holgada. Sin duda se que me va a quedar todo, bueno tal vez no el bra. Casi que somos al rededor de la misma talla, de todas maneras ella es más fina y pequeña que yo.

La veo abrir otro cajón y noto que está lleno de paquetes de ropa interior nueva. Me parece extraño, porque tiene tantos?

"No lo mires así. Es que simplemente cuando me gusta algo lo quiero en cada color que existe. Y como puedes ver esta ropa interior me encanta. Agarra unos" solo me río y acepto, son unos boy shorts. La dejo guiarme al baño donde me indica todos sus productos y donde encontrar extras de todo por si necesito algo más.

Ya en la ducha me amarro el pelo para no mojármelo y me dejo envolver por el agua caliente, relajando mi cuerpo deshaciéndome de cualquier rastro del día. La montaña rusa de emociones de hoy me ha dejado agotada, no me imagino lo cansada que está ella. Al terminar y cerrar el agua me da escalofríos al sentir la combinación de olores, huelo a ella. La combinación entre su exfoliador de cuerpo y jabón líquido me deja con esta fragancia almizcleña. Es como que la feminidad y la masculinidad tuvieran un bebé perfecto, esa es Vicky. Hago una nota mental para comprar los mismos productos yo también.

Antes de salir me veo al espejo. Usando su ropa, oliendo a ella, en su casa. Me podría acostumbrar a esto. Una sonrisa boba apareciendo en mi cara. Aquí voy otra vez, pintando la imagen perfecta en mi cabeza.

Ya basta.

Salgo y la encuentro sentada en las sillas de la barra, la comida ya está puesta ahí y ella está concentrada en su teléfono. Me escucha acercarme y la veo entrecerrar los ojos haciendo una mueca.

"Que?" Me miro de pies a cabeza

"Mi ropa te queda mejor a ti que a mí, no es justo. Es que tú tienes mejor cuerpo que yo. Ven siéntate" dice jalando la silla alado de ella para mi.

Mis mejillas arden, con pena me acerco, las dos comenzamos a comer en silencio. Escuchamos música a lo lejos, por lo visto el after party ya empezó, igual ninguna de las dos tenemos planes de ir.

"Hablé con Mauro mientras te bañabas" a este punto ya terminamos de comer y nos dirigimos al sofá para ponernos más cómodas. "No se fueron a PR, talvez yo estaba exagerando un poco. Dice que están en un hotel en San Diego, pero Mariana si que está molesta. La lastime y me siento pésima. Ella solo quería ayudarme y yo me porte horrible"