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𝟷𝟷:𝟸𝟻 𝙰𝙼...

Pov's Tom

Estaba durmiendo de lo mejor con Sofi, anoche sin darnos cuenta nos dormimos los dos juntos, mis ánimos no estaban de lo mejor por lo que habia pasado a la noche y por no averme dado cuenta antes, pobre de mí pelinegra...

Sentí una fuerte luz entre mis ojos, la cabeza de Sofi estaba apollada un poco en mi pecho mientras yo la sostenía de la cintura, los dos estábamos tapados asta la cabeza.

Cuando habri los ojos ví a Bill con una camara y el flash súper fuerte, georg se reía en silencio tratando de disimular, pero ni le salió.
Y por último Gustav estaba con un tazón de dulces mientras miraba el supuesto "espectáculo"

Yo me quedé mirándolos con una cara de culo mientras los 3 me miraban con una sonrisa de "no me mates" parecían estatuas.

-Que mierda hacen?!- les dije mientras me levanta a de la cama de golpe y resfregandome los ojos como un bebé.

-Estemm- dijo georg rascandoce la nuca nerviosos.

-Hay no seas mala onda Tom, queríamos guardar el momento- me respondió Bill sonriéndome falsamente.

-tendríamos razón- decía Gustav que no sabía ni dónde estaba parado, el solo escuchaba mientras comía sus dulces.

-borren esa foto y salgan, insoportables dejen dormir!!- les dije enojado empujando a uno por uno por la puerta para que se vallan.

-MI PELO PUTO- chillo Rapunzel mientras lo tiraba hacia afuera de la habitación.

-MIS DULCES TOM- grito Gustav, ni que se muriera por no tener sus caramelos.

Bill solo me suspiro y me miró de la peor cara posible, azote la puerta algo despacio ya que la pelinegra estaba durmiendo.

Di un suspiro de estrés y cuando me di la vuelta ví a Sofi sentada en el medio de la cama, las sábanas la tapaban asta la cintura mientras se resfregaba los ojos como un bebé.
Se veía demaciado hermosa y tierna, espero no aver quedado embobado.

-Buen día princesa!- la saludé mientras le daba una sonrisa, era impresionante como cambiaba mi personalidad con Sofi, con ella me salia mi verdadero lado tierno, con las demás nunca sentí lo mismo.

-buenos días...- me respondió forzando una sonrisa, me partía en mil verla haci.

-Como te sentís linda- le pregunté con una vos suave.

-Mal... me duele demaciado mi cabeza Tom- dijo Sof con un tono bajo y suave mientras se tocaba la frente.

Cuando le toque la frente para ver si no tenía fiebre estaba algo caliente hacique para sacarme la duda decidí buscar el termómetro.

-esperame aquí- le dije saliendo de la habitación y llendo hacia la mia, busque entre mis cajones sy encontré uno, lo agarre y me diriji hacia donde estaba la pelinegra.

-¿Puedo?- le pregunté señalando el cronómetro.

-Si claro- me respondió en un tono bajo y triste.

Como su pijama era un pantalón largo y un top de tiras, ajustado y negro, no tenía que levantar remera ni nada.

Coloque el cronómetro debajo de su axila y espere a que aga el ruidito.

-¿Por que todo me pasa a mi Tom?- me preguntó la pelinegra cansada, había pasado por mucho, en verdad era demaciado fuerte y por eso era ella y siempre ella, no había alguien que la reemplace, su cuerpo perfecto, cara, pelo, personalidad, era hermosa... Además de su cu- no tet- mejor no digo nada, es perfecta en todo.

𝙻𝚊 𝙿𝚛𝚘𝚖𝚎𝚜𝚊 (Tom kaulitz)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora