_13_ (Segunda Parte)

75 8 53
                                    

________☆☆☆_______

Debra

El tiempo corría y mi incomodidad seguía en aumento al ver ciertas actitudes. Mandy hacía rato que se había quitado del medio con un chico rubio que divisó antes. Missy pareció haber llamado la atención de Byron, pues pude darme cuenta de que él le mostraba algo de su móvil. Y, mientras tanto, Rachel seguía tonteando con Hades y él le seguía el juego.

"¿Y bien?"

Llevaba todo el tiempo que estuvimos en ese reservado teniendo una lucha interna con mi estúpida conciencia, la cual no vio momento más oportuno para aparecer que ese.

-"¿Qué?" -Continuaba cruzada de brazos mirando en cualquier dirección que no fuese a mi lado.

"¿Piensas hacer algo?"

-"No" -Doce minutos y seguía preguntándome lo mismo a pesar de recibir la misma respuesta.

"¿Vas a dejar que haga lo que quiera?"

-"Es su vida"

Me incliné un poco hacia delante para coger mi vaso y tomar un trago.

"¡Pues yo me niego!"

-"Niégate cuanto quieras, sigo teniendo la última palabra en las decisiones"

Así era, me sentía orgullosa de ganarle las batallas a la voz en mi cabeza. Era consciente de que mi cordura era inexistente, pero a estas alturas no me importaba.

Salí de mi trance momentáneamente al oír unas fugaces risitas, miré inconscientemente a mi lado descubriendo que se trataba de Rachel. Hades la hacía reír al hacerle sentir cosquillas mientras retiraba un pequeño mechón de su rojo cabello de su rostro y lo colocaba tras su oreja.

Rodé los ojos y respiré hondo una vez más antes de beber otro sorbo de mi bebida.

"¡Deja de hacerte la orgullosa y reclama lo que es tuyo!"

Fruncí el ceño a modo de sorpresa y desconcierto ante las palabras de mi conciencia.

-"Aquí no hay nada mío"

"¡Quiero a nuestro hombre de vuelta!"

-"¡No es nuestro hombre!" -Tapé mis ojos con una de mis manos y los froté en busca de calma.

-¿Te encuentras bien?

-¿Uh?

La voz en mi cabeza desapareció en cuanto fue arrollada por la voz masculina en su lugar. Volví a mirar hacia el lado donde provenía encontrándome con esos odiosos ojos del color de la miel viéndome con una sonrisa entre tierna y burlona al mismo tiempo que no me daba buena espina.

Eché un vistazo ligero y me di cuenta de que Rachel estaba ahora entretenida junto a Missy con algo que Byron les mostraba a ambas.

-¿Cuñadita?

Rabia.

Rabia era lo que sentía cada vez que me llamaba de esa forma. No, no era su cuñadita. No, no estaba en disposición de soportar sus gilipolleces. Y no, no iba a dejarle jugar conmigo de nuevo.

Ritual II: La historia comienza... ¿de nuevo? © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora