(🌴) Aɱσɾ ҽɳ Lσʂ Aɳɠҽʅҽʂ(🌴) - [SASHARCY]

﹙14﹚! εїз

Sashy ya había llegado al hospital, se subió al ascensor al tercer piso como le había dicho su azabache, cuando se abrió la puerta vio que estaba sentada en una banca, llorando, sola, se acerco de inmediato.

- Mar Mar - susurró mientras la apretaba contra sí - ¿Qué ha pasado?

- Hay, Sashy - respondió Mar entre sollozos, correspondiendo al abrazo - mi mamá... sufrió un accidente y... - las lágrimas brotaban de sus ojos cristalizados - ...la mandaron a cuidados intensivos...

Así es, en ese trayecto donde Sasha estaba dirigiéndose al hospital, ella había entrado a ver a su madre, quien supuestamente solo tenia una leve fractura en su costilla y golpes no tan graves, pero al parecer tenia traumatismo torácico (contusiones pulmonares y lesiones en el corazón o los grandes vasos sanguíneos) y tuvo una crisis que hizo que la maquina a la que estaba conectada hicieran pitiditos, nuestra pequeña azabache vio como su madre sobresaltaba sobre la cama, y con lagrimas en los ojos llamo a las enfermeras, quienes de inmediato se la llevaron en una camilla al área de uci.

- Escúchame MarMar - le dijo Sasha con voz firme, sin dejar de abrazarla - todo va a estar bien,  estoy aquí para consolarte, para apoyarte en este momento tan difícil. Puedes desahogarte conmigo, llorar todo lo que necesites, no estás sola.

- Lo peor es que mi papá aun no llega - dijo enojada - lo he llamado pero parece ni siquiera importarle mi madre

- No te preocupes por él ahora - le dijo Sasha con dulzura mientras acariciaba su cabello - lo importante es tu mamá. Concéntrate en ella, en enviarle toda tu fuerza y energía.

Mar asintió con la cabeza, aún sin poder contener las lágrimas. Sasha la guió hacia una sala de espera cercana, donde se sentaron juntas en silencio. La rubia fue por un pañuelo para secarle  las lágrimas  a la menor y le dio un vaso de agua para que bebiera.

- ¿Quieres que llame a tu papá de nuevo? - preguntó 

Mar negó con la cabeza.

- No, no quiero hablar con él ahora - respondió con voz temblorosa - solo quiero saber que mi mamá estará bien.

Sasha la miró con comprensión y le dedicó una sonrisa tranquilizadora.

- Lo estará, Mar. Confía en los médicos, ellos harán todo lo posible por ella. Y tu también estarás aquí para apoyarla en cada momento.

Cada momento que pasaba era clave, la señora se debatía entre la vida y la muerte, pero de repente, llego el Señor Wu, cuando Marcy lo vio, fue hacia el y lo abrazo, cosa que el hombre correspondió

- Donde estabas, tonto - le dijo Marcy

- Trabajo hija, como esta tu madre

Marcy se separó del abrazo y lo miró con ojos llenos de lágrimas.

- No lo sé, papá. Está en cuidados intensivos. Los médicos dicen que su estado es delicado - dijo sollozando

El señor Wu se quedó en silencio por un momento, asimilando la gravedad de la situación. Luego, colocó una mano sobre el hombro de su hija y le dijo con voz firme:

- Escucha mi bonita, vamos a ser fuertes por ella. Los médicos harán todo lo posible y nosotros también. Tu madre es una mujer fuerte, saldrá adelante.

Marcy asintió con la cabeza, sintiendo un poco de consuelo en las palabras de su padre. En ese instante, la enfermera que las había atendido anteriormente se acercó a ellos.

- ¿Son familiares de la señora Samantha Wu? - preguntó.

- Sí, somos su hija y su esposo - respondió el señor Wu.

- La señora ha experimentado una leve mejoría en su estado - informó la enfermera - pero aún es demasiado pronto para determinar su evolución. Los médicos necesitan más tiempo para evaluar su condición, alguien tendrá que quedarse por cualquier situación

Al escuchar eso, los Wu se miraron, el padre de Marcy se podía quedar, pero el problema era que Marcy no se podía quedar sola en la casa, y de noche, era muy peligroso, así que Sasha interrumpió

- Señor Wu - saludó inclinando levemente su torso con respeto - si no es molestia, Marcy podría quedarse en mi casa esta noche.

El señor Wu lo pensó por unos minutos, no conocía de todo a Sasha, solo sabia que era amiga de su hija, pero no tenia otra opción, pero primero le pregunto a Marcy

- Hija, ¿te parece bien quedarte en su casa solo por esta noche? - preguntó el señor Wu, buscando la aprobación de Marcy.

- Sí pa, no hay problema - respondió Marcy con una sonrisa tímida, agradecida por la oferta de Sasha.

El señor Wu se dirigió a Sasha, con un tono más cálido en su voz

- Muchas gracias, Sasha. Agradezco tu amabilidad y generosidad en este momento tan difícil para nosotros.

- No es nada, señor Wu - respondió Sasha con una sonrisa sincera - es lo menos que puedo hacer. Marcy es mi amiga y quiero ayudarla en lo que pueda.

Con el asunto resuelto, Marcy y Sasha se despidieron del señor Wu, quien se quedó en el hospital para esperar noticias sobre la evolución de "su esposa"

- ¿Vamos a comprar algunos dulces si? - dijo Sasha

- No tengo mucha hambre - hablo Mar

- Vamos Marbles - insistió Sasha con voz suave - un poco de chocolate no le hace daño a nadie. Además, te hará sentir mejor.

Marcy no estaba convencida, pero la determinación en los ojos de Sasha la hizo ceder.

- Está bien, vamos - dijo finalmente con un leve suspiro.

Sasha decidió arriesgarse, así que tomo la mano de Marcy, el corazón de la contraria latía algo rápido por el contacto, pero no se negó y dejo que la tomase de la mano para dirigirse al centro comercial más cercano y entraron al área de golosinas. Marcy se dejó llevar por la variedad de colores y sabores, y poco a poco fue olvidándose de sus preocupaciones. Sasha la observaba con satisfacción, feliz de verla sonreír por un momento.

Luego de comprar una bolsa llena de dulces, se dirigieron al área de peluches. De pronto, Marcy vio un enorme oso de peluche marrón con un corazón rojo en el pecho. Sus ojos se iluminaron y un grito de emoción escapó de sus labios.

- ¡Qué lindo osito! - exclamó con una sonrisa radiante.

Sasha la miró con ternura. Sabía que ese peluche era perfecto para Marcy. Se acercó a él y lo tomó en sus brazos.

- ¿Te gusta? - preguntó con una sonrisa pícara.

- ¡Me encanta! - respondió Marcy con entusiasmo.

Sasha le entregó el oso de peluche a Marcy, quien lo abrazó con fuerza. En ese momento, Sasha supo que había logrado su cometido: Marcy se había olvidado por un momento de la angustia y la tristeza, y ahora tenía una sonrisa genuina en su rostro.

- Nos lo llevaremos 

- Pero no tengo di... - se vio interrumpida

- Que te dije sobre el dinero linda - hablo mientras la tomaba del mentón - yo pago - dijo con una sonrisita en su rostro

Marcy se sonrojo un poco y dejo que la rubia pagara el peluchito