2. Talia Hale

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De la puerta emergió una hermosa mujer de cabello negro azabache y ojos astutos y penetrantes color marrón. La mujer se presentó como Talia Hale, madre de Cora. Parecía amable y carismática, pero también se veía su autoridad en la mirada. O eso fue lo que vagamente pensó Stiles al verla. Cuando los hicieron entrar, se percató de una discusión que estaba teniendo lugar en la planta de arriba. 

"Mis hermanos, ignóralos." Susurró Cora mientras rodeaba sus ojos con fastidio.

Con un pequeño recorrido, Cora le presentó a sus otros familiares en la gigantesca casa que más que una parecía una mansión. Aunque a Stiles no le sorprendía el tamaño dada la cantidad de personas que vivían allí y que fueron apareciendo a medida que se adentraba en ella. 

Mientras Stiles se esforzaba por recordar todos los nombres y caras, a excepción de los hermanos que seguían discutiendo arriba, Cora analizaba en dónde sería mejor continuar el trabajo. Finalmente se concentraron rápidamente en la sala a debatir sus puntos sobre el proyecto ya que no les quedaba mucho tiempo y estaban tratando de completar la información y afinar los detalles para que estuviera listo a la fecha. Además, según Cora, debía ser totalmente perfecto en sus estándares, lo que era estresante para Stiles quien no era muy meticuloso a menos que le interesara el tema, y este en particular no le emocionaba demasiado, debido a eso tenía una presión adicional que le generaba bastante ansiedad cada vez que lo pensaba.

Fue en un momento casual en que estaba hablando con Cora, que lo notó. La madre de Cora estaba allí observándolo específicamente, analizando cada cosa que decía y hacía como si fuera una clase de sospechoso de algún crimen. Poco después se dio cuenta de que Stiles la había notado así que lentamente se marchó. Stiles creyó que era extraño e inquietante pero lo dejó pasar. Tenía otras cosas en mente en ese momento.

Estuvieron por unas cuantas horas sin avanzar mucho más en su proyecto, así que Stiles le prometió investigar a fondo y terminar lo que quedaba. Cora le indicó que le entregara un día antes el trabajo por si tenía que hacer alguna "corrección". Debido al temperamento de la chica, no se negó. 

Los planes de Stiles eran terminar el proyecto e irse lo más pronto posible a casa, por alguna razón este lugar lo ponía nervioso y sentía como si todo el mundo lo estuviera observando. Pero no pudo decir nada hasta que Talia lo invitó a cenar. Y cuando comenzó a hacerle preguntas ya le empezó a dar miedo. 

"Y dime, Stiles, ¿En qué trabaja tu padre?"

"Es el sheriff, Señora Hale."

"Oh, dime Talia por favor."

"Está bien... Talia"

La mujer sonrió. Le había preguntado por su nombre, edad, dirección, sus padres, a qué se dedicaban, sus intereses, qué quería estudiar cuando se graduara (¡Si, con trece años!). Incluso preguntó si tenía novia. Lo cual era extraño para él pensando que en ese momento su único interés era por los cómics. La mujer se dio por satisfecha cuando Cora le gritó que se detuviera con su cara roja como tomate. Stiles decidió ignorar toda esa escalofriante "conversación" de la cena, se resguardó mejor en su lugar seguro (su mente) porque esta había sido una muy extraña e incomoda quedada en casa de un amigo. Era casi como si estuviera en un interrogatorio y el comportamiento de todos le hacía ver que estaba siendo analizado constantemente.

Después de irse a casa, no quiso volver al lugar en un buen tiempo.

La familia Hale - Sterek AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora