誤解

2.

Era una noche tranquila en Musutafu, y los héroes de la ciudad finalmente estaban disfrutando de un merecido descanso en un restaurante local. Hawks, Endeavor, Katsuki y Shoto estaban sentados en una mesa, esperando sus platos mientras el silencio flotaba sobre ellos como una nube pesada.

Había algo incómodo en el aire, una pequeña tensión parecía llenar el espacio entre padre e hijo. Shoto no tenía una relación muy profunda con su padre, a pesar de haber hecho progresos en su relación en los últimos años. El perdón estaba presente, pero las cicatrices emocionales aún eran evidentes, creando un abismo de desconexión entre ellos.

Enji estaba especialmente consciente de este abismo. Anhelaba reconectar con su hijo desesperadamente, pero no sabía por dónde empezar. Las palabras eran difíciles de encontrar cuando se trataba de asuntos personales, y el silencio que reinaba en la mesa solo destacaba su incapacidad para comunicarse adecuadamente.

Katsuki, siempre impulsivo y directo, lanzaba miradas de reojo entre padre e hijo, claramente incómodo con la situación, pero sin saber cómo intervenir.

Hawks, el maestro de la tranquilidad, decidió intentar una vez más disipar la tensión que flotaba sobre la mesa. Con una sonrisa juguetona, comenzó a hablar sobre sus propias hazañas heroicas, destacando lo increíble que había sido en sus misiones recientes.

― ¿Saben qué, chicos? Estaba volando por la ciudad hoy y pensé para mí mismo: "¡Hawks, eres simplemente el mejor!" ― bromeó, guiñándole un ojo a los otros héroes.

Katsuki, conocido por su personalidad explosiva, no pudo evitar responder al desafío implícito de Hawks. ― ¿El mejor? ¿Tú? ¡Ja! No me hagas reír, maldito pollo! Puedes ser rápido, ¡pero yo seré el próximo héroe número uno, el mejor héroe de esta generación! ―

La mirada aguda de Katsuki cortaba el aire como una cuchilla, desafiando a Hawks a contradecirlo.

Hawks, no uno para retroceder ante una provocación, levantó una ceja en respuesta. ― ¿Ah sí? ¿Y qué te hace pensar que eres el mejor, Dynamight? ¿Tus explosivos ruidosos? ―

― ¡Exactamente! ¡Mis explosivos son poderosos y precisos, mucho más que tus habilidades de vuelo! ¡No eres más que un pollo glorificado! ―

Las palabras fueron como chispas en un barril de pólvora, desencadenando una acalorada discusión entre los dos héroes. Keigo y Katsuki intercambiaban insultos y provocaciones, cada uno tratando de demostrar su superioridad sobre el otro.

― ¿Pollo glorificado? ¡Al menos yo no grito como un niño mimado durante las peleas! ― replicó Hawks, elevando su voz para competir con la de Katsuki.

― ¡Ah, cállate, gallina! ¡No eres más que un alarde sin sustancia! ― respondió Katsuki, su voz casi ensordecedora en la pequeña sala del restaurante.

Mientras la discusión continuaba, otros clientes del restaurante lanzaban miradas curiosas a la mesa de los héroes, sin saber si debían preocuparse o simplemente disfrutar del espectáculo.

Enji y Shoto observaban con una mezcla de incredulidad y diversión mientras Hawks y Katsuki continuaban su animada disputa sobre quién era el mejor héroe. Los dos rubios estaban completamente inmersos en su discusión, sus rostros rojos de emoción mientras intercambiaban insultos y provocaciones.

Enji no pudo evitar sorpreenderse al ver a su hijo sonreir levemente mientras miraba a Katsuki, una ligereza en sus ojos que raramente veía. Shoto estaba relajado, su postura tensa anterior reemplazada por una expresión relajada de diversión. Tal vez, pensó Enji, momentos como este eran exactamente lo que necesitaban para reconectar como padre e hijo.