sombras del destino

2

Narra shouta

Después de haber visto a ese grupo de raros, me dirigí hacia la chica que estaba sentada. Me coloqué a su lado, pero ella ni siquiera notó mi presencia, lo cual me pareció interesante. Así estuvimos unos minutos hasta que el maestro nos llevó a hacer la prueba escrita; esa parte era fácil para mí.

Después de terminar, comenzamos las pruebas físicas. Allí, el peli azul y el rubio destacaron. El chico de pelo azul, creo que se llamaba Oboro, tenía el poder de crear nubes. Por otro lado, el rubio, que se llamaba algo así como Hizashi, tenía la habilidad de amplificar su voz. Gracias a eso, ahora tenía un pitido en mis oídos.

La chica de pelo blanco no se quedó atrás, aunque tampoco resaltó. En cambio, la pelinegra, que estaba bastante descubierta, iba a la delantera entre las mujeres. Lo curioso es que a la chica de pelo blanco parecía no importarle en lo más mínimo, y eso era intrigante.

Estábamos en medio de una carrera, y la regla era clara: los primeros 10 en llegar se quedarían, mientras que los demás serían eliminados. Comencé a correr, impulsándome hacia arriba con mi bufanda. Ella también se esforzaba y me impulsaba aún más rápido.

Desde lo alto, vi cómo el chico de pelo azul pasaba junto a mí, montado en una de sus nubes recién creadas. A su lado, el chico rubio corría al lado de la pelinegra, cuya piel estaba sorprendentemente descubierta. Observé a otros competidores aquí y allá, pero la chica de pelo blanco no estaba en ninguna parte.

Los primeros en llegar fueron Misuk, un chico con habilidades eléctricas, y la chica descubierta. Luego, el chico de pelo azul, yo y el rubio llegamos en segundos después. Finalmente, otros tres competidores cruzaron la línea de meta, la chica de pelo blanco llegó en octavo lugar. La indiferencia en su rostro seguía siendo un misterio para mí.

La siguiente prueba consistía en robar bandas, y cada banda tenía un valor de 300 puntos. El grupo que acumulara más puntos ganaría y avanzaría a la última prueba.

Misuk, con su banda alrededor del cuello, ya tenía 900 puntos. Los grupos estaban formados por cinco personas, y al mirar a mi alrededor, noté que Oboro, Hizashi y las dos chicas de pelo blanco y negro estaban solos.

El chico de pelo azul se acercó a mí.

- "¿Te quieres unir a nosotros?" - preguntó con una sonrisa en el rostro.

- "Supongo" - respondí y me acerqué al grupo. Sin embargo, la chica de pelo blanco no tenía su banda, lo que me dejó perplejo.

Oboro me presentó al grupo:

- "El rubio es Hizashi Yamaha, la pelinegra es Nemuri Kayama y la que parece estar soñolienta es Yuki. Y yo, tu servidor, soy Oboro Shirakuro" - dijo Oboro.

En medio de la carrera, observé cómo Oboro y Nemuri utilizaban sus peculiaridades con mayor intensidad. Por mi parte, me dedicaba a robar las bandas de los rivales, mientras que la chica de pelo blanco volvía a desaparecer, lo cual me parecía curioso.

Hizashiya tenía 3 bandas, mientras que Oboro y Nemuri acumulaban 6 cada uno. Yo, en cambio, tenía 4 bandas.

Nos aproximamos al grupo de Misuk, y Nemuri distrajo a los demás con sus encantos. Mis ojos estaban resecos debido al uso constante de mi peculiaridad, pero aún así continué. Cuando Misuk se dio cuenta, me lanzó una mirada cargada de odio.

Hizashi logró quitarle 2 de las 5 bandas a su grupo, lo que debería ser suficiente. En total, teníamos  21 bandas , pero Yuki seguía sin aparecer por ningún lado.

Corrimos hacia la línea de meta cuando Misuk y su grupo se acercaron a toda velocidad y nos arrebataron 7 bandas. Esto me enfureció, así que los perseguí, pero llegué demasiado tarde. Habían cruzado la meta, y nosotros llegamos con 14 bandas (4200 puntos). Segundos después, Yuki finalmente apareció, con el rostro enrojecido como un tomate. Estaba furioso porque su ausencia podría costarnos la victoria.

Cuando se anunciaron los resultados, me sorprendí gratamente: teníamos 28 bandas, es decir, 8400 puntos. Todos nos volteamos y vimos a Yuki mirando el suelo. Ella había conseguido un segundo lugar entre los grupos, lo cual me dejó perplejo, y eso que no era fácil sorprenderme.

- "Gracias, hermosa" - gritó Hizashi, y ella se cubrió los oídos ante el estruendo. Nemuri la abrazó junto a Oboro, mientras yo la observaba con sorpresa.

Ella permaneció allí, sin mirar a nadie. Parecía que cargaba una tristeza profunda.

Finalmente, llegamos al último desafío, una prueba para demostrar nuestra valentía.

Me estiré un poco y volví a ver a la chica sentada, Yuki. Su expresión sugería que no quería estar allí. Mi pregunta era: ¿por qué había venido?

Cuando sonó la señal de cambio, nos dirigimos hacia un punto de comunicación contra los villanos. Hice lo mejor que pude, aunque no estoy seguro de si fue suficiente.

Ahora solo me queda esperar los resultados.

Comencé a caminar hacia mi casa. Cada paso se siente como una carga pesada. Mi cuerpo entero protesta, y el cansancio se ha multiplicado al menos un 100%. Todo lo que deseo es llegar a casa y sumirme en un sueño reparador.

Mis músculos parecen tener vida propia, y estoy tan absorto en mis pensamientos que no noté a Yuki a mi lado. Su presencia es inesperada, y me sorprende que esté aquí sin hacer ruido. ¿Una sonrisa? ¿O simplemente un gesto fugaz? Yuki sigue caminando como si nada, y su misterio me intriga aún más. ¿Quién es esta chica enigmática que aparece en mi camino?