Al no poder perforar un agujero, Yan Ge tuvo que conformarse con un enfoque alternativo.
Retorció las cerdas de cerdo, de manera similar a hacer un pincel de caligrafía, y luego recortó las cerdas con tijeras, haciéndolo apenas funcional. A continuación, talló un agujero en el costado de un segmento delgado de bambú y lo llenó con resina de pino, insertando el extremo de las cerdas retorcidas en él.
La resina de pino tenía excelentes propiedades adhesivas, lo que garantizaba que las cerdas permanecieran intactas. Una vez que la resina se secó, se completó una versión improvisada de un cepillo de dientes. Aunque faltaba su apariencia, prevalecía su practicidad. Habiendo tenido éxito, Yan Ge procedió a hacer dos pinceles más de pasada.
La siguiente tarea fue hacer pasta de dientes.
Hasta donde sabía Yan Ge, independientemente del tipo, la pasta de dientes generalmente constaba de cuatro componentes básicos: un limpiador, un abrasivo, un aglutinante y un agente aromatizante. Para su versión improvisada, simplemente necesitaba mezclar sal, menta, resina en polvo y aloe vera hasta obtener una consistencia cremosa.
La sal eliminó los residuos, la menta actuó como antiséptico, la resina en polvo proporcionó adherencia y el aloe vera redujo la inflamación.
"Xiao Chuanzi, ve al Pabellón Médico Imperial y consigue un poco de menta y aloe vera. Si se niegan, puedes gastar dinero para comprarlos. Estos dos artículos son inofensivos, por lo que deberías poder adquirirlos", Yan Ge, valorando la higiene dental, le entregó dos lingotes de plata que pesaban cinco taeles cada uno a Xiao Chuanzi, asegurándose de obtener menta y aloe vera.
Afortunadamente, la familia Yan era acomodada, ya que la señora Yan le había dado cien taeles de plata y doscientos taeles en billetes de plata antes de entrar al palacio. De lo contrario, los maravillosos días en los que nos cepillamos los dientes con pasta de dientes quedarían sólo en el recuerdo.
"Sí, joven maestro", Xiao Chuanzi se guardó la plata en el bolsillo y se dirigió apresuradamente al Pabellón Médico Imperial. También tenía curiosidad sobre lo que pretendía crear el Joven Maestro.
Song Ruhao practicaba el manejo de la espada en el jardín, mientras Du Zhengfeng y Zhou Wenhao observaban a su lado. Dentro del palacio, solo se permitía portar armas a los guardias del palacio, y la espada que usaban era de madera.
Al vislumbrar la figura de Xiao Chuanzi, Song Ruhao guardó su espada y preguntó con curiosidad: "Xiao Chuanzi y Wan Xiang han estado yendo y viniendo estos últimos días. Me pregunto qué estará pasando en el jardín Chunfang".
Du Zhengfeng respondió: "Supongo que no es nada significativo. No he oído ningún alboroto inusual".
Song Ruhao asintió y les indicó que se sentaran en el pabellón. "Yan Ge parece no tener interés en pasar tiempo con nosotros, incluso cuando lo dejamos solo, no parece aburrido".
Zhou Wenhao resopló levemente. "Yan Ge se siente por encima de nosotros. ¿Por qué le importaría estar con nosotros?
Tanto Song Ruhao como Du Zhengfeng simplemente sonrieron.
Sin saber que su reclusión había despertado curiosidad entre otros, Yan Ge inmediatamente comenzó a hacer pasta de dientes tan pronto como Xiao Chuanzi regresó con los ingredientes.
Trituró la menta y el aloe vera, molió la resina seca hasta convertirla en polvo y la mezcló con sal para formar una crema espesa de color verde hierba, llenando un tazón grande.
Yan Ge lo olió y asintió con satisfacción. El refrescante aroma del aloe vera y la menta, combinado con el aroma de la resina, no era desagradable. Sin embargo, debido a las condiciones limitadas, su vida útil no sería demasiado larga. Si tuviera la oportunidad, podría preguntar en el Pabellón Médico Imperial sobre métodos para extender su vida útil.
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Sistema de mejora de consorte masculino
General Fiction¿Qué? ¿Selección de Xiunan? ¡Indignante! Ser consorte masculino es un arte delicado; la clave está en sujetar bien los muslos.