Masquerade Ball

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Empezaba otro día en aquel infierno, Lucifer tenía dudas si salir o no de su habitación, no deseaba ver a la radio andante pero quería apoyar a su hija con su presencia. Estaba tan indeciso y como si no fuera poco, su físico estaba muy mal cuidado, sus ojeras eran muy grandes y su piel parecía más blanca de lo habitual, su cabello completamente desaliñado y difícil de peinar; no había dormido en tanto tiempo y era por MUCHAS razones y todas daban a Alastor y su repugnante sonrisa.

Hablaba con su patito de peluche de nombre "Señor Plumas", era el único en el que confiaba con totalidad, era su psicologólo, a pesar de no hablar. Ya no sabía ni que hacer, su mujer lo dejo y una de las razones era porque él y su mujer se dieron un tiempo, fue porque él no aceptaba los sueños de su niña, no tenía esas intensiones pero aquellos recuerdos cuando fue exiliado del cielo lo hacían tener esas reacciones; otra razón fue mucho más personal pero eso ya se había hablado. Su hija, quien ahora no le daba atención por el de astas, a quien le dijo que era una tontería poder redimir pecadores, aquella que de niña lo escuchaba; aquel pecador, su dolor de culo, el ser más despreciable que pudo haber conocido.

- ¿Que dices? ¡No! Yo no quiero estar cerca del Botones, prefiero ser atravesado por una espada celestial que estar con ese mal nacido - dijo con un gran desagrado - no... Charlie quiere pasar más tiempo con el, y no trataré de ser amable con ese cervatillo que no sabe medir sus palabras

Se movía de un lado a otro de la cama, no encontraba una pose cómoda.

- el debería pedirme disculpas, me faltó el respeto y eso no lo soporto - veía al pequeño peluche - no me vea así, el fue quien empezó con todo esto

"¿Quien empezó con que?"

El rey lanzó un chillido, ¿Como había entrado el radio fónico a su cuarto?

- ¿Que mierda? ¡¿Que haces aquí y como entraste?! Largo de mi cuarto ¡Ahora!

- disculpe mis malos modales, debí tocar antes - río, sabía que al más bajo no le hizo gracia - estoy aquí porque Charlie se preocupa por usted, no ah salido  de su habitación desde ¿Cuanto? Hm... ¿Tres semanas? Huh

- dile que estoy bien, de lo más genial, super y vete, no te quiero ver - se envolvió en su sabana con decoración de manzanas -

-  ella quiere que SALGA de su cuarto y este con ella, apoyándola - se sentó a la orilla de la cama - tal vez se siente sola y quiere a su padre a su lado, seguramente se siente decepcionada de que su papá no está cumpliendo su promesa de ayudarla con su hotel, que, aunque sea una mala broma, esté allí

- ¿Te hace feliz el verme sufrir? - respondió, trato de que su voz quebrada no se escuchará -

- hm... Puede ser - dijo bromista - es tan satisfactorio el ver el sufrimiento de otros es una exquisitez de cada mañana

- pues ve a romperle el culo a alguien más y déjame tranquilo

- owww ¿Y que hay de Charlie? Sería muy cruel de mi parte en ir con ella y burlarme en su cara ¿No lo cree?

- ¡¡Con mi manzanita no te metas hijo de perra!! Porque si te metes con ella, me la metes a mi, puto

Alastor se quedó en silencio, no sabía si reírse o explicarle a Lu que lo que dijo era... Asqueroso, al menos para el venado.

- lo dejo hundiéndose en su depresión, es lo mejor que puede hacer - dijo para después irse tal y como llegó -

- ¿El quien se cree que es? Solo es un pecador y ya ¿Verdad Señor Plumas?

El peor padre del InfiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora