《♡♧■◇♤》MINI NOVELAS-POEMAS-ESCENARIOS《◇♤■♧♡》

MINI ESCENARIO-POÉTICO Y ¿TRÁGICO? [♧Relacionado con Sukuna Ryomen/era Heian♧]

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Oscuridad y soledad.
Ése bosque parecía cómo una pesadilla, no había animales a la vista, o incluso no se veía algún insecto en los troncos de los árboles o en el césped, no había alma ninguna a los alrededores de aquella muchacha qué se adentró a ese aterrador bosque maldito.

La joven era una belleza surrealista, ojos cómo el néctar de la miel, cabello suave y bello cómo la nieve, piel delicada cómo una muñeca y lo qué más destacaba de ésa belleza de mujer, eran sus alas puras y blancas cómo nubes en el brillante cielo.

La bella, santa ángel había ido a ése bosque tenebroso y maldito a ver con sus propios ojos, lo qué estába sucediendo en ése bosque. Por orden de su señor y todo poderoso, Dios. Para descubrir la causa de qué ése bosque qué tenía vida y felicidad, se había vuelto en desierto y olor a muerte por doquier. Los grandes árboles de los alrededores se murmuraban entre ellos por medió de las ligeras corrientes qué pasaban por ése lugar, susurrando de lo qué había ocurrido en los más profundo de aquél bosque.

La bella mujer, se adentró al bosque. Sintiendo y oliendo, las sensaciones e olores que las corrientes de viento le traían a ella en cada pasó qué daba y se adentraba más profundamente al bosque. Sin saber qué la vigilaban de cerca. La ingenua ángel llegó a un río de agua clara y vegetación a los alrededores con los árboles qué forman el bosque, sin ver a algún animal a los alrededores, o algún Ser vivo cerca de la zona en la qué está la ángel. Un olor a confusión y sensación de podrido llegaron a los sentidos de la mujer alada. Se acercó al borde del río, y se arrodilló sobre sus rodillas, tocando y sintiendo el agua en la palma de su mano, se sentia helada cómo un bloque de hielo, aunque da una sensación de relajación al sumergir su mano en el agua qué corre por el río hacía el suroeste, hasta dónde la vista no puede seguir. El sol iluminaba el área para la santa mujer y también daba un aire de calidez sobre la ropa fina y antigua de la ángel. Pero quedaba poco tiempo para qué el sol se sumergirá entré las lejanas montañas y se ocultará de la vista de todo Ser vivo.

Mientras pasaban los segundos, un Ser malévolo, observaba en la oscuridad a la bella ángel. Admirando la vista de la espalda de aquella santa dama, sus hermosas alas blancas y frágiles en la espalda de ésa ángel, qué podrían arrancarse en cualquier momento de lo frágiles e delicadas qué eran. El cabello limpió y brillante, de un color tan puro qué podría ensuciarse con facilidad. La ropa sin manchas y fina qué mostraba las curvas de ésa hermosa mujer, pero sin mostrar mucha piel al aire. El hombre malévolo, admiraba todo de ésa santa ángel cómo si fuera una preciosa gema recién descubierta.

Aquél hombre malvado qué observaba a la ángel ingenua e inocente, no era un Ser vivo cualquiera. Era el Ser más cruel, malvado y poderoso qué podría existir en la tierra. El cuál se había apoderado de un reinó y terreno dónde poblaban seres humanos normales qué reclamó cómo suyo. Ése Ser, no era nada más, ni menos que el gran "Ryomen Sukuna" o también el tan llamado y temido "Rey de las maldiciones".

Ésa Maldición poderosa a muchos seres humanos qué podría destruir una gran población de seres débiles en un sólo segundo. Estába empezando a tomar interés en aquella bella dama angelical, y pronto comenzó a planear algo tenebroso y cruel.

—¿Por qué no llevármela a mi dominio?—ésa fue la pregunta qué se preguntó a él mismo. Tomando una decisión, casi al instante. Después de todo era un Ser muy poderoso con el que ningún débil se quería meter con él. Él puede hacer lo que quiera, y nadie se pondrá en su contra por miedo a morir en manos de la maldición malvada.

Su apariencia era inusual, aterradora y asquerosa para muchos, teniendo 4 brazos, dos caras, una boca grande en su abdomen e una boca en una de sus palmas, y también teniendo tatuajes oscuros por todo su cuerpo, incluyendo su cara. Salió de la oscuridad del bosque de manera lenta y depredadora, haciendo evidente su presencia y aura detrás de la bella ángel.

La mujer santa se paralizó en la posición en la qué quedó al borde del río, el aura del hombre erá oscura y aterradora qué llenaba de miedo en lo más profundo a todo Ser vivo qué estuviera cerca de él. La ángel nunca había sentido tal aura poderosa y mortal en todo lo qué a vivido su vida de sirvienta en los cielos de los ángeles para su señor todo poderoso, Dios. Su mirada erá de miedo puro y no se atrevía a mirar sobre su hombro a ver de dónde provenía aquella presencia o de quién provenía.

—Qué tan bella ángel a bajado desde las nubes, hasta estás tierras muertas... me preguntó porqué estás aquí, hermosa dama... aunque me da lo mismo, porque te llevaré a mi reinó, te guste o no... dulce ángel...—pronunció aquellas palabras, ése hombre, llamado "Ryomen Sukuna" con un tono grave y firmé, su voz da escalofríos por todo el cuerpo de cualquiera que lo escuché y hace sentir débil a todo Ser vivo cerca de su presencia. Las intenciones de la maldición eran malvadas y crueles qué la bella dama angelical, temía por su vida qué podría tomar un giró inesperado y su vida de sirvienta angelical de los cielos habría terminado, y dando inició a su nueva vida de prisionera por una maldición cruel y maligna.

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¿Parte 2, o no?

—Hecho por:Pauli, una joven loca y creativa que quiere lucir las novelas, poemas y historias que escribe a la gente, pero le da vergüenza. :']

—4/03/2024.

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