Capitulo 13

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-¿Qué está haciendo?- pregunto mi hermana Ari con lágrimas en sus ojos
—Se está alejando, lo están distrayendo— respondí con voz baja
—¿Qué haces, por qué no le ayudas?—dijo Ari gritandome y llorando
Arranque el carro y maneje no pensaba para donde, solo tenia que alejarnos a mi y a mi hermana muy lejos
—Tenemos que ayudarlo ¡Deten el auto!— grito Ari y comenzó a hacer berrinches, lo cual comenzó a desesperarme horriblemente, no me gustaba para nada cuando tenía esos comportamientos infantiles
—¡Basta Ari!, no podemos ayudarlo, no ahora, lo que necesitamos ahora es conseguir un lugar donde dormir por el momento, no podemos interferir por el momento porque es la policía, no todo es como tus absurdas películas de Disney, no te se arregla cantando y bailando, este es el maldito mundo real y tu causaste esto mencionaste su nombre, corriste a sus brazos como una damisela en peligro, tratas a Milo como si fuera tu novio o un príncipe de cuento de hadas, ¿pero te digo algo? el nunca será tu novio porque es mucho más grande que tu y nunca te correspondera—dije explotando y sacando todo lo que tenia en mi mente y
Maneje hasta un motel, Ari no me dirigio la palabra en todo el camino, ni siquiera me miraba, entramos a una habitación que alquile, ella se sentó en una de las camas dándome la espalda, reflexione un poco las palabras que dije en un momento, Ari era todo para mi yo debía cuidarla y protegerla, había visto que no sufriera ningún daño físico pero yo le cause un daño emocional horrible y tenia que arreglarlo.
—¿Quieres algo de cenar— pregunte
—Me dejas en paz ________— respondío Ari aún llorando
Guarde un poco de silencio e hice lo que tenía que hacer, era hora de que Ari supiera la verdad, mi comportamiento nos había alejado.
—Someday this could be ordinary, somday could be something extraordinary— cante con voz suave
Ari seguía sin voltearse.
—You and me side by side, we gonna be someday— volví a cantar
Ari dio la vuelta y comenzó a limpiarse sus lagrimas
—Te faltaron dos versos— fue su respuesta, una pequeña risa se me salio
—Ari lamento mucho como te grite es solo que hay mucho que no sabes, que tu vieras Zombies en la televisión y mencionabas a Milo dolía mucho, ya  no eres una pequeña niña estas creciendo rápido, ....—
—Pero solo es una película y Milo es tu amigo me interumpio—
—Ese fue el problema, cuando tu eras muy pequeña, Milo y yo seguíamos siendo amigos, me daba cuenta que comencé a sentir cariño por Milo y uno muy fuerte—
—¿Qué clase de cariño?—pregunto Ari
—Uno especial, como el que se tienen mamá y papá, es un cariño que solo los adultos y los niños grandes experimentan, es un cariño que tu vas a experimentar cuando seas grande y es un cariño que alguien muy especial va a sentir contigo Ari—
—¡Fuchi!—
—Ari eres una niña hermosa, con un corazón increíble que Milo vio y que cualquier niño de tu edad va a nota y lo vas a experimentar, lamento mucho como me he comportado es solo que cuando Milo se fue mi corazón se rompió y afecto a todos—
—¿Qué pasó?— pregunto Ari
—Hubo una noche, yo tenia un examen de matemáticas....—
—¿Sumas y restas?—
—Algo así.....era álgebra, estudiaba con Milo en el jardín de su casa, ya era muy tarde cuando esto pasó...—
Comencé a contarle lo que pasó, como Milo me apoyaba con los ejercicios,  como tocaba su mano por accidente y mi corazón se aceleraba y como no quería dejar de abrazarlo, omití la parte de como los labios de Milo, lucían extremadamente dulces y tentadores.
—Ese día me di cuenta que quería mucho a Milo y por eso me dolía mucho cuando solo dejó una nota y se fue sin despedirse, tu veías mucho a Milo en la televisión, decías cuanto lo querías y lo grandioso que el era y yo solo veía al muchacho que me lastimo, no a la gran persona que era y ahora está arrestado en quien sabe donde y no tengo idea de como salvarlo—
Me tape la cara con las manos, las lágrimas comenzaron a salir, me sentía fenomenal todo el peso de mi asunto con Milo había salido de mi, además de que por fin lo había logrado perdonar, sabia que el solo había seguido sus sueños, quería evitar el dolor de despedirse aunque no lo hizo de la mejor manera y ahora se que nunca me lastimaria, nos cuida y protege a mi y a mi hermana.
Pero lo más importante es que me he dado cuenta que mis sentimientos por Milo, no son de amigos, lo quería, quería salir con el, escucharlo reir, ver esa sonrisa, admirar sus hermosos ojos y probar esos labios que muchas veces el universo me los negó.
Pero también se sentía muy triste, Milo sabía que hacer ante cualquier situación, sabia como cuidarnos a los tres y yo con el primer problema que aparecía, solo sabía deprimirme y esconderme en un motel, el esta en problemas y no se como ayudarlo, no se si ya habrá comido, si tendrá frío o cuantas preguntas lo habrán hecho contestar.
—¿Qué piensas?— pregunto Ariadna
—Nada pequeña es solo que..........me preocupo mucho.........no se como hacer que Milo salga libre sin levantar sospechas—dije con un hilo de voz y secandome las lágrimas
Ari me abrazó con sus pequeños brazos, nos quedamos así por un momento, luego mire mi reloj, eran las 10:45 pm, no habíamos cenado nada.
—Ari voy por algo de cenar, no le abras a nadie—
Ella solo dijo si con su cabeza.
Salí de nuestra habitación y camine hasta la esquina del pasillo del motel, vi una maquina de dulces, inserte una moneda y saque una bolsa de donas para Ari, en el auto teníamos comida pero se encontraba más lejos y no quería dejar sola a Ari tanto tiempo, regresaba pero antes de abrir la puerta y darle a Ari su cena llego a mi mente una idea....

Magia, dobles y más (Milo Manheim y tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora