Magia, dobles y más (Milo Manheim y tu)

Capítulo 2

Me dormí llorando, se notaba mi mirada de tristeza, deje el cómic junto a mi ventana esperando que se saliera por ella, lo que no sabía era que algo si iba a salir del cómic.
Adentró del cómic me encontraba, esquivando golpes, trataba de atraparlo pero la verdad me era imposible, mal herido, triste y sin fuerza me era imposible, parecía que por el bien de todos yo viviría en el.
-Es inútil Zed, tu perderás y yo conquistarte mundos-dijo con una sonrisa en la cara y su puño alzado
-Mi nombre no es "Zed", es Milo y si yo fallo, tu también porque ambos nos quedaremos viviendo en este comic para siempre-dije con mi último aliento
Esperaba sentir su golpe final pero algo llamó nuestra atención comenzamos a notar que algunos objetos comenzaron a caerse, mis manos sintieron como el piso parecía moverse, detrás de mi doble que no dejaba de amenazarme con su puño pude notar una especie de rayo blanco que formaba un círculo, los conocía perfectamente esos rayos blancos formaban portales para el mundo real, tenía que llegar a el y atravesarlo.
Con mis brazos empuje a mi doble y me libere de el, comencé a correr así el portal, pero el supo cual era mi intención, corría lo más rápido posible pero la pelea de hace un momento me dejó sin fuerzas.
-¡No te vas a ir Zed!-grito desde el fondo
Intentaba ignorarlo pero me fue imposible, solo escuche el sonido del aire cuando un objeto es lanzado, intentaba esquivarlo pero fue muy tarde, un pequeño cuchillo rozó mi pierna causandome una pequeña herida en mi pierna derecha y logrando el objetivo de mi doble detenerme.
-¡Ahhhhh!-grite de dolor
-Yo siempre gano Zed-dijo mi doble
No me podía quedar aquí, prefería morir antes de eso.
-Esta vez no-dije
Ignore el dolor y ambos atravesamos el portal, trataba de noquearlo para ponerlo quieto, pero me era imposible, salimos del portal y ambos nos quedamos quietos, ya que el viaje con magia debilitaba el cuerpo, me concentraba mucho en no dejar salir a mi doble irse, por lo que no me fije donde estaba o si había alguien conmigo, intentaba que se quedara quieto pero cuando su fuerza volvió me empujó y caí sobre una cama, mi cabeza callo sobre las rodillas de alguien pero no lo note, peleabamos a puños intentando noquear al otro,visualise la habitación rápidamente haber si podía encontrar algo para amarrar a mi doble, junto a el estaba una bufanda rosa con brillos dorados, con mis dedos comencé a sentirla, me causaba algo, luego mire las paredes de la habitación eran moradas con unas mariposas blancas de decoración, este ambiente me hacía sentir en familia, luego mire tras la puerta y mi corazón se paro.
-¿_________?-pensé
Mire con más detalle la habitación, comencé a confirmar que ya había estado aquí, era la habitación de ________, mi mejor amiga de toda la vida, volteo para atrás y ahí estaba ella, sus manos temblaban y sus ojos estaban bien abiertos indicando pánico, mis impulsos de querer abrazarla a más no poder hicieron que ignorarse lo que hacía, mi doble logro safarse del amarre que había hecho, creí que este era mi fin pero coji lo primero que encontré y le pegue haciendo que cayera, regrese mi vista a ella,cubría sus ojos con sus manitas temblorosas.
-________, soy yo Milo....
Toque con mis manos delicadamente las suyas, intentaba ver sus ojos, quería consolarla y volver a ver esos hermosos y hechizantes ojos avellana,quito con cuidado sus manos de manera lenta, yo quede ignotizado mi corazón comenzaba a latir, había esperado por mucho tiempo volver a verla, aunque cuando eso pasara no esperaba que me viera con mi maquillaje y ropa de zombie.
-¡Cuidado! - grito _________
Solo sentí un gran golpe en mi cabeza y caí incociente; los rayos del sol se comenzaron a salir, sentía comodidad pensaba estar en mi cama así que solo disfrute e ignoraba todo lo que estaba a mi alrededor como sentir unos brazos que me abrazaban o una mano que buscaba la mía para entrelazarse, me sentía en paz por algún extraño motivo no me quería mover.
El tiempo siguió pasando hasta dar las 9:00 am, me levante lentamente mi cabeza dolía mucho, con mi mano izquierda me toque mi cabeza, recordé lo que había pasado como estaba frente a dos Milo disfrazados de zombies, pensé que había sido una horrible pesadilla ya que claramente eso no pudo haber pasado, no es posible que Milo y su club de zombies aparecieran hasta en mis sueños ;escuchaba muchos ruidos afuera, quería ver de que se trataba, camine despacio pero algo me lo impidió mi mano estaba agarrando algo, comencé a jadear, movía mi mano con movimientos bruscos tratando de safarla pero solo escuché algo que me aterro más.
-Quedate más tiempo....
Eso me hizo querer safar más mi mano y así lo hice no me importaba si lastimaba o no a lo que sea estaba junto a mi, mire algo que me causo curiosidad y era cabello verde, con mi mano libre tome los pocos mechones que estaban visibles y los jale,soltó mi mano y callo de la cama.
-¡Ahhhhh! grito
Era alguien senti mucho miedo, pudo haber sido cualquier cosa, un loco, un degenerado o un violador por lo que agarré lo primero que encontré para defender y esto fue un almohada, el loco se digno a mostrar su cara, lucia como Milo o era Milo.
-¡Ahhhhhh!-grite y comencé a pegarle con mi almohada
-_________, ________, _________, basta- dijo el
Sentía más pánico, Milo debía estar lejos de aquí, por lo que pensé que me volvía loca, por lo que seguía golpeandolo con más fuerza.
-Tranquila, yo puedo explicarlo-dije
Pero no me escucho seguía golpeandome por lo que debía calmarla, me levante y me lance sobre ella, caímos al suelo, yo estaba encima de ella con mi mano tape su boca para que estuviera más tranquila.
-Te lo explicaré pero necesito que te calmes ¿si ?-dije con mi voz baja
Ella solo me miro con mucho miedo
-¿_________? hija puedo pasar...
Era la voz de su padre, los dos nos miramos, la solté para que se levantará y le respondiera a su padre.
-Por favor.....
Volví a suplicar para que no me dijera nada.
-Hija..