Frente a los demás

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Cuando Muichiro recibió la noticia que la serie en la que había participado iba a tener una presentación mundial en formato de película se emocionó demasiado.

Hace unos años Ciudad Kimetsu había decidido sacar una película basada en la novela que Zenitsu Agatsuma, un amigo de Tanjiro, había escrito en secundaria. La historia trataba de una peligrosa aventura en que un grupo de jóvenes debían pelear contra unos demonios que querían dominar al mundo y en esa travesía aprendían de amistad, hermandad y a nunca rendirse. O en eso se convirtió luego de que el texto pasara por múltiples correcciones de estilo, y se cambiaran varias secciones por problemas argumentales, así como se retiraran la infinidades de escenas románticas que lo envolvían a él y una jovencita que hacía clara referencia a Nezuko Kamado.

Pero con el guión saneado se hizo un masivo casting dentro de las personas de la ciudad, pues todos querían participar, así fuera de un personaje secundario. Sin embargo, su caso fue especial, pues fue el mismo autor quien le dijo al mayor de los Tokito que había escrito el papel de un pilar pensando en él y su frialdad, todos en su familia se emocionaron. Pero Yuichiro, el convocado, en lugar de sentirse halagado dijo que era toda una ofensa interpretarlo como un parco sin emociones. Aunque Muichiro estaba seguro que solo lo había dicho para ocultar que sus aptitudes para actuar eran nulas. Mas cuando estaban por cambiar el guion, nuevamente, Muichiro se ofreció de voluntario para el papel, algo que nadie esperó, pero a lo que nadie tampoco se opuso.

En poco tiempo la serie empezó a ganar mucha popularidad, tanta que Agatsuma siguió escribiendo secuelas y los personajes crecieron poco a poco. Pero ni en sus sueños habrían pensado que la fama llegaría al punto de que la llevaran al cine. Así que cuando Muichiro recibió la noticia se alegró muchísimo, sobretodo porque en esta última temporada le habían dado algunas escenas a su querido y tímido hermano y también a su Kotetsu. Seguro sería divertidísimo viajar con sus amigos, conocer nuevos lugares y a los fans alrededor del mundo. Todo lucía de lo mejor, hasta que se dio cuenta de un pequeño detalle.

La invitación al estreno, que se daría en Ciudad Kimetsu, venía junto con una bolsa de regalo que en su interior guardaba un par de cajas: un costoso traje de tres piezas: saco, chaleco y pantalón; además de camisa, corbata y zapatos. Y por supuesto la firma de Kibutsuji Muzan, el alcalde de la ciudad. Un trago amargo se atoró en su garganta y con una de sus manos apretó la tela que formaba el vuelo de su vestido.

Cabe resaltar que cuando había iniciado el cambio de su performance hacia uno más femenino, ya se encontraban en la segunda temporada de la serie, sin embargo, siempre había quedado en claro que su desarrollo personal no afectaba el desarrollo de su personaje. Pero esta invitación lo llevaba a pensar... Su participación en el estreno lo hacía como él mismo, no como el personaje ¿verdad? ¿O no era así?

Su cabeza se sentía pesada y sus pensamientos solo daban vueltas que no lo llevaban a ninguna respuesta. Tal vez su personaje mataba demonios y se enfrentaba a todo tipo de calamidades completamente solo, pero él ni siquiera podía mirar a ese papel sin sentir que su cuerpo temblaba. Por suerte, él no estaba solo.

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Cuando lo comentó con su familia sus padres le dieron su apoyo en lo absoluto, le dijeron que lo acompañarían al evento y que hablarían con el alcalde si era necesario. Yuichiro, por otro lado, se puso muy nervioso. Si es cierto que su hermano lo apoyaba, también había sido a quien más le había chocado su transición y desde su papel de hermano sobreprotector había entrado en crisis pensando en lo que las personas le pudieran decir en una gira mundial, además, de saber de la existencia de tantos fans tóxicos que no sabían diferenciar ficción de realidad. A Ciudad Kimetsu le había impactado la transición de Muichiro, pero había tanta gente amable y de buen corazón que habían sabido entender y respetar. Claro que quedaban otros como el alcalde Kibutsuji y su tío Michikatsu que jamás comprenderían y que parecían disfrutar de colocarlo en situaciones difíciles como esa. Ahora, ¿Cómo sería en los otros países que iban a visitar?

Promesa cumplidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora