7

410 21 6
                                    

Vive aquí
*ha compartido una ubicación*

no digas que te lo he pasado yo que me mata

Tranquila nai, gracias. Pásatelo bien con ruslana

Gracias keeks chao, avísame por o para cualquier cosa









Al final se iba a llevar super bien con naiara y todo.
Cogió las llaves de su casa, su cartera, galletas y chocolates para violeta, y lo metió todo en una bolsa. Al parecer la casa de violeta estaba bastante cerca. A cinco minutos. No sé lo esperaba.
Llego incluso en menos de cinco minutos. Llamo a la puerta. Espero unos segundo y abrió una violeta vestida con una camiseta del granada, y unas gafas. Ella iba a cerrar la puerta. Pero chiara no le dejó.
—No, no, no. Tú y yo vamos a hablar.
—No quiero hablar contigo, chiara.
—Pero no entiendo por qué te has enfadado conmigo, no te he hecho nada, violeta.
—Vete a la mierda, y sobre todo déjame en paz. Vete con lina.
—No me voy a ir con lina, quiero estar aquí contigo para hacer el trabajo, y para que me digas por qué cojones te has enfadado conmigo. Déjame pasar, por favor.
—Vete con lina.
—Estas pensando en algo que no es, confía en mí. Déjame pasar por favor.
—¿Qué quieres que piense chiara? te estabas besándote con ella. Y yo esperándote como una gilipollas, manda huevos.
—Por favor. Déjame pasar y te explico todo, y nos ponemos a hacer el trabajo. Cuanto antes entre, antes me voy. Confía en mí por una vez, por dios.

Violeta veía súplica ante sus ojos. Y le dejó pasar.
Y sintió unos brazos rodearles. Y se tensó.

—Eres una cabezota.
—Encima que te dejo pasar... como me lo pagas.
—Te lo pagaría de otra forma, pero mejor que te pague así tu novio.
—Chiara, el sarcasmo te lo metes por el culo.
¿el sarcasmo estaba aquí con nosotras acaso?—Pensó chiara.
—Vamos a hacer el trabajo, y te vas con lina.
—Vio, que no me quiero ir con lina.
—Eso no pensabas hace unas horas.
—Espera... tú no estarás... ¿celosa?—Alzo las cejas.
—¿Y-yo? ¿ce- celosa? ¿de esa? JA.
—Si, tu... celosa de lina. Creo deducir que estás así después de que nos vieras besándonos, te fueras así y no contestaras mis putos mensajes. Que he tenido que hacer de fbi para encontrar donde vives para hablar contigo, por qué si tengo que esperar hasta mañana que te dignes a mirarme a la cara... Estás celosaaaa.
—Y-yo no...
—T- tu siii, celosillaaaaa. Normal, soy irresistible.
—No estoy celosa chiara. Ademas, me importa una mierda con quién te líes, es que me importa una mierda.—Mentira.—No hace falta que me expliques nada, solo hacemos el trabajo para compartir el mínimo tiempo posible contigo, y te vas por donde has venido.
—Yo quiero darte explicaciones. Así que escúchame por favor.—La pelirroja accedió.—Ella me dijo que yo le gustaba.—Los ojos de la pelirroja ya estaban vidriosos. Kiki lo notó. Y se acercó más a violeta, rozando así sus rodillas.—Y...—Una lágrima cayó del ojo de la pelirroja. Se la secó de inmediato.
—Chiara, si me vas a terminar diciendo que estás de novia con esa, no me lo digas.
—Violeta, no soy su novia. No me gusta.—La pelirroja de destensó.—Me gusta otra persona.—Se volvió a tensar.
—¿Y quién te gusta si se puede saber?
—Eso no te lo voy a decir. Pero es una chica muy guapa, y muy cabezota, pero así me gusta.
Violeta sintió una punzada en su pecho. Le estaba afectando mucho.
—Te he traído algo.—Violeta salió de su trance—¿Te gusta el chocolate?
—Si.
—Perfecto. Para ti hódar.—Le sacó de la bolsa unos paquetes de oreos, una tableta jungle, huevos kinder, y una tableta kit kat.
—¿Y esto? Jesu' kiki. No, no, no.
—Si, si, si, para que me perdones.
Violeta sonrió enternecida. No podía creer como chiara podía ser tan buena con ella a pesar de todo lo malo que le había hecho y dicho. No lo entendía. Sabía que se estaba pillando de una persona correcta. La cabeza de violeta ya pensaba que se estaba enamorando de chiara. Pero no podía. Tenía novio.
Puedes dejarle.—Pensó.—Esta loco. 
—Chiara.
—Dime.
—¿Te puedo dar un abrazo?
La inglesa no contestó y se abalanzó a abrazarla por la cintura, y violeta pasó su brazos por el cuello de la guiri. Disfrutando así su contacto. Era adictivo. Olía super bien.
—Perdóname chiara.
—¿Por qué?
—Por tratarte como una mierda. Perdóname de verdad. Te juro que lo volveré a tratarte mal. ¿De acuerdo? No te lo mereces.
—No pasa nada vio. Tu también perdóname.
—Eso sí que no lo entiendo ¿yo a ti de qué te tengo que perdonar? si no me has hecho nada kiki de verdad.
—Claro que sí, te quiero pedir perdón por insultarte tanto y aveces yo también pasarme. Además, también por el beso de lina, te lo juro que no quiero nada con ella.
—No pasa nada.
—¿Amigas?
—Mmm, vale.—No quiero ser su amiga.
No quiero ser su amiga—pensó chiara.
Ambas se quedaron muy juntas. Hasta que violeta posó su vista en los labios de chiara. Eso significa que iba a besarla. Chiara también sabía lo que iba a pasar.
—¿Estás segura?—preguntó sin pelos en la lengua una chiara muerta de ganas para besarla.
—Si.
—Te pregunto por qué si empezamos no voy a poder parar. Y tú sabes muy bien a lo que me refiero.
La pelirroja no lo contestó. Pero lo que hizo fue acortar las distancias que les separaba de chiara. Se moría por besarla.
Chiara puso sus manos en la cintura de violeta, y violeta, las manos en la nuca de la otra, no iba a permitir que se separara. La excitación del momento, hizo que violeta se sentara a horcajadas en el regazo de chiara. No rompiendo el conflicto de lenguas que habían empezado hace unos momentos.
—Kiki... por dios... no sé cómo he estado tanto tiempo sin besarte.
—No hace mucho desde que te bese.
—No tocarte me mata. —La pelirroja cogió las manos de chiara y se las puso otra vez en los bolsillos de su pantalón trasero. Y chiara apretó en aquella zona. Y ella respondió con un leve gemido.
Chiara puso la rodilla en el centro de la pelirroja. Y ella respondió con un gemido más sonoro. Movía sus caderas buscando un poco más de roce. Necesitaba a chiara. La necesitaba ya.
—Kiki...
—Dime vivi...
—Tócame por dios. Te necesito...
—¿Estás segura?
—Bueno... nunca lo he hecho con una chica...
—No pasa nada vio... si no quieres no pasa nada, no quiero incomodarte ni mucho menos.
—Kiki... quiero hacerlo. Por favor. No puedo aguantar más, quiero que me folles, por favor.
Y la guiri obedeció.
—Kiki... a la habitación.
—Pues me vas a tener que llevar tu, por qué no conozco tu casa.
La pelirroja cogió su mano y la llevó ahí con una gran sonrisa en la cara.
Ya ahí dentro, violeta intentó poner el seguro en la puerta, para que NADIE, de su familia entrará. Pero estaba roto... Pero eso no iba a parar las intenciones que ambas tenían.
La andaluza tiró a la inglesa a la cama, comenzando así otra guerra de besos y lenguas que calentaban más los centros de ambas chicas.
Violeta necesitaba a chiara.
Y chiara necesitaba complacer a la granaína.
Violeta le quitó la sudadera de la estrella que llevaba chiara acompañado de un "esta sudadera me la quedo yo" y una risa en forma de contestación de kiki.
Chiara estaba a favor de la igualdades de condiciones, quitando así la camiseta del granada que llevaba la pelirroja puesta en esos momentos, tirándola al suelo.
La guiri bajaba sus besos al cuello de la pelirroja, segundos después al abdomen de esta... y así pidiendo permiso a la andaluza para bajar su pantalón y su ropa interior, para así no incomodar a la otra, ya que es su primera vez con una chica. Este gesto enterneció a la pelirroja, la guiri era super cuidadosa.
Ella accedió y chiara lo bajo en cuestión de cerrar y abrir los ojos.
Chiara admiró la zona. La cogió de la cadera y empezó a dejar besos por aquella zona, y poco a poco, dejando besos húmedos hasta llegar al centro de violeta. Empezó dejando unos besos húmedos en los pliegues, y poco después, metió el primer dedo. Violeta contestó con unos gemidos demasiados sonoros, y acompañando el nombre de chiara cada uno de ellos.
Chiara metió otro dedo, provocando así que violeta arqueara la espalda, y que empiece a mover las caderas en busca de mas roce.
Los movimientos de chiara se volvían más rápidos, quería darle ese orgasmo a violeta.
Chiara pareció escuchar el sonido de una puerta cerrarse—Vio, que te lo digo yo a ti, que he escuchado una puerta cerrarse—le comentó a la pelirroja, ya que podía ser sus padres o su hermana.
—No será nada keeks, mis padres llegaban mas tarde, y mi hermana igual.
Se escuchaban pasos acercarse.
—¡VIOLETAAAA! ya estamos en casa... ¿dónde estás niña?
—¡Fuck, shit, mierda! te lo he dicho joder.
—Mierda, mierda VÍSTETE.
—Que no encuentro la sudadera, donde la has puesto... god...
Aquí está, corre.
Violeta cogió la camiseta sin acordarse del pantalón y del tanga que había quedado en el suelo, pero como tenía una manta, se la puso corriendo, a pesar de la calor que hace.
—Aquí estás eh... Uy ¿Hola?











—————————————
hola mis lesbianas
ya me estabais reclamando, y hoy estoy en mi prime, he actualizado en ambos fics, me merezco un monumento, lo sé.
espero qe os mole
mi mejor amigo se ha creado una cuenta de fans de martin y álex márquez, y agradecería si os pasáis por la cuenta y le dejáis un follow o like al post.
la cuenta de ig se llama así: martalex.ot
os quiero muchoooo
un besot💖💖

¿pero no se odiaban?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora