27. Blind

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JM

– Así que, te tiene totalmente identificado. –me dijo con sus piernas apoyadas sobre la mesa.

– ¿Por qué mierda estás tan tranquila? –pregunté frunciendo el ceño.

– Porque dije que te tenía identificado, no que tenía cómo incriminarte. Nadie puede hacerlo ¿Verdad?

– No. –negué. – ¿Y qué planeas?

– Nada. Desviar su atención. –explicó encogiéndose de hombros. – Sólo sabe que eres hijo de Howon, que fuiste líder de una banda que grafiteaba por diversión y que siempre eran sorprendidos con armas blancas. Eso y que hora estás sospechosamente fuera del mapa junto con tu banda de matones.

– ¿Crees que quiera incriminarme?

– Yo creo que quiere averiguar quién mierda mató a su padre. –explicó. – ¿Me dijiste que los habían vendado en cuanto llegaron verdad?

– Sí, pero estoy seguro que reconoció la voz de mi padre.

– Sí y ya sabe que lo mataste, otro crimen del cual tampoco tiene pruebas.

Asentí sin relajarme demasiado, era preocupante, no iba a negarlo.

– Todo solucionado, al menos contigo, pero creo que sabe algo más de los chicos de Han, ya sabe que los tipos que mataste eran de su banda.

– ¿Te cuenta todo esto?

– ¡Obviamente no! Reviso sus notas constantemente. La próxima semana tenemos una cita, así que voy avanzando.

– Que puto dolor de cabeza. –gemí. – Me dejaron encargado al menor, no al mayor. –bufé. – Bueno, cuidar a su hermano es cuidarlo a él.

– ¿Qué harás si va al club eventualmente? –comentó.

– Eso sería tonto de su parte y espero que lo averigües antes de que suceda, porque Jungkook no puede estar aquí, ni tú tampoco. 

– Sólo espántalo si aparece por aquí, sabe que el club es un lugar donde frecuentan matones.

Y como si hubiéramos adivinado sus pensamientos, una semana más tarde fui advertido de que el hermano mayor de Jungkook aparecería por aquí.   

Teníamos sólo un problema, no era precisamente Jungkook. Era la mejor amiga de él, frecuentaba muchísimo el club ya que le quedaba menos de un mes para irse del país.

Si lo pensaba ligeramente no era un problema que Junghyun viera a la mejor amiga de su hermano en un club, probablemente se preocuparía por el terrible antro en el que estaba. El problema real sería cuando ella le contara a Jungkook sobre el extraño encuentro con su hermano.

En ese escenario la primera pregunta de Jungkook sería ¿Qué hacía mi hermano en el club? Y de a poco, una pregunta llevaría a la otra y terminaría por cuestionarse ¿Qué tenía que ver yo en ese crimen?

Era simplemente un desastre.

Así que apenas Junghyun entró en el club, Yoongi olvidó su labor como guardia y se concentró en distraer a Younghee.

Cuando lo vi a los ojos me preocupé de que realmente supiera más de lo que Ayaka me comentaba.

Los chicos rodearon a Junghyun en cuanto se acercó a mí. Yo lo esperé sentado con algunos conocidos en el sector VIP del club, ese pequeño lugar que contaba con algunos sofás y mesas para compartir. 

– ¿Jimin? –habló. Su voz era bastante más ronca que la de su hermano.

Lo miré unos segundos, fingiendo no saber quién era.

The Revenge | JikookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora