Prólogo.

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Un chico estaba delante de otros dos, el azabache parecía un chico normal a primera vista, mientras que los otros dos, parecían pandilleros que le querían robar.
El chico parecía asustado, el que había hecho para merecer esto, el solo quería leer su manga favorito y no hacer nada más por la semana.
Le pedía a Dios que lo salvase, aún que nunca lo ha hecho; el día que nació, murieron sus dos padres, y tuvo que criarse en un orfanato.

No sabía realmente que más hacer, siempre había Sido un niño llorón, que no podía salvarse a haci mismo, y se imaginaba salvando a otros, que gracioso.
Pero por primera vez Dios escucho sus plegarias, fue teletransportado a otro mundo.

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Al momento de aparecer no entendía nada, ¿Que paso?, ¿donde estoy?, ¿Dónde están los pandilleros?, y otras Miles de preguntas se hacia.
Veía a muchas criaturas raras alrededor suyo.
Esto tal vez sea su sueño, de volverse un prota de isekai, solo tal vez; el comenzó a fantasiar sobre su sueño.

Pero oyó un grito de una chica.

-Pues creo que llegó mi momento, mi nombre es Natsuki Subaru, y voy a salvar a cualquiera que esté en peligro-.

Salió corriendo hacia donde oyó la voz, y pudo ver como una chica de pelo rubio huia de otro de pelo plateado.
El se quedó sorprendido, aún le faltaba aprender demasiado sobre este mundo, incluso si se lo preguntaba ahora mismo, no haría mucho con la poca información que tenía.

Se fue en dirección a la ladrona rubia, pero se tocaría en el camino con unos ladrones.

-Genial, huyó de unos y llegó con otros, que irónico- eran tres ladrones que ha decir verdad, parecían más débiles que los otros dos de su mundo.

-De nos todo lo que tengas, o te matademos-.

-Claro que no, pues yo tengo la bendición de Dios- el estiró su mano, pero nado sucedió.

Los tres ladrones se comenzarían a reír, mientras se acercaban peligrosamente a el; tenía mucho miedo pero sin saber muy bien peliar, solo le quedaba escapar.

Pero fue en vano, pues un cuchillo le atravesó la costilla, haci tumbandolo, y dejándolo cais muerto.

-¿Cómo, voy a morir tan rápido, no hize nada, ni tampoco pudiera hacerlo, moriré en este terrible mundo?- cerro los ojos, para después, ¿Abrirlos de nuevo?.

Al notar que estaba vivo, pero en otro lugar se emocionó, el dolor había desaparecido y tenía una nueva oportunidad.
Pero escucho de nuevo el grito de la chica, entonces se pregunto que estaba pasando.

Va y ve de nuevo lo mismo, no entendiendo nada.
Vuelve a morir, pero a la próxima vez lo entiende.

-Entonces está es mi habilidad, revivir, que basura que me toco- haría un puchero antes de salir en dirección a donde había muerto anteriores veces.

Por primera vez pudo esquivar el ataque del cuchillo, pero le lanzaron otro, y ahí murió una vez más.
Era demasiado orgulloso para pedir ayuda, entonces siguió haciendo lo mismo, revivir, aprender, morir y volver a revivir.

-Diez, veinte, treinta, cuarenta, cincuenta, sesenta, setenta, ochenta, noventa, !cien!, ciento diez-.

El chico ya están bastante traumado, nunca creyó que sufriría tanto en este mundo, su corazón estaba partido en Miles de perazos.
Pero lo logro, los mato, y haci ganó, ¿pero no tenía que buscar a la peli rubia?.
El justamente después de haber matado a los tres ladrones salió corriendo, estaba persiguiendo a la ladrona.
Pero en medio camino se topo con la chica peli plateada, que estaba descansando.

Te Acompañaré en este Doloroso CaminoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora