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- 5 de Agosto, 2009 -

Había pasado tiempo que intentaba comunicarme con Bill, y de los muchos intentos que hacía, ninguno resultaba.

Bill se volvió demasiado seco, podía sentir como el tan solo acercarme a él me hacía temblar.

Había entrado un alumno nuevo en este tiempo, me llevaba bien con el, sin embargo,  aún no era mi amigo. Su nombre era Theodore.

Aunque a veces solía ser molesto, pero sin duda me defendía cada que Lilith intentaba salirse con las suyas.

Solo quedaría un mes para salir de la preparatoria, y sin duda, me sentía muy feliz de comenzar desde cero, quería lograr todas mis metas y poder cuidar de mi hermana.

Mi relación con mi madre mejoró bastante, cada que ella podía iba a visitarnos a mi y a mi hermana, a veces nos llevaba de comer o incluso la acompañamos a sus terapias de psicología.

Ella había estado mejorando muchísimo, y me alegraba el saber que mi hermana podía confiar en ella.

Apenas llegaba a la escuela, hoy volvería a hablar con Bill, Amber había conseguido salir con una chica de otro grupo, me alegraba mucho por ella.

— ¡Hanna! — Me gritó feliz Amber, me dió un fuerte abrazo y me soltó mientras me sonreía. — ¿Qué tal tus vacaciones?

— Hola, bien, estuve estudiando para la universidad, ¿Y tú?, ¿A qué universidad piensas irte?

— No lo sé... Ya veré, por cierto, Ana me pidió que te diera esto — Me dijo mientras me entregaba un pequeño regalito en una cajita.

Me quedé confundida, abrí la caja y tenía un par de anillos muy lindos. Sonreí al verlos y le agradecí.

— Dile que me gustaron muchísimo, me alegro de que le caiga bien a tu novia. — le sonreí mientras me los ponía.

Ella asintio feliz mientras veía a un lado y suspiraba insatisfecha.

Entendí por qué lo hizo, Theo llegó corriendo hacia donde estábamos y no dudo en abrazarme y hacer que perdiera el equilibrio, a punto de caer.

Sin embargo, mi cuerpo chocó con alguien, el cuerpo de Bill.

El simplemente me miró de mala manera, me empujó y me miró de arriba a abajo.

— ¿Acaso siempre seras una torpe?, Siempre lo arruinas todo... — Murmuró mientras se alejaba, yo solamente me quedé en silencio.

— Es un idiota, y lo sabes Hanna, es triste saber que es el único que te trata así, que raro... ¿Tal vez ocurr.-? — Tapé su boca antes de que siguiera hablando.

— Solo cállate y vamos al salón, llegaremos tarde.

El solo quitó mi mano y corrió hacia el salón. No podía negar que tenía la misma energía que Bill, cada cosa que sucedía, me recordaba a el, siempre el, siempre...

Me pregunto si el piensa lo mismo...

Corrí detrás de el mientras entrabamos al salón, el profesor no había venido, por lo que teníamos una clase libre.

El se paró de la nada, haciendo que chocará con su cuerpo y cayera al piso.

El se rió de mi mientras me ayudaba a levantarme y me sacudía mis rodillas mientras me acomodaba el cabello.

— Sabes, eres muy linda, no se por que te tratan así. — Decía mientras me volvía a acomodar aún mejor mi cabello.

— Tienen sus razones... Eres nuevo en esta escuela, recuérdalo. — Dije mientras veía como Bill nos observaba a lo lejos.

Suspiré mientras relamia mis labios y entraba al salón de nuevo sentandome en mi asiento.

Al parecer Lilith no había venido hoy, y se que sería mi última oportunidad, así que lo haría ahora o nunca. Quería aclarar las cosas con el y por qué era así conmigo.

Aunque la última vez no haya sido la mejor... Se que lograría hacer que dijera todo, la última vez que hablé con el, el se enojó de que yo insistiera mucho y me dió una bofetada.

Si me enoje, pero simplemente lo deje pasar.

Me levanté de mi asiento, lista para ir a hablar con el, pero Theo me tomo de la muñeca y no me soltó.

— Quédate aquí, ¿Para que te vas?

— Theodore, suéltame — Dije mientras me forcejeaba de el y el simplemente se reía y finalmente me soltó.

Corrí fuera del salón y busque a Bill estaba en una esquina fumando algo, así que corrí hasta acercarme a él y tenerlo justamente frente a mi.

El me miró seriamente mientras inhalaba el humo de su cigarro.

— ¿Podemos hablar? — Pregunté mientras lo miraba fijamente a los ojos.

El asintió y se sentó en una banca mientras golpeaba suavemente a su lado, indicando que me sentara.

Me senté a su lado, estaba muy nerviosa, no esperaba que aceptará, por lo que no sabía que decirle. Solamente jugaba nerviosamente con mis manos y pensaba en que decir, hasta que el me ganó la palabra.

— ...Perdón por todo. — susurró mientras apagaba su cigarro y lo tiraba al suelo, rápidamente el me miró a los ojos con lágrimas.

— Bill... — Murmuré mientras el continuaba llorando.

— No quise... Jamás quise hacerte sentir así, fue ella... Ella hizo todo lo que yo no quería, pensé que me amaba, cuando la conocí mejor, ella me amenazó con hacerte daño, no quería que te pasará nada, Hanna... Perdón, perdón... — Decía entre sollozos y tomaba mis dos manos y lloraba.

No supe que decir, jamás esperé que el soltará la verdad el solito, no sabía ni siquiera como reaccionar, simplemente me quedé quieta sin saber que hacer. Sus lágrimas caían en mi camisa y podía sentir la calidez de sus manos en las mias.

Me sentí muy mal por el, al final, jamás fue su culpa, y lo suponía desde un inicio.

Lo acerque a mi para abrazarlo mientras el continuaba llorando, el acariciaba suavemente mis manos con sus pulgares mientras pedia perdon en pequeños susurros casi murmurando.

Así estuvimos un buen rato, hasta que el se levantó y me miró mientras me abrazaba por los hombros y ahora lloraba en mi cuello.

— Tranquilo... No fue tu culpa, se que pronto encontraré la forma de hacer que Lilith y Jack paguen por todo lo que les hicieron a ti y a Amber... Jamás tuve que involucrarlos a ustedes en mis problemas... Solamente no llores, siempre te perdonaré, Bill... Siempre lo haré por más que lo pidas, por qué te... Amo. — Susurré en su oído mientras sus sollozos se detenían y se levantaba de mi hombro lentamente y sorprendido.

El simplemente me miró fijamente y podía sentir como su mirada bajaba a mis labios, me sonrojé ante su acción, pero simplemente sonreí torpemente y el seguía sin decir nada

— Entonces... Tu... ¿Me amas?, ¿Te gusto? — Dijo nervioso.

Asentí lentamente mientras sonreía y lo abrazaba. El hizo lo mismo, rodeó sus brazos al rededor de mi cintura mientras susurraba en mi oído varias cosas.

— Créeme que te besaría en este instante... Pero se que Lilith podría haber mandado a alguien para que me vigilará, solamente... Te pediré porfavor que no te acerques a mi cuando ella esté, se que te ha causado muchos problemas y no quisiera que te hiciera daño... ¿Podríamos salir en secreto? — Dijo mientras me sonreía y acariciaba mi mejilla.

Asentí suavemente mientras tomaba su mano entre la mía y la soltaba después.

— Nos veremos luego, ¿Si? — dije mientras me ponía de pie.

— Vale. — El agitó su mano en forma de despedida mientras yo me iba de nuevo al salón.

𝓘 𝓵𝓸𝓼𝓽 𝔂𝓸𝓾 𓍯 ִֶָ ִ ࣪𖤐 ┋ Bill KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora