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– ¿Q–que?

– Lo que oíste

– Este está loco – pensó queriendo comenzar a correr, acción que se vió interrumpida –

De la nada, aquel "chico" extraño como lo había denominado el peli verde de repente apareció frente a él de nuevo.

– ¿C-Cómo hiciste eso?

– Haces muchas preguntas, ¿No crees?

– Digo, es lo lógico, estás loco, no sé qué trucos usas, pero no me gustan, eso no es de Dios

– No cuestionare tus creencias ni responderé a nada referente a mis "trucos" como tú dices, y ahora que lo cuestino mejor, menos responderé tus preguntas de hace unos momentos, si lo hiciera, eso lo haría menos emocionante, prefiero dejarlo a tu interpretación

– ¿Ah? No es justo

– No todo en el mundo lo puede ser, chico

– Pues, no estoy de acuerdo

– Sabes, por alguna razón me das la impresión de que eres alguien escéptico, ateo

– no respondió nada –

– Tomaré tu silencio como un sí – sonrió –

– Como sea, eso no tiene nada que ver, y quiero aclarar que aunque sea el caso que sea, respeto creencias ajenas, además el punto inicial es, que
sigo sin estar de acuerdo en que mis dudas no sean respondidas

– Me gusta tu forma de ser, bueno, hagamos esto, juguemos un pequeño juego, si ganas responderé a tus preguntas, pero si gano, todo será a tu interpretación a partir de ahora, aunque sé que tarde o temprano posiblemente te des cuenta y lo vayas resolviendo por cuenta propia, la última palabra la tienes tú, y la cuestión es, ¿Quieres jugar e intentar ganar o esperar y dar con las respuestas a tus interrogantes por ti mismo?

No le había sido difícil el leer a ese chico, estaba 99% seguro de lo que escogería, aunque también estaba conciente que era posible que el caso fuera con el otro 1% lo que eligiera, no siempre veía algo así, y como estaba aburrido, ¿Por qué no ver hasta donde era capaz de llegar el chico?

Permanecer ahí y entrar aún más en su juego, como desde el inicio hizo sin darse cuenta por el simple hecho de ir a dar ahí. O bien, sólo dar media vuelta e irse.

Cabe destacar que, por nada del mundo dejaría al descubierto lo verdaderamente importante y que desde el segundo 1 que lo vió, como objetivo referente a él en su mente se había instalado.

– Quiero aclarar que esto no es algo que escogería normalmente, pero, ciertamente también quiero poner a prueba tu convicción como sé que tú igual quisieras hacer con la mía, mira, ente, persona, personente o lo que seas, no por "misterioso" significa que seas difícil de leer

– rió bajando leve la mirada – Me parece perfecto chico, oye, ya que estamos ¿Cómo te llamas?

Suspiró, pues era lo menos que debía hacer dada la situación, presentarse entre si es que a partir de ahora seguía dialogando con aquel extraño, que no por nada tenía el presentimiento de que su encuentro no sería sólo pasajero además que le había comenzado a crear más curiosidad que en un inicio.

– Roronoa Zoro.

– Yo soy D.

– rió incrédulo – ¿Y ya? ¿Es todo tu nombre?

– Claro, ¿No me crees?

– Eres pésimo mintiendo, ¿Te lo han dicho?

– Si saliera al exterior tal vez

– Ah.... Lo siento

– Na, no te preocupes, de igual forma, soy alérgico a la sociedad allá afuera, aunque claro, tú eres la excepción

– Jum... Cómo sea, deberías decirme tu nombre completo, yo lo hice, es lo justo, o qué, ¿Dirás que le quita lo divertido a la situación siendo que ya te he dicho que eres predecible?

– En primera, ahora lo diré así ya que de la otra forma es más complicado para mí, en fin, en primera me dijiste que era fácil de leer, no predecible, en segunda, sin lo divertido de las cosas, ¿Qué sentido tendría?

– Lo dice el alérgico al mundo allá fuera, además que en teoría es lo mismo

– ¿Crees? No sólo afuera hay entretenimiento, ¿Sabes?

– Como sea, ¿Me dirás tu nombre completo o no?

– Bien, tienes razón, es lo justo decirlo, sólo quería parecer interesante

– Pues a mí me parecería todo menos eso

– ¿Ah sí? ¿Cómo qué?

– sólo le observó inexpresivo –

– Bien bien, lo diré, pero no te enojes chico, eres más lindo si sonríes – guiño –

– Ya dilo mejor – a pesar de recién conocerlo, logró apenarse un poco por ese guiño y no se explicaba si era por reacción de su cuerpo o tal vez otra cosa, no le gustaba divagar en eso pero algo en él sentía que era distinto –

– Soy Monkey D. Luffy, mucho gusto Zoro – hizo una reverencia con su antebrazo enfrente de su estómago y el otro en su espalda baja –

– El gusto es mío

– Oye

– ¿Sí?

– Me gustas

– ¿Qué? Debes estar bromeando, ni siquiera tenemos una hora de conocernos

– Quién sabe, el tiempo puede pasar de manera distinta

– Okay, me empiezas a perturbar un poco por tus disparates

– Sabes, yo no me ando con rodeos, si digo que me interesas es porque así es, además, lo cierto es que luces muy imperturbable

– Estás un poco zafado como para decir algo como eso ni bien me has visto, ¿No? ¿De qué manicomio te escapaste?

– Otro fuera, ya estarías bajo tierra chico – pensó – Querrás decir - de estar un poco aún en la penumbra de aquel árbol, a modo de teletransportación de repente apareció frente a él, sobresaltandolo – de qué Calastillo

– ¿El p–para q–que c–cosa de
q–quien?

– Calabozo/ Castillo – explicó con simpleza –

– ¿Y a final de cuentas qué será? ¿O será ambas cosas? – pensó, el leve miedo o consternación en sí que hace segundos había sentido, fue sustituido por la duda que ahora albergaba en su mente –

– No necesariamente tiene que ser uno o ambos, puede ser cualquier cosa si así lo deseo

– ¡¿ACASO ESTE LOCO TAMBIÉN LEE LA MENTE?!

– Obviamente, se podría decir que estoy fuera del promedio o lo que sería ordinario para ti

– Qué rayos eres tú... Qué tanto as bajo la manga tienes

– Mejor dicho, ¿Quién rayos seré yo? ¿Por qué no lo descubres? – se acercó más a él viéndose un poco intimidante a pesar de la diferencia de estaturas que justo Zoro había notado recién –

Ahora que te he encontrado de nuevo, no me daré por vencido para nada, sabes, no mentí cuando dije que no habría razón por la que te dejaría ir.
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11:18, 20/03/24

Ahí está esta parte, espero les guste, cha chauu!

• B l o o d y  •  H e a r t • { Z o L u } •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora