Capitulo 2 "La Muerte Salva una Vida"

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El tiempo iba pasando y el Gato con Botas era cada vez más conocido, no habia mujer, gatita o princesa que no suspirara por él ¿Lo ironico? A él no le llamaban la atención las mujeres por más hermosas que sean, las gatitas de las patitas más suaves o las princesas de la corona más brillante. 

Una gatita llamada Kitty tambien habia llegado a su vida y, aunque de cierta manera le llamo la atención, no fue suficiente para cautivar su corazón. Empezo a creer que tenia un corazón muerto pues no podia amar a nadie más que a su madre. 

- ¿Y no hay nadie especial en tu vida, Gato? ¿alguna gatita que tengas esperando por ti?

- Mi vida esta llena de demasiado peligro como para pensar en el compromiso ¿Y Humpty dónde esta? Ese huevo se llevo mis ultimas monedas para comprar.. pan.

- ¡Gato! ¡Kitty! ¡miren lo que conseguí!.- venia corriendo con una bolsa de abichuelas en las manos.- ¡las conseguí, pude quitarselas de las manos a esa abuelita!

- ¡Humpty! ¿Pero ¿qué lo que hiciste? ¿dónde esta el pan que le ibamos a llevar a mamá?

- Con esto Gato podremos comprar la panaderia completa ¡ahora vamos, llevemoslo a plantar al Club del Frijol. 

Desde niños se habian propuesto encontrar las abichuelas magicas para encontrar la gansa de los huevos de oro. Habian oido de ella una vez que se metieron a un bar para escuchar a los hombres hablar sobre la leyenda, aunque al final fueron sacados y acusados con su madre por ponerse en peligro por cuentos de hadas. 

Gato aún no recibia sus botas, pero un afortunado accidente con un toro le hizo ganarse el respeto del pueblo y de la propia policia. Su madre estaba más que orgullosa de entregarle las botas a su pequeño héroe. 

Con tiempo la leyenda fue tomando forma siendo reconocido en por los lugares lejanos como un héroe, como el Gato con Botas. 

Pero para su mala suerte, Humpty no estuvo feliz y por una traicion suya termino perdiendo el respeto del pueblo, la confianza de la policia y el amor de su madre. Fueron muchos años separados de las personas que amaba hasta que lo que parecia estar pérdido lo hizo verse de nuevo cara a cara con la Muerte. 

Estaba solo, habia sido traicionado por su mejor amigo, lo ultimo que habia visto fueron los ojos de decepcion total de la mujer que lo acuno en sus brazos, no sabia nada de Kitty ¿qué más podia hacer ahora si no tirarse de un río por todo lo que habia hecho? No merecia vivir, no merecia sus botas, lo habia perdido todo. 

- No merezco estas botas.- se las quito dejandolas a un lado de su cinturón, su sombrero y su espada. Todo lo que el Gato con Botas significaba no valia nada ahora.- No soy nada...

El agua del río era lo suficiente turbulenta para ahogarlo y dejar de ser una verguenza. 

- Tal vez y en mi siguiente vida si pueda ser un héroe de verdad.- Sin embargo, al querer dar un paso al vacío sintió como algo lo jalo hacia atrás y luego lo alzó hacia arriba.- ¡Pero ¿que!? ¿qué es esto? ¿¡quién se atreve a interrumpir mi momento dramatico!? 

- No me digas que ibas a suicidarte tirandote de un río, que manera más patética de morir.

Esa voz, conocia bien esa voz. Levanto la mirada y miro los dos rubís que le examinaban de arriba a abajo. Era la Muerte, lo mantenia sujeto de su guadaña de manera que no le cortaba ni lastimaba. Lo deposito de nuevo en el suelo y Gato aún no salia de su trance. 

- Eres tú, eres real... ¿has venido por mi? ¿te llevaras mi alma? 

- Ah no solo pasaba por aqui y mire a un gatito asustado a punto de desperdiciar una de sus vidas.- se quito la capucha de la cabeza.- ¿Tú que crees? Crei que estaba frente al héroe de San Ricado, no frente a un cobarde. Estuve recibiendo muchas quejas de ti, la mayoria quiere que te lleve conmigo por ser un mentiroso, un farsante y un ladrón. 

Gato se encogio en su lugar al escuchar esas palabras. 

- ¿En serio todos me desean la Muerte? ¿incluso.. mi madre?

- Ella debe amarte mucho a pesar de todo, Vida recibe sus anhelos de que estes bien y que nada malo te haya pasado, a todas horas, todos los días, sin falta. 

- Madre.- susurro con cariño.- Ella sigue creyendo en mi ¿qué es lo que hice? ¡estaba por quitarme la vida! ¡No! ¡debo seguir luchando, por ella!.- se jalo las orejas de frutracion hasta que cayo en cuenta de algo ¿La Muerte le habia salvado la vida?

Le miro y el intimidante lobo seguia siendo exactamente igual a como le recordaba. No es que recordara mucho, era un niño cuando estuvo por primera vez cara a cara con la muerte. Recuerda el ardor de la herida que él mismo le hizo para que no olvidara que debia respetar sus vidas y era lo que menos habia hecho. 

- Bien, creo que mi trabajo se arruino por hoy.- le arrojo sus cosas para que se vuelva a vestir.- Ponte las botas antes de que mueras por un resfriado.- le dijo "despreocupado" antes de caminar hacia el bosque. 

- Espera ¡espera, espera! Tú me salvaste...

La Muerte se detuvo en seco y volteo apenas mirandole por encima del hombro. Pero era tan pequeño comparado con él que tuvo que darse la vuelta completa para mirarlo. 

- ¿Cómo dices?

- Tú me salvaste, lo hiciste aqui en el río y si me lo preguntas es extraño que la Muerte intervenga para evitar que un gato salte por el acantilado ¿por.. por qué lo hiciste?

- Ponte las botas y luego hablamos. 

Gato tomo las botas y se vistio lo más rapido que pudo. El lobo no pude evitar mirar su pelaje que parecia ser de la seda más fina del mundo, sintio la necesidad de tomarlo, de tomarlo, de...

- Ya estoy vestido, ahora decime ¿Por qué no me dejaste caer? Crei que la Muerte te incitaba a acabar com tu vida.

- No parece ser un problema para alguien que tiene más de una vida. No tienes que agradecerme, solo te vi y pensé que estabas bajo el efecto de una planta alucinógena. Esa sí seria una muerte ridicula.- le miro con aquellos ojos rojos que le examinaban con detenimiento.- ¿Quieres saber por que te salve~? Entonces sigueme, he esperado verte por veinte años..

Gato se estremecio con esa voz ronca que le enloquecia. ¿Espero veinte años para verlo de nuevo? Osea ¿ha estado esperando desde que era un niño?

- Entonces ¿vendrás~?

- S-Si, ire contigo.

Y así fue como por primera vez la Muerte salvó una vida

°°La Familia del Gato con Botas°°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora