La Muerte no hace amigos.
La Muerte no tiene distinción.
La Muerte no perdona ni tiene misericordia.
La Muerte no puede amar...
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La Leyenda del Gato con Botas era el cuento preferido de cada niño en cada pueblo, pero no era solo una leyenda para contar antes de irse a la cama sino que guardaba una inusual historia de amor.
Gato habia pasado su vida como un huerfano conociendo a su inseparable amigo, también huerfano, Humpty Dumpty, ambos formaron el club del frijol soñando con que algún dia encontrarian los frijoles magicos y los plantarian para trepar hacia el tesoro del gigante.
Su comprensiva madre, la señora Imelda, conocia los anhelos de suss hijos hacia la grandeza, pero tambien debia hacerles entender que los sueños más grandes provienen de los más pequeños y que debian siempre tomar el camino del bien. Gato lo habia entendido, pero Humpty era diferente.
- ¡Te lo digo de verdad, gato! ¡Mamá quiere que seamos conformistas y no podemos permitir esto!.- bufó y se sentó a un lado de su amigo.- El club de frijol debe ser lo mejor de lo mejor ¿pero como podemos progresar? Mmmm ¡ah, ya se! ¡practiquemos a trepar los arboles y así seamos más rapidos cuando trepemos hacia el castillo!
- Eh, no creo que..
- ¡Rápido Gato, antes que mamá venga!
Tomó la mano del felino y lo jalo con él hacia el arbol más alto de San Ricardo. Una caída desde la cima y seria el fin de los dos, sobretodo del niño huevo.
- Este es el ideal ¿no crees?
- Eh Humpty ¿no crees que esta demasiado alto.. para ti?
- ¿De qué hablas? Si no trepamos hasta la cima de este arbol no podremos trepar hacia nuestro tesoro ¿estas conmigo o no hermano?.- Gato asintio con algo de duda.- ¡Bien! Además, los gatos siempre caen de pie.
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- ¡GATOOO! ¡NOOOOO!
Cayó por salvar a Humpty que no se sujeto bien de una rama, uso toda su fuerza y el peso de su cuerpo para que se volviera a sujetar, pero entonces él cayó desde la cima del arbol.
- ¡GATOOOOO CAE DE PIE, CAE DE PIE!
Cerró los ojos con fuerza y al segundo despertó en un lugar totalmente diferente, miro a los lados y solo vio a una persona con una capa negra y una guadaña muy afilada, pero como él era un niño lo describiria como un cuchillo muy grandote. Aquel silbaba una melodia que no sabria como describirla.
- Eh señor, disculpe ¿qué es este lugar?.- parece que no le habia escuchado y con algo de temor se acerco más a el encapuchado.- ¿Quién es usted? ¿donde estoy?
Sonrió mostrando sus afilados colmillos.
- Pequeño gatito, bienvenido al limbo. Es la delgada linea entre la vida y la muerte.
- Eso no es posible ¿q-quien es usted? ¿qué estamos haciendo aqui?
- ¿Qué quien soy? Crei que ya debias saberlo..
La figura se levantó asustando al gatito naranja que dio pasos hacia atrás. Era un lobo alto, muy alto y no sus ojos rojos no le daban ninguna confianza, vestido con ropas negras y rasgadas cubriendo sus orejas con una capucha donde solo resplandecian sus dos ojos rubí.
Sonrió mostrando sus afilados colmillos.
- Yo soy la Muerte.
El menor sentia su corazón bombear con fuerza, este Lobo era tenebroso y sus lados no habia nadie más que ellos. Su madre le habia dicho que no hablara con extraños, pero si este extraño decia ser la Muerte ¿qué más podia hacer?
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°°La Familia del Gato con Botas°°
FanficGato vuelve a reunirse con sus amigos después de un tiempo con una ENORME sorpresa.
